domingo, 14 de junio de 2020

URSS ¿Fue un sistema socialista? ¡En absoluto! https://vientosur.info/spip.php?article13135



EN SOLIDARIDAD CON LOS INMIGRANTES : https://www.facebook.com/SindicatoSAT/posts/10155890360463296/

ACTUALMENTE, EN EL INICIO, PROBABLE, DE UNA GUERRA CIVIL UNIVERSAL,...DE QUÉ VALE UNA CONSTITUCIÓN SOCIALISTA EN LA NUEVA AMÉRICA,...¿¿¡¡ ES REACCIONARIA Y DE NACIONAL-COMUNISMO,...¡¡.??¡¡. LA REVOLUCIÓN SERÁ UNIVERSAL,...HAY QUE SEGUIR TRABAJANDO PARA ESO,...LOS ESTADOS NACIONALES AUNQUE QUIERAN O DESEAN SER SOCIALISTAS, ESTÁN CADUCAS ESAS TEORÍAS Y PRETENSIONES,...Y MENOS LOS EE.UU. DE AMÉRICA DEL NORTE --EE.UU. N. --. LA PATRIA DE LA HUMANIDAD OBRERA POPULAR Y RESISTENTE REVOLUCIONARIA -- NO HAY FRONTERAS Y ESTADOS NACIONALES HA CONSTRUIR POR LOS COMUNISTAS NI POR PROLETARIOS REVOLUCIONARIOS, -- ES EL PLANETA,...OTRA COSA ES QUE SE DIERA DE FORMA COYUNTURAL Y POR NECESIDADES POLÍTICAS ESTRATÉGICAS,...¡¡. ( A ).

QUE ME GUSTA, POR NECESIDAD Y ANSIEDAD ENCONTRAR TRABAJOS SOBRE LA URSS,...¡¡. Y AQUÍ ESTÁ VIENTO SUR,...WEB QUE YA CONOCÍA Y QUE UTILICEÉ ALGUNA QUE OTRA VEZ,...¡¡ : 

ME RECUERDA LA AFOTO, UNA CASI IDÉNTICA DEL AGUELICO FRASQUITO,...¡¡. LA BUSCARÉ EN LA MÁQUINA,...¡¡.                                                                                              Lmm.

https://vientosur.info/spip.php?article13135




URSS
¿Fue un sistema socialista? ¡En absoluto!
24/10/2017 | Denis Paillard
Con el título Rusia/URSS/Rusia. 



El libro de Éditions Page Deux y Éditions Syllepse reúne ocho textos de Moshe Lewin* (en adelante M.L.). Seis de estos textos, redactados a comienzos de los años 90, fueron publicados en inglés en una recopilación con el mismo título Russia/USSR/Russia (The New Press, 1995)< 1/. En el anexo se puede encontrar un texto de síntesis sobre la represión y los campos de concentración. Como indica el título, no hemos querido centrar esta recopilación en el año 1917 y la Revolución de Octubre, sino tratar de la historia de los setenta años en que existió la URSS, desde el acontecimiento fundador de Octubre 1917 a la implosión del sistema al final de la Perestroika. Para M.L., historiador, el hecho de focalizar todo en Octubre 1917 y la revolución victoriosa dirigida por el partido bolchevique suele ser indicio de un desinterés por los acontecimientos que le siguieron, en beneficio de discusiones sin fin sobre la naturaleza del régimen surgido de Octubre −esta ignorancia o este desinterés por la historia de estos setenta años se suele traducir, tanto en la derecha como también en la izquierda, en el recurso generalizado al término “totalitarismo” para caracterizar al régimen.

¿Qué es la URSS?

Lo que está en juego en los debates sobre la naturaleza del régimen soviético es la cuestión del comunismo: ¿fué (o no) la URSS un país comunista?

Para la burguesía, sus ideólogos y sus historiadores, la respuesta no tiene ambigüedad: URSS = comunismo = estalinismo = Gulag. Esta ecuación pretende descalificar de una vez por todas la idea de una alternativa al capitalismo y, en esta perspectiva, la desaparición de la URSS significaría también de una vez para siempre el "final del comunismo" 2/. Se puede citar en Francia, entre otros muchos, a François Furet, André Glucksmann y a los autores del Libro negro del comunismo. El impacto del Libro negro del comunismo fue considerable. Jean Pierre Garnier, en un artículo de Le Monde Diplomatique (enero 2009), menciona incluso la organización de un debate con S. Courtois en la Federación anarquista (sic).

Esta ecuación URSS = comunismo se encuentra también, con una simple inversión de los signos, entre quienes consideran que el comunismo se realizó en la URSS, aunque por lo general con una reserva importante: sólo en los tiempos de Stalin. Esta tesis, muy defendida en el pasado en el movimiento comunista, sigue teniendo defensores hoy día: se puede citar a Domenico Losurdo y su libro Stalin. Historia y crítica de una leyenda negra (Éditions Aden, Bruselas, 2011); la obra de dos miembros del PC americano, Roger Keeran y Thomas Kenny El socialismo traicionado, Las causas de la caída de la Unión Soviética (publicado en francés por ediciones Delga); y Ludo Martens [dirigente del PTB belga], autor del libro Otro Stalin, uno de los pocos autores que reivindica y justifica totalmente el exterminio por Stalin de la vieja guardia bolchevique, lo que le lleva a citar como dirigentes bolchevique en 1917 (además de Lenin y, por supuesto, Stalin) a Molotov, Zhdanov y Malenkov (!).

La cuestión de la naturaleza de la URSS se vuelve más compleja cuando se cuestiona la relación entre la URSS y el comunismo, y más en general con el socialismo 3/. Se pueden distinguir tres grandes posiciones. Para los defensores de la teoría del capitalismo de Estado 4/, la opresión de los trabajadores bajo Stalin significa que el régimen no se podía asociar en ningún caso con el socialismo. La segunda posición, reflejada recientemente en el libro de Roger Martelli ¿Qué queda del Octubre ruso? (Éditions du Croquant, 2017) considera, con más o menos reservas, que la URSS tiene relación con el comunismo. Según Martelli, la URSS (incluido el período estalinista) simboliza la forma dominante del "comunismo en el siglo XX". La tercera posición tiene su origen en la obra de Leon Trotsky La Revolución traicionada 5/. Al caracterizar a la URSS como un Estado obrero burocráticamente degenerado, Trotsky define a la sociedad soviética como una sociedad en transición entre el capitalismo y el socialismo, cuestión que deberá ser resuelta en un sentido (vuelta al capitalismo tras una contrarrevolución burguesa) o en el otro (construcción de una sociedad socialista con la eliminación de la burocracia). El estallido del sistema soviético ha zanjado la cuestión: Rusia es hoy día un país capitalista sin que por ello se pueda hablar de “contrarrevolución” 6/.

Se suele recurrir a caracterizaciones en términos de “socialismo existente” o incluso de “socialismo real” [una fórmula aparecida inicialmente en la RDA: “real existierender Sozialismus”] para destacar lo que sería la ambivalencia del sistema (sin definir por ello en qué sentido hablar de socialismo en el caso de la URSS, a no ser como forma de señalar que no era capitalista). Como veremos más en detalle, M.L. tiene una posición muy categórica en esta cuestión de la relación de la URSS con el socialismo: "¿Era un sistema socialista? En absoluto. El socialismo consiste en que los medios de producción son propiedad de la sociedad y no de una burocracia. El socialismo siempre ha sido concebido como una profundización de la democracia política, y no como su rechazo. ¡Seguir hablando de “socialismo soviético” es un verdadero despropósito! Es sorprendente que el debate sobre el fenómeno soviético se haya hecho, y se siga haciendo, en estos términos. Si delante de un hipopótamo alguien insistiera en que se trata de una jirafa, ¿se le concedería una cátedra de zoología?" (El Siglo soviético) 7/.

Estas distintas posiciones sobre la naturaleza de la URSS, por contradictorias que sean, tienen en común el hecho de considerar como un todo 8/ los setenta años en que ha existido la URSS, donde sólo opera la cuestión de la naturaleza del sistema político y económico establecido tras la revolución de Octubre, sin tener en cuenta a la sociedad, su evolución en el plano social, nacional y cultural, ni las complejas relaciones que se desarrollan entre esta sociedad y el poder. Esta cuestión conduce a un atolladero cuando se abordan las razones del estallido de la Unión Soviética en base a sus propias contradicciones: el sistema se hundió sin que hubiera ni oposición interna organizada ni agresión procedente del exterior. Para M.L., el hundimiento del Imperio soviético se explica en lo fundamental por el divorcio entre un poder burocrático totalmente esclerotizado y la emergencia desde los años 60 de una sociedad de dominante urbana y educada (sobre este punto, cf. más adelante). El otro factor que interviene de manera central en los debates sobre la naturaleza de la URSS es la gran interferencia entre la cuestión de la URSS como tal y la situación del movimiento obrero a escala internacional: a lo largo de todo el siglo XX, la existencia de la URSS y la referencia a Moscú fueron decisivas y sobredeterminaron los debates y las orientaciones del movimiento obrero en los diferentes países y continentes 9/.

El enfoque desarrollado por M.L. en esta recopilación y en otros textos (comenzando por El Siglo soviético), introduce una doble ruptura respecto a estos debates: por una parte, la historia de la URSS no es lineal, está hecha de continuidades y de discontinuidades, de fases dinámicas y de momentos de crisis, en los que se recrea la cuestión del régimen; por otra parte, para M.L., ya lo hemos dicho, la URSS no era un país socialista.

Continuidades y discontinuidades en la historia de la URSS

M.L. considera que es crucial distinguir diferentes períodos y su encadenamiento para comprender lo que fue ese “continente desaparecido”. Los recordamos brevemente, remitiéndonos para más precisiones a los textos de M.L.

─ La revolución de Octubre fue una auténtica revolución dirigida por un partido revolucionario, el partido bolchevique. A su vez, en cuanto a lo que está en juego en 1917, es importante considerar lo que escribió Trotsky al comienzo de la primera parte de la Historia de la Revolución rusa: "La ley del desarrollo desigual y combinado −en el sentido de una combinación singular de elementos de atraso y de factores totalmente nuevos− se presenta ante nosotros en su forma más acabada y por ello mismo nos da la clave del principal enigma de la revolución rusa. Si la cuestión agraria, heredera de la barbarie de la historia de la antigua Rusia, hubiese sido resuelta por la burguesía, si hubiese sido resuelta entonces, el proletariado ruso no habría llegado en ningún caso al poder en 1917. Para que se creara el Estado soviético, hizo falta la convergencia y la interpenetración de dos factores de naturaleza histórica totalmente diferente: por un lado, la guerra campesina, característica de los comienzos de la era burguesa, por otro un levantamiento proletario, un movimiento que marca el declive de la sociedad burguesa. En esto consiste el año 1917" 10/.

── La Guerra civil (1918-1922) consagró la victoria de los bolchevique, pero las enormes destrucciones ocasionadas por esta guerra y el aislamiento del nuevo Estado en ausencia de revoluciones en el Oeste significaron un cambio de perspectiva en la construcción del nuevo Estado, con el período de la Nueva Política Económica (NEP). Como escribe Pierre Rolle, "La realidad del comunismo de guerra es la guerra" 11/. Ver en esta recopilación el texto La Guerra civil. Dinámica y consecuencias.

── Para M.L., la NEP fue un período relativamente tranquilo de reconstrucción, señalado en diferentes textos de la recopilación; viene marcado por la toma de control del partido y del aparato de Estado por Stalin, con la derrota de las diferentes oposiciones, la Oposición de izquierda y la llamada Oposición de derecha de Bujarin.

── El período estalinista va de finales de los años 1920 a la muerte de Stalin en 1953. M.L. insiste en la necesidad de no convertir al término estalinismo en un término genérico para designar a la URSS, sino en reservar el término para designar el período en que Stalin está en el poder. Además, recalca que es necesario distinguir entre el estalinismo dinámico de los años 30 (colectivización, industrialización a marchas forzadas, terror y grandes procesos) y un estalinismo en crisis en los años de postguerra −sobre este segundo período, nos remitimos al capítulo 12 titulado Final de partida, en la segunda parte de El Siglo soviético. En cuanto al período de guerra, significó el ascenso potencial de la burocracia de Estado, muy vejada y reprimida por Stalin en los años 30: es la que aseguraba el funcionamiento del país. En cuanto a Stalin, aunque generalísimo, nunca corrió el riesgo de ir al frente 12/.

── Los años 1950-1960 hasta la eliminación de Jruschov en 1964 estuvieron marcados por el XX Congreso del PCUS, con la denuncia (parcial) del período estalinista, un período de reformas y de liberalización relativa del régimen. En su libro Political Undercurrents in Soviet Economic Debates (Pluto Press, 1974), M.L. se refiere a los debates sobre los problemas económicos (se reflejan en distintos textos de la recopilación), pero también al nuevo rostro de la sociedad soviética, de mayoría urbana y educada, y a su relación con un poder cada vez más desconectado de la realidad: "Para un observador atento, no es difícil distinguir toda una gama de opiniones diferentes, políticas, religiosas, nacionalistas, autoritarias, democráticas, liberales y fascistas, por no hablar de diferentes corrientes éticas y filosóficas. La ideología oficial es desde luego compartida por algunos, aunque en general sólo ofrece estereotipos utilizados de manera puramente formal en ocasiones solemnes, en su mayor parte sin relación alguna con la realidad. Se puede formular la hipótesis de que, bajo las apariencias de una proclamada homogeneidad política, existe en la sociedad rusa una realidad política subterránea, formando potencialmente e incluso desde ya mismo un amplio espectro de opiniones". Y añade: "Es un hecho que el partido en sus tomas de posición oficiales ha manifestado sensibilidades políticas poco ortodoxas, y estas opiniones sólidamente instaladas se pueden ver en el creciente papel del nacionalismo [gran ruso], a veces bajo una forma virulenta".

── El período de estancamiento (fin de los años 1960 – 1986) siguió a la depuración de Jruschov (1964) y vio la llegada al poder de Leonid Brezhnev. Este período estuvo marcado por la voluntad de acabar con los debates sobre la urgencia de reformas económicas y por mantener a cualquier precio un monolitismo de fachada 13/. Refiriéndose al Plenario del Comité Central de diciembre de 1969, M.L. escribe: "El plenario suprimió importantes aspectos de las reformas económicas, si no ya su propia alma, y las sustituyó por llamamientos a la disciplina. Había que reforzar los controles y la implicación del partido, y se presentaron las políticas de movilización a iniciativa del partido como la única respuesta a las dificultades y a los disfuncionamientos crecientes de la economía". Y añade: "La obsesión del partido por querer conservar todas las cartas en sus manos dificultó el juego". De hecho lo hizo imposible. El sistema quedó poco a poco bloqueado y acabó por estar totalmente paralizado. Estas cuestiones se abordan en el texto Informe de autopsia y en la parte III de El Siglo soviético, capítulos 6 y 7.

── La perestroika y el final de la URSS (1986-1991). Como ya hemos indicado antes, la URSS se hundió bajo el peso de sus propias contradicciones, a causa de un divorcio entre un poder burocrático, obstinado en no reformarse, y una sociedad que se había vuelto urbana y educada. En El Siglo soviético, M.L. escribe: "El poder ha perdido esta capacidad [para abordar reformas en todos los planos], lo que le ha llevado a una serie de paradojas: el partido estaba despolitizado, la economía burocratizada estaba gestionada y controlada por una burocracia más atenta a conservar su poder que a hacer avanzar la producción, más preocupada en preservar confortables rutinas que en desarrollar la creatividad y la innovación tecnológica (…). En resumen, una verdadera fórmula mágica para que el sistema deje de funcionar". Y lo formula de manera lapidaria: "Un sistema económico sin economía, un sistema político sin política" 14/.

Esto es lo que escribe Galina Rakitskaja sobre el período 1989-1991: "En 1989-91, la movilización de fuerzas sociales en Rusia (y en general en la URSS) tomó la forma de una revolución antiburocrática y democrática (…). La derrota en agosto de 1991 de los miembros de la nomenklatura que habían intentado oponerse al más alto nivel a dichos cambios [se trata del intento de putsch de las fracciones duras de la burocracia en agosto de 1991. D.P.] debería haber abierto la vía de las transformaciones democráticas, respondiendo a los intereses de la mayoría de la población. En realidad, los políticos liberales radicales, tras haber consolidado su poder, emprendieron reformas dirigidas contra el pueblo, siguiendo el modelo de la terapia de choque" 15/. Refiriéndose a la privatización salvaje de la casi totalidad de la economía, M.L. habla del mayor "atraco del siglo"

── Otro punto en que M.L. insiste en muchas ocasiones, como lo subraya el título de esta recopilación, es que no se puede separar el período soviético de la Rusia anterior a 1917 y posterior a 1991. Aborda la cuestión en dos textos: Rusia / URSS en el movimiento de la historia. Un intento de interpretación y Rusia entre reformas y marginalización. Se refiere sobre todo a dos cuestiones. En primer lugar, la cuestión campesina: en 1917, los campesinos representaban casi el 90 % de la población. Para dar cuenta de este peso del campesinado, M.L. habla de la "conexión agraria" e insiste mucho, sobre todo en Rusia/URSS en el movimiento de la historia. Un intento de interpretación, en que esta "conexión agraria" ocupa un lugar central hasta final de los años 1930. Nos referirnos también a la cita de Trotsky antes señalada. La otra cuestión es la permanencia del nacionalismo gran-ruso, que atraviesa toda la historia de la URSS, ya se trate del debate que enfrentó a Lenin y a Stalin en el momento de la creación de la URSS, de la celebración por Stalin de la Santa Rusia y los zares autócratas (el propio Stalin se consideraba un autócrata), y también la existencia de corrientes nacionalistas rusas muy activas dentro del aparato del partido-Estado desde los años 1960. Esta cuestión es abordada en detalle en el texto Nacionalismo de nuestro tiempo. El caso de Rusia 16/.

La URSS y el socialismo

En el texto El Socialismo soviético. Un error de etiquetación, M.L. desarrolla con amplitud esta idea: a no ser que se confunda “socialización” con “nacionalización-estatización” de la economía, no se puede hablar de “socialismo” en la URSS; lo que le lleva a cuestionar la idea de que “no capitalista” signifique mecánicamente “socialista”.

Antes de 1917, teniendo en cuenta el peso del campesinado, Rusia era una sociedad precapitalista, con un sector capitalista en vía de desarrollo rápido, pero muy dominado por el capitalismo europeo. Al final del texto El Socialismo soviético, haciéndose eco de la cita de Trotsky sobre la revolución rusa, escribe:

"Si algún día emergiera una economía de mercado estable en la ex−URSS, podríamos concluir que el papel del período soviético ha consistido en realizar aquello en lo que el capitalismo ruso fracasó de partida: hacer nacer una sociedad industrial, urbana y educada, capaz de integrarse de verdad en el sistema económico actual. Esto marcaría el cierre de un ciclo y no la apertura de una nueva época en la historia de la humanidad".

Y un poco antes de este pasaje, haciéndose eco de los debates sobre la naturaleza de la URSS, escribe:

"Aunque tenemos algunas dificultades en caracterizar el sistema soviético, no tenemos en cambio ninguna duda sobre lo que era y lo que no podía ser. Por eso los slogans que han proliferado (aunque hoy se vuelven más discretos) afirmando que el hundimiento de la Unión Soviética habría significado “la muerte del socialismo y del marxismo”, no son más que ideología “pura” y sólo pueden inducir a error. El socialismo, como ideal que pretende más democracia y una ética social exigente, nunca ha existido como sistema en ningún sitio. El sistema soviético, un sistema más bien atrasado, no presentaba ninguna de las características del socialismo. El régimen que se hacía llamar soviético, y hasta comunista, pertenece a la clase de formaciones sociales que combinan “subdesarrollo” y “estatismo”, es un caso particular de poder burocrático".

En este texto (y también en el último capítulo de El Siglo soviético), M.L. no aborda sólo de un modo negativo la cuestión de la naturaleza del sistema soviético. En relación directa con la necesidad de distinguir diferentes períodos en la historia de la URSS, propone dos caracterizaciones distintas, una para el período estalinista, la segunda para el período post-estalinista, aunque insiste en que estas caracterizaciones no reflejan plenamente la singularidad del sistema. Sólo pretenden destacar una característica esencial. Para el período estalinista, propone hablar de "despotismo agrario", dado el lugar que ocupa la conexión agraria. Para el período post-estalinista, defiende la idea de un “absolutismo burocrático”.

El chovinismo gran-ruso y la burocracia

En el debate sobre el lugar de las nacionalidades en la URSS en formación, el 6 de octubre de 1922, Lenin hizo pasar a Kamenev una nota donde escribió: "Yo declaro la guerra, no una pequeña guerra, sino una guerra a vida o muerte al chovinismo gran-ruso". Y calificaba a Stalin (y a Ordzhonikidze) de "brutos gran-rusos". El chovinismo gran-ruso denunciado de forma tan violenta por Lenin se convertirá, al cabo de los años, en una componente esencial de la ideología del poder bajo Stalin; sobre todo después de la Segunda Guerra mundial, y también durante el período post-estalinista.

El conflicto entre Lenin y Stalin sobre la cuestión de las nacionalidades es muy conocido tras el libro de M.L. El Último combate de Lenin, aparecido en 1967 [editado en castellano en 1970, Lumen]. En El Siglo soviético, en base a nuevos documentos aparecidos después de la perestroika, M.L. retoma la cuestión (1ª parte, cap. 2, Autonomías vs. Federación 1922-23). En fin, en el texto Nacionalismo de nuestro tiempo. El caso ruso, a la vez que vuelve a este período clave de la formación de la Unión Soviética, amplía la cuestión a toda la historia soviética. El término derzava, heredado del período zarista 17/ y que designaba a un estado fuerte y poderoso, se va imponiendo como una referencia positiva para designar al Estado soviético, aunque para Lenin, como lo recuerda M.L., derzavnik era una expresión absolutamente negativa, utilizada en su polémica con Stalin "para designar al partidario de un nacionalismo ruso opresor y brutal". Esta conversión de derzava de término negativo en término positivo para designar al Estado, revela los cambios radicales que operan en la ideología de los dueños del Kremlin.

El texto Ego y política. La autocracia estaliniana analiza ampliamente dos componentes del estalinismo, la política de terror y la celebración de Rusia como derzava, esto es una Rusia que siempre ha sabido resistir y vencer a sus enemigos. Una componente central del terror estaliniano fue la fabricación sistemática y a gran escala de enemigos. A la pregunta “¿cuál era la lógica de esta fabricación sistemática de enemigos?”, M.L. responde: "Es la lógica de un hombre con inmensos poderes que inventaba [subrayado nuestro, D.P.] hordas de enemigos sin fin, tenía tanta necesidad de ellos que los fabricaba a voluntad para probar que estos enemigos existían y eran vencidos y castigados por una policía secreta".

Esta fabricación de enemigos de todo género conocerá una nueva orientación después de la guerra con el resurgimiento del nacionalismo gran-ruso y su corolario, el antisemitismo. Este giro es indisociable de la manera como Stalin fue fabricando su propia leyenda, en tres etapas, en ruptura con la herencia bolchevique. La primera etapa corresponde a la toma de control por Stalin del partido y del aparato de Estado con la eliminación sucesiva de las diferentes oposiciones (años 20). La segunda corresponde al exterminio físico de toda la vieja guardia bolchevique (años 30). La tercera es la afirmación de un poder absoluto, en ruptura total con el período revolucionario y en continuidad con la autocracia zarista. «Para Stalin, el hecho de subrayar las afinidades de su régimen con el Imperio y de reivindicar raíces históricas comunes, sobre todo refiriéndose a la construcción del Estado por el más crueles de los zares, hizo posible una redefinición radical de su propio personaje, pero también de la identidad ideológica y política del sistema y de sus raíces" (…) "En adelante, la ideología, el sistema de poder, los escenarios, estaban tomados de un pasado mucho menos dinámico, con símbolos arcaicos y obsoletos": adopción de un nuevo himno conmemorando la Santa Rusia, establecimiento de tribunales de honor en las esferas dirigentes del partido y del Estado; en los ministerios, los altos funcionarios debían llevar uniforme y sus títulos estaban directamente tomados del cuadro de rangos instituido en su corte por el zar Pedro el Grande. En los años 40, Andrei Zhdanov lanzó una virulenta campaña contra el cosmopolitismo y la fascinación de la intelligentsia por Occidente. Comentario de M.L.: "La ideología zhdanoviana es la de Stalin. Marca el punto culminante de sus derivas ideológicas. En adelante estará fascinado por el glorioso pasado zarista. (…) Pero lo más grave de este bricolaje ideológico es el nacionalismo ruso extremo, de rasgos protofascistas, del estalinismo en declive" 18/.

Después de la muerte de Stalin, la burocracia se preocupó en desembarazarse de la parte más negra de la herencia estaliniana: denuncia del culto a la personalidad, fin del terror, supresión de los tribunales de honor y del cuadro de rangos para altos funcionarios, paralización de las campañas oficiales contra el cosmopolitismo y del llamado proceso de las Batas blancas contra médicos judíos. Pero hizo plenamente suyo el culto al Estado fuerte. M.L. utiliza el término estatismo, aunque sería más justo, como veremos, hablar de nacional-estatismo.

"El estatismo se convirtió entonces en una ideología en toda regla, recurriendo a eslóganes pretendidamente socialistas (nacionalización) y a temas del autoritarismo tradicional ruso (aunque sin exhibir las imágenes de los autócratas del pasado zarista). Después de la muerte de Stalin aparecieron distintas corrientes ideológicas, de forma insidiosa y subterránea, hasta llegar a manifestarse abiertamente. Los cambios que conoció la sociedad soviética tras la muerte de Stalin acarrearon la reemergencia de corrientes subterráneas en la sociedad, lo que tuvo repercusiones incluso en el seno del propio partido, tanto en la base como a nivel del aparato, dando nacimiento a un conglomerado de ideologías, tendencias y corrientes que nada tenían que ver con el monolito marxista-leninista imperturbablemente proclamado tanto en el Este como en el Oeste" (Ego y política. La autocracia estaliniana).

La burocracia del Estado y del partido estaba fragmentada, llena de fracciones, cliques y redes dentro de las distintas instancias del poder, reagrupándose en juegos de alianzas más o menos duraderas en base a intereses comunes y posiciones ideológicas más o menos compartidas. Estas distintas componentes de la burocracia tenían en común la celebración de la URSS (en realidad, de Rusia) como derzava (“estado fuerte”). Se había eliminado toda referencia a la revolución de Octubre, en adelante la Segunda Guerra mundial (“la Gran Guerra patriótica”) simbolizará la grandeza de la URSS, proclamada como superpotencia. Hubo un reforzamiento de la política de asimilación de las otras nacionalidades, las instancias superiores del poder central están compuestas en un 86 % de rusos (y de hermanos eslavos, biolorrusos y ucranianos) y se desarrolló una forma de antisemitismo de Estado pretendiendo excluir a los ciudadanos judíos de toda una serie de instituciones: KGB, Estado Mayor del ejército, Ministerio del Interior y Ministerio de Asuntos Exteriores y muchas otras.

En su texto sobre el nacionalismo ruso, M.L. señala el desarrollo de corrientes nacionalistas rusas en el seno mismo del aparato del partido y del Estado. Durante sus estancias en Rusia en los años 1990, después de la desaparición de la URSS, le sorprendió la multiplicación de organizaciones nacionalistas rusas, incluso abiertamente fascistas 19/; una cosa le pareció evidente: los animadores de estos movimientos no venían de “ninguna parte”. Pero a comienzos de los años 1990 existían pocas fuentes fiables, más allá de los trabajos de algunos investigadores occidentales. Diez años más tarde, en la propia Rusia, existía ya una documentación abundante. En 2003 aparecía en Moscú el libro de Nikolai Mitrohin, “Russkaja Partija. Dvizenie russkih nacionalistov v SSSR 1953-1985” (“El partido ruso. El movimiento de los nacionalistas rusos en la URSS 1953-1985”), una obra de más de 600 páginas, basada en entrevistas y en la lectura de las memorias de muchos antiguos responsables del poder que no dudaban en hablar “a cara descubierta” de las ideas y las convicciones que tenían en realidad en el pasado 20/. El cuadro es impresionante y es difícil informar en detalle, visto el gran número de protagonistas, y también la extrema diversidad de organizaciones e instituciones a que se refiere. Nos limitaremos a algunos puntos.

─ El libro está lleno de anécdotas, extraídas de memorias y de entrevistas, muy reveladoras del doble lenguaje en marcha, donde los altos responsables se presentan como verdaderos Dr. Jekyll y Mr. Hyde ideológicos. Como ejemplo, citamos el relato que hace Ju. Tonkov, un alto responsable de propaganda del Komsomol en los años 60, de una velada en casa del pintor I. Glazunov, nacionalista y antisemita de primera hora 21/, cuyo taller era un lugar de encuentro de los nacionalistas: "Nos sentamos a la mesa, todos los presentes son miembros del partido, entre ellos Torsuev, secretario del Comité Central del Komsomol. Y Glazunov declara: “Sueño con el día en que colgaremos a todos los comunistas”. Y todos se echan a reir" (p. 348).

─ Hay nacionalistas en todas las instancias dirigentes del partido, Politburo, CC del PCUS, Komsomol. El caso más revelador es el del grupo formado por antiguos altos responsables del Komsmol de los años 1940-1950 en torno a A. Shelepin, sucesivamente primer secretario del Komsomol (1952-1958), presidente de la KGB ante el Consejo de Ministros de la URSS (1958-1967), secretario del CC del PCUS, miembro del Politburo (1964-1975) 22/. La mayor parte estuvieron directamente implicados en las campañas antisemitas de finales de los años 40 y comienzos de los años 50. En los años 50 y 60 desarrollaron campañas, junto a la KGB y prolongando las lanzadas por Zhdanov en los años 40, contra las ideas liberales (pro-occidentales) en el seno de la intelligentsia y contra el cosmopolitismo. Shelepin fue el principal artesano de la destitución de N. Jruschov.

─ Esta actividad del grupo de Shelepin se desarrolló en el Komsomol con el nombramiento de S. Pavlov en 1962 como primer secretario del Komsomol. Mitrohin caracteriza así la ideología del grupo de Pavlov: anti-occidentalismo virulento, admiración por Stalin presentado como el constructor de un Estado fuerte, celebración de la Gran Guerra patriótica como momento de movilización intensa del pueblo soviético en defensa de la patria, necesidad de reforzar la educación militar y la militarización de la juventud, antisemitismo y glorificación de la Gran Rusia. Además de los responsables del Komsomol, el grupo de Pavlov asocia a sus actividades a personalidades famosas, como el escritor Mijail Shólojov, el cosmonauta Yuri Gagarin e incluso al pintor Ilia Glazunov.

─ En esta época, el Komsomol creó toda una serie de asociaciones concebidas como espacios que podían servir de tapadera para desarrollar más libremente estas actividades: la Universidad del joven marxista (sic), el club Patria, el Club Búlgaro-Soviético de jóvenes creadores. El Komsomol controlaba toda una serie de publicaciones, del diario Komsomolskaja Pravda a la revista Molodaja Gvardija (“Joven Guardia”). La destitución de Pavlov en 1967 (tras la marginación de Shelepin por el clan Brezhnev) no puso fin a la actividad de los nacionalistas rusos. Su sucesor a la cabeza del Komsomol, E. Tiajelnikov, defendía las mismas orientaciones −acabará dirigiendo el Departamento de Propaganda del CC del PCUS (1978-1982). Los demás consiguieron encontrar otras administraciones e instituciones donde continuar sus actividades, ya fueran diferentes departamentos del CC del PCUS o redacciones de las numerosas revistas controladas por los nacionalistas.

Aunque hasta finales de los años 60 las diferentes corrientes nacionalistas estaban todavía muy marcadas por la herencia estaliniana y la referencia a Stalin simbolizando la construcción de Rusia como derzava, en los años 70 y hasta 1985 los nacionalistas se replegaron del nivel pansoviético a las instituciones de la REFSR (la república de Rusia) y, a diferencia del grupo de Shelepin y del grupo de Pavlov, renunciaron a una intervención directa en el plano político. La referencia a Stalin se fue haciendo cada vez más rara.

Se pueden distinguir dos espacios distintas, aunque articulados, donde los nacionalistas rusos concentraron sus actividades.
1º Las corrientes nacionalistas controlaban la redacción de gran número de publicaciones: diarios como Sovetskaja Rossija (“Rusia Soviética”), semanarios como Ogonek, revistas de gran tirada como Molodaja Gvardija (“Joven Guardia”), Nas Sovremennik (“Nuestro contemporáneo”), Oktjabr (“Octubre”) y también casas editoriales ligadas o no a estas revistas. Las revistas, en primer lugar Molodaja Gvardija, llevaron una ofensiva extremadamente violenta contra la revista “liberal” Novyj Mir y su redactor jefe A. Tvardovski, quien fue destituído en 1970. La importante sección de la Unión de Escritores de Moscú estaba completamente controlada por nacionalistas.

2º Otro momento importante fue el movimiento por la preservación de los monumentos históricos; ante todo edificios religiosos, iglesias y monasterios. Otro rodeo para celebrar la Rusia anterior a 1917. Durante el verano de 1965, con la garantía del Consejo de Ministros de la República de Rusia, se creó la Sociedad Panrusa de conservación de monumentos históricos y culturales (VOOPiIK). Tres de los miembros del Comité de organización fueron importantes nacionalistas, entre ellos el pintor I. Glazunov y el escritor Leonid Leonov. Miembros del grupo de Shelepin y del grupo de Pavlov fueron también muy activos. Aún controlado por los nacionalistas rusos, VOOPiIK se transformó rápidamente en una organización de masas: en 1972 contaba con 7 millones de miembros, en 1985 con 15 millones.

Durante los años de la perestroika y sobre todo tras el hundimiento de la URSS, esta temática se desarrolló abiertamente. Y el Partido Comunista de la Federación de Rusia fue un vector importante. Sobre este tema, nos remitimos a los artículos citados en la nota nº 19.

En cuanto al impacto de estas corrientes nacionalistas sobre la sociedad, se puede pensar que quedó muy limitado, con excepción de la asociación VOOPiIK. Como subraya Mitrohin, el terreno de acción privilegiada de los nacionalistas rusos era ante todo el espacio del poder (partido y Estado), espacio del que ellos mismos eran parte integrante.

Totalitarismo y URSS: la sociedad invisible

La utilización, generalizada en la derecha pero por desgracia también en la izquierda, de la noción de totalitarismo para hablar de la URSS es sobre todo el signo de un desinterés por la realidad del país, su historia, su sociedad; todo se reduce a una caracterización, a veces caricaturesca y simplista, del poder 23/; en la izquierda suele ser una manera de pasar página, o más bien de despedazarla, sobre una historia de revolución que ha ido mal.

En setiembre de 1991, Ian Kershaw, especialista en el tema del nazismo, y Moshe Lewin organizaron en la universidad de Filadelfia una conferencia internacional sobre el tema: “Estalinismo y Nazismo: Comparativa de Dictaduras”, cuyas actas fueron publicadas en 1997 con el título Nazismo y Estalinismo (Cambridge University Press). El objetivo de la conferencia pretendía ser precisamente una respuesta a los (numerosos) que ponen (con o sin reservas) un signo de igualdad entre nazismo y estalinismo, extendido por algunos a comunismo.

En la introducción al volumen y en el Postfacio, I. Kershaw y Moshe Lewin explican que la legitimación de la comparación se basa en la existencia de algunos rasgos comunes (en ambos casos se trata de “dictaduras”) que definen lo “comparable”, pero que el trabajo de comparación pretende identificar las características singulares de los dos sistemas en todos los terrenos, incluida la política de represión y los campos de concentración. Y cuestionan con toda pertinencia a la utilización de la noción de totalitarismo.

En Mi visión de la historia (En Los Senderos del pasado, Syllepse/Page Deux), M.L. escribe a propósito de la escuela totalitaria dominante entre los historiadores de la URSS en los Estados Unidos: "La escuela totalitaria no veía en todo este asunto más que una purga permanente, o dicho de otra forma, no veía ni pasado ni futuro. Sólo una especie de eterno presente (a menos que algo, con toda probabilidad llegado del exterior, lo hiciera cambiar), donde el Estado es fundamentalmente un mecanismo de control y de adoctrinamiento, y donde la sociedad sólo existe como prolongación del Estado. En esta concepción tan plana no hay ningún lugar para un mecanismo de cambio, y la figura de Jruschov y la desestalinización, por limitada que haya podido ser, le dieron un buen golpe. No es difícil ver que la visión totalitaria era en sí misma un instrumento de la batalla ideológica desencadenada por la Guerra Fría. Era absolutamente inadecuada, no porque el estalinismo no haya sido la máquina mortífera que efectivamente lo ha sido, sino porque el sistema entero se volvía de una complejidad siempre creciente, lo que no hacía sino reducir la pertinencia de estos conceptos" (p. 89).

En esta cita, M.L. destaca un punto importante, característico de la visión más extendida de la URSS, mucho más allá de la escuela histórica totalitaria: "la sociedad sólo existe como prolongación del Estado". Esta invisibilidad de la sociedad es en su origen el producto de la capa de plomo que el poder ha hecho pesar sobre la sociedad, pretendiendo prohibir toda palabra o manifestación no conforme. Pero invisibilidad no significa que la sociedad fuera pasiva, muda y sin reacciones. Muy al contrario.

En los diferentes textos reunidos en Los Senderos del pasado, M.L. habla de su experiencia y de sus encuentros con los de abajo: los miembros de un koljós cerca de Tambov donde pasó algunos meses, los obreros de la fundición en los Urales donde estuvo destinado [cuando llegó, muy joven, a la URSS] o incluso el recuerdo de una velada en un aislado koljós (a 50 km de la estación más cercana): alrededor del fuego, los miembros del koljós pasaban la noche cantando canciones de los campos de concentración y canciones de amor, y recitando astuski, breves poemas satíricos que ridiculizaban los slogans oficiales.

Desde el comienzo, en todo su trabajo de historiador, M.L. ha pretendido estudiar la sociedad, hacer visible sus diferentes componentes. De partida, lo esencial de sus trabajo tuvo que ver con el campesinado (que, recordemos, en el momento de la Revolución representaba el 90 % de la población). Su tesis, defendida en los años 60, es el primer estudio en profundidad de la colectivización 24/. En muchos trabajos posteriores (sobre todo, los que figuran en La Formación del sistema soviético 25/, continúa su estudio del mundo campesino, insistiendo en que los campesinos (los campesinos rusos en este caso) no son simplemente “los que cultivan la tierra”: el mundo campesino constituye un mundo rico y complejo, no sólo en el plano social, sino también cultural y religioso. En un texto (no incluído en esta recopilación) que figura en Russia/USSR/Russia, “The Village ant the Community: ‘Molecular Energy’ in Rural Societies”, trata de la reactivación de la organización comunitaria del campesinado ruso durante la NEP. Sobre esta cuestión de la comuna rusa no es inútil recordar que Marx, al final de su vida, se había apasionado por la comuna campesina en Rusia y las nuevas perspectivas que abría 26/.

Paralelamente a sus trabajos sobre el campesinado y la colectivización, M.L. extendió sus trabajos al conjunto de la sociedad en los años 1930. En La Formación del sistema soviético, insiste en el hecho de que durante este período el poder fracasa precisamente en su voluntad demente de control absoluto de todos los ámbitos de la vida de la sociedad. La colectivización y la industrialización a marchas forzadas pusieron de hecho patas arriba a la sociedad, "una sociedad de arenas movedizas" 27/. Esta situación se trata también en la primera parte de El Siglo soviético así como en varios textos de esta recopilación.

Sobre la base de estos trabajos y de la inmensa documentación que reunió, M.L. estaba preparando un gran estudio (en tres volúmenes) sobre la sociedad soviética de los años 1930. Pero los acontecimientos ocurridos en la URSS, la destitución de Jruschov, los debates sobre la reforma económica y su brutal paralización, el frenazo a la liberalización del sistema, llevaron a M.L. a abandonar los años 1930 y a preguntarse por las transformaciones de la sociedad soviética después de la muerte de Stalin. Su trabajo en profundidad sobre los años 1960 se presentó en el libro ya citado Political Undercurrents in Soviet Economic Debates (1975). Tomando en serio la opinión del académico Nemchinov ("Un sistema político hasta tal punto paralizado de arriba abajo sólo puede frenar el desarrollo técnico y social, y se hundirá pronto o tarde bajo la presión de los verdaderos procesos de la vida económica"), se pregunta por la capacidad misma del régimen para sobrevivir.

La sociedad y el poder

Después del hundimiento del sistema, la voluntad del poder pretendiendo prohibir y reprimir toda protesta, toda palabra no conforme, se transformó en su contrario. Los archivos del NKVD y de la KGB (encargados de la represión), y también de otras administraciones e instituciones, han resultado ser verdaderas minas de información sobre la realidad de la sociedad, sobre el estado anímico de amplias capas de la población.

Un primer ejemplo lo proporciona el libro de Sarah Davies Popular opinion in Stalin’s Russia. Terror, Propaganda and Dissent (1997, Cambridge University Press). Este libro se basa en la explotación de los archivos del NKVD de la región de Leningrado en los años 1930, donde figuran los casos de represión de personas por delitos de opinión o protestas, y también numerosas peticiones y cartas dirigidas a dirigentes (estas cartas, muchas veces anónimas, fueron conservadas) 28/. En la medida en que se trata de casos que han sido objeto de medidas de represión, se puede pensar que sólo muy parcialmente refleja la situación real. Leyendo el libro, sorprende la cantidad y la extrema diversidad de las manifestaciones disidentes y las críticas del poder. El capítulo 8, titulado ‘Nosotros’ y ‘Ellos’. Identidad social y Terror (donde ‘ellos’ designa a los representantes del poder) es particularmente apasionante.

Un ejemplo entre otros lo aporta la deformación de un slogan oficial: “Quien no trabaja no come”, se convierte en “Quien no trabaja [los burócratas del partido, D.P.] no sólo come sino que también bebe vino, mientras que quien trabaja sólo puede zampar mierda”. Otro ejemplo de esta crítica social del poder lo ofrece la deformación de las siglas oficiales o de algunas palabras. M.L. da un ejemplo en el texto sobre los obreros: O.R.S.: Otdel Raboego Snabzenija (“Departamento de avituallamiento obrero”) se convierte en Obspei Ran’se Sebja (“Sírvete primero”), y también en Ostal’noe Raboim i Sluzasim (“El resto para los obreros y empleados”). Citemos otro caso de deformación, la palabra SPORT (‘deporte’) se convertirá en Sovetskoe Pravitel’stvo Organizovalo Raboij Terror (“el gobierno soviético ha organizado el terror contra los obreros”). Otra manifestación de la crítica del poder son también las anécdotas, muy numerosas. Citemos una, muy política, sacada del Boletín de la Oposición (nº 38-39, p. 21): "Lenin resucita y descubre que se encuentra en un sólido edificio vigilado por soldados. −Debo estar en prisión, la contrarrevolución ha triunfado. Encuentra un teléfono y llama a Trotsky. Le responden que no hay ningún Trotsky. Lo que le confirma la idea de que la contrarrevolución ha triunfado. Llama a Rykov al Comisariado del Pueblo, a Zinoviev en el Komintern, a Bujarin a la redacción de Pravda. Todo ello sin resultado. −Pero puede que el partido siga existiendo, se dice Lenin. Llama al Secretariado del Comité Central. −¿Camarada Stalin? −¿Qué pasa? Lenin le expone la situación. Mientra le escucha, Stalin coge otro teléfono y llama a la Gepeú: −El Viejo [Stalin se refería de esta manera despectiva a Lenin. D.P.] chochea, quiera saber demasiado, haced que se calme".

Los obreros: resistencias individuales y colectivas

Un texto de la recopilación está dedicado a la situación de los obreros (Los obreros en busca de una clase. Entre ‘personalidad’ y ‘clase’), abordando desde distintos ángulos la situación de los obreros soviéticos, incluida la cuestión de saber si formaban o no una clase 29/. No vamos a abordar esta cuestión que, para M.L., expresa "un juego del escondite histórico". Se puede recordar lo que Trotsky escribió en La Revolución traicionada, donde citando a Pravda opone la propaganda oficial a la situación real de los obreros: "[De creer a Pravda] el obrero no es, en nuestro país un esclavo asalariado, un vendedor de trabajo-mercancía. Es un trabajador libre (Pravda). En la actualidad esta fórmula elocuente no es más que inadmisible fanfarronada. El paso de las fábricas al poder del Estado no ha cambiado mas que la situación jurídica del obrero; de hecho, vive en la necesidad trabajando cierto número de horas por un salario dado". Por su parte, en el postfacio a la obra ya mencionada, L.H. Siegelbaum y R. Suny escriben: "No hay ninguna duda de que una fuerza de trabajo industrial ha existido y crecido durante las dos primeras décadas y media del poder soviético. Sus miembros se consideraban ciertamente parte de una clase obrera, pero habían perdido el espacio político en el que podían desarrollar la forma como se representarían a sí mismos y definir sus propios programas". Y M.L. cita en varias ocasiones esta frase con que se definen los obreros: "No se nos considera seres humanos".

En la considerable masa de trabajos dedicados a la URSS, la parte dedicada a los obreros es ridículamente débil 30/ −lo que en cierta medida revela la fijación en la caracterización/denuncia del régimen, pero también una hipótesis, explícita en los trabajos soviéticos oficiales y más o menos repetida en el Oeste: en su inmensa mayoría, los obreros se adherían al poder soviético y apoyaban al régimen.

Esto es particularmente cierto en las publicaciones en francés. La única obra importante es la de Jean Paul Depretto, Los obreros en URSS 1928-1941 (Publications de la Sorbonne, 1997), un libro muy rico en informaciones históricas, sociológicas y que da una primera idea de las diferentes formas de resistencia obrera durante este período. En cambio, en los países anglosajones, en los años 1990 y sobre todo después, los trabajos sobre los obreros basados en el acceso ya posible a diferentes archivos, han comenzado a ofrecer un cuadro impresionante de la situación de los obreros y de las diferentes formas de resistencia, individuales y colectivas, desde finales de los años 1920 al período de la perestroika 31/: huelgas y manifestaciones de masas, motines de hambre, ralentización de la producción (conocido en Rusia con el nombre de huelga a la italiana), violencias contra las administraciones y también actos de resistencia individual.

Vamos a citar brevemente algunos aspectos de resistencias individuales, así como la huelga de primavera de 1932 en una fábrica textil de la región de Ivanovo y los acontecimientos de Novotcherkassk en 1962.

Las resistencias individuales

La importancia de las resistencias individuales es la consecuencia de la política del poder, transmitida por el aparato de los sindicatos, de prohibir cualquier forma de acción colectiva, de destruir, como subrayan L-H. Siegelbaum y R. Suny, toda conciencia de clase, por medio de una atomización en la que cada obrero se encuentra solo frente al arbitrio del poder y de la dirección de la empresa. De hecho, los obreros están profundamente despolitizados y alienados. Pero a pesar de esta situación, desde los años 30 a la perestroika, aún con todas las medidas represivas y también los incentivos materiales, el poder, en su obsesión por controlar todo desde arriba, se ha mostrado incapaz de forzar/persuadir a los obreros a trabajar eficazmente, esto es, como lo entendía el poder.

En un texto Labour discipline and the decline of the Soviet system 32/, D. Filtzer traza un cuadro preciso de este fracaso “en meter en vereda a la clase obrera”, un fracaso que no ha dejado de jugar un papel en el hundimiento del sistema. Como conclusión, Filtzer escribe: "La industrialización estaliniana dio lugar a relaciones laborales específicas en las cuales los obreros no estaban en posición de hacer frente a las élites del poder y ni siquiera a los directores de empresas, que constituían una entidad colectiva movilizada para defender sus objetivos económicos y objetivos políticos más amplios. Sin embargo, la naturaleza burocrática del sistema y la ausencia de planificación, bloqueando toda forma de regulación económica sistemática, hicieron que los obreros pudieran reaccionar negativamente en el mismo lugar de producción. No se puede hablar propiamente de una resistencia sino más bien de acciones defensivas e individualizadas por parte de una mano de obra atomizada y despolitizada. Los obreros se volvieron una de las fuentes del declive del sistema en el plano económico, lo que Jruschov y Gorbachov reconocieron cuando defendieron la necesidad de hacer reformas" 33/.

Filtzer destaca tres elementos principales: 

1º, la considerable movilidad de los trabajadores; 

2º, el control del tiempo de trabajo; 

3º, una forma de connivencia/complicidad entre los obreros y la dirección de la empresa frente a las exigencias del Centro 34/. Retomemos brevemente algunos puntos del análisis más detallado de Filtzer sobre los puntos 1º y 2º, aunque precisando que los términos utilizados (movilidad de la mano de obra / control del tiempo de trabajo / connivencia con la dirección de la empresa frente a los dictados del Centro) son términos administrativos de connotación negativa, que designan no ya las resistencias, sino los principales espacios donde se desarrollan esas resistencias. Las sucesivas políticas puestas en marcha, utilizando alternativamente la zanahoria y el palo, fueron reacciones del poder frente a los problemas, más que políticas predefinidas por el Centro para formatear el comportamiento de los obreros.

1º Movilidad

Por movilidad (o rotación) hay que entender el hecho de que los obreros cambian frecuentemente de trabajo, un fenómeno posible por la penuria de mano de obra. En los años 1930, la rotación era extremadamente elevada. A comienzos de los años 1930, como media, un obrero cambiaba de trabajo cada seis meses, en 1936 cada catorce meses.

La principal causa era la caída brutal del nivel de vida así como las reducciones del salario, por ello la búsqueda permanente de un nuevo empleo mejor pagado. El absentismo y el retraso en el trabajo, debidos también a las enormes dificultades de la vida cotidiana y al estado calamitoso de los transportes, eran también un fenómeno masivo. En la prensa abundaban las denuncias de los elementos asociales de todo tipo (trotskystas 35/, miembros de las antiguas clases poseedoras, y otros saboteadores). El poder adoptó en distintos momentos una legislación represiva orientada a luchar contra el absentismo y la rotación. Para los años 1940, Filtzer da la cifra de un millón de trabajadores sancionados por absentismo y de 200 000 trabajadores reprimidos por haber cambiado de trabajo sin autorización −en sí mismas, estas cifras muestran la importancia del fenómeno.

A partir de los años 1950, el poder abandona la política puramente represiva e intenta tener en cuenta el hecho de que la movilidad de los trabajadores debe ser interpretada como una reacción frente a las condiciones de vida y al nivel muy bajo de los salarios. Además, y M.L. menciona este punto en varias ocasiones, los directores de empresas multiplican las medidas para retener a los trabajadores 36/, constituyen reservas de mano de obra, lo que, como contrapartida, contribuye a alimentar la penuria de mano de obra. En los años 1970, el déficit en mano de obra se estima en 700 000 trabajadores, un déficit reforzado además por la explosión de la “economía a la sombra” 37/ y por el elevado número de personas que trabajan “por su cuenta”.

2º Control del tiempo de trabajo

Un rasgo característico es la débil utilización del tiempo de trabajo, así como una productividad muy baja. En particular, la política oficial de control se traduce a nivel del proceso productivo en una parcialización máxima de las tareas (un puesto − una operación), lo que significa, de hecho, una desorganización por arriba del proceso de producción: los obreros no tienen ninguna responsabilidad sobre un trabajo puramente mecánico y repetitivo, ni una comprensión del proceso de producción en el que participan. Como escribe Filtzer: "Esta sobre-individualización del trabajo ofrece muchas posibilidades a los obreros para apropiarse de amplias porciones de su jornada de trabajo. Es imposible separar este no-respeto de la disciplina laboral de las pérdidas de tiempo debidas al disfuncionamiento del sistema". En cierta medida, cada cual trabaja para sí, a su ritmo. Esta falta de coordinación tiene un gran coste económico, sobre todo por el hecho de la penuria de piezas que, en un momento u otro, bloquea el proceso. Se calcula en 15% el tiempo de trabajo perdido (o sea, 30/40 días al año).

Las resistencias colectivas

Como subrayan Filtzer y otros autores, en los años del primer plan quinquenal las resistencias colectivas fueron más numerosas 38/. Sobre el período post-estalinista, M.L. considera, apoyándose en un libro aparecido primero en Rusia y después en inglés (Mass Uprisings in the USSR. Protest and Rebellion in the Post-Stalin Years, Vladimir A. Koslov, 2002) 39/, que los levantamientos populares no fueron más de seis, siendo el de Novotcherkassk en 1962 el más conocido.

Las huelgas en las fábricas textiles en la región de Ivanovo en la primavera de 1932
El libro de J. Rossman, Worker Resistance under Stalin: Class and Revolution on the Shop Floor, describe una serie de huelgas que explotaron en 1932 en las fábricas textiles de la región de Ivanovo. En la web libcom.org se puede encontrar un capítulo de este libro dedicado a la huelga de la fábrica textil de Teikovo, en primavera. Esta largo texto describe las increíblemente duras condiciones de vida y de trabajo de los obreros (una mayoría eran mujeres) 40/ y el relato día a día de la huelga del 7 al 17 de abril de 1932. El autor concede un amplio espacio a los debates sobre las formas de organización, a la personalidad de los líderes del movimiento así como a las reacciones de las autoridades locales y de Moscú. Por último, cuenta la represión del movimiento y las concesiones hechas por el poder tras esta huelga y otras que tuvieron lugar en la misma época en la región de Ivanovo.

El levantamiento de Novotcherkassk en 1962

Este levantamiento se conoce mejor; un primer relato de los acontecimientos figura en el Archipiélago Gulag de Solzhenitsyn. Otros relatos han aparecido después. El más interesante se encuentra en un folleto publicado en Moscú en 1992, con el título Novotcherkassk 1-3 de junio de 1962. La huelga y el tiroteo, resultado de una larga entrevista de David Mandel con Piotr Sjuda, uno de los participantes en el movimiento, que fue condenado a 12 años de campo de concentración. Esta entrevista habla también de la detención en el campo de concentración y la vida de Piotr Sjuda, obrero disidente, tras su liberación, su visión de la clase obrera soviética que no idealiza en absoluto, su crítica del régimen (Sjuda era el hijo de un bolchevique ejecutado por Stalin en los años 30). En 1990, Sjuda, que participaba activamente en los acontecimientos ligados a la perestroika, murió en un accidente de coche.

Las razones que estuvieron en el origen del movimiento fueron el descenso de los salarios y un aumento de los precios de los alimentos básicos; estas medidas suscitaron un profundo descontento entre los obreros. La huelga estalló el 1 de junio en la fábrica eléctrica tras un tormentoso encuentro con el director de la empresa que se burló abiertamente de los obreros y de sus problemas. Desde el primer día de la huelga, las autoridades hicieron intervenir sin éxito a soldados con vehículos blindados, pero los huelguistas obstaculizaron a los vehículos y los soldados se retiraron. Durante un mitin que tuvo lugar a las puertas de la fábrica, algunos oradores sugirieron enviar delegaciones a otras fábricas y a otras ciudades, pero al final del día la ciudad quedó aislada del resto del país. A la mañana del día siguiente, todo el barrio donde se encuentra la fábrica fue invadido por soldados y tanques, y comenzaron las detenciones masivas. Una imponente columna de varios miles de personas se dirigió al centro de la ciudad, a los gritos de "dejad pasar a la clase obrera", y se reunió en la plaza principal donde se encuentra la sede regional del partido, que fue tomada al asalto.

En ese momento se dio orden de abrir fuego contra los manifestantes, provocando una matanza. Una delegación del Politburo, con Mikoyan a la cabeza, llegó a Novotcherskassk pero se contentó con sobrevolar a la muchedumbre en un helicóptero y con una intervención, amenazadora en la radio. El movimiento terminó el 3 de junio por la mañana. Fue el comienzo de una represión muy dura: más de un centenar de personas fueron condenadas a altas penas de campo de concentración, siete manifestantes fueron condenados a muerte por “bandidismo”.

A modo de conclusión: la historia como reto

En La Revolución traicionada, hablando de la URSS, Trotsky cita la frase de Spinoza "ni reir ni llorar sino comprender". En el texto Para una historia de la clase obrera soviética, Pierre Rolle escribe: "La historia del mundo cuando admita la historia soviética como uno de sus desarrollos, será seguramente muy distinta de la que se ha construído excluyendo esta experiencia" 41/.

Al final de El Siglo soviético, M.L. cita las muy extendidas opiniones que hay actualmente en Rusia, procedentes muchas veces de antiguos burócratas que pretenden rechazar en bloque el período soviético: "En paralelo a esta campaña mentirosa y nihilista se asistió a una forma de búsqueda frenética de otros pasados que puedan ser propuestos a la nación para que se identifique con ellos (…) Después, cuando el rechazo de todo lo que era soviético se volvió demasiado fuerte, volcándose en el odio a Lenin, el leninismo y el bolchevismo, presentados como emanaciones del infierno, se intentó rehabilitar a los Blancos de la Guerra Civil, el ala derecha más retrógrada del espectro político del zarismo, que perdió la batalla porque no tenía nada que ofrecer al país".

Ante esta situación, M.L. insiste en que es necesario que los rusos se reapropien del pasado soviético: "La historia es un remedio que debe permitir recubrir una identidad y un futuro". En cierta manera, esta invitación de M.L. se dirige también a quienes piensan que el combate por el socialismo tiene todavía sentido hoy.

* Moshe Lewin nació en 1921 en Vilnius, entonces Polonia. Murió el 14 de agosto de 2010 en París. Moshe Lewin es el historiador de referencia para lo que tiene que ver con la historia social de la URSS y, entre otros, de su período estaliniano. Es autor de numerosas obras y artículos, entre los cuales citaremos:

─La Paysannerie et le pouvoir soviétique : 1928-1930, Ed. Mouton, París-La Haya, 1966
─El último combate de Lenin. Edición en castellano Lumen 1970)
─The Political Undercurrents of Soviet Economic Debates : From Bukharin to the Modern Reformers, Princeton University Press 1974 ; se hizo una reedición en 1991 con el titulo: Stalinism and the Seeds of Soviet Reform : The Debates of the 1960’s
─The Making of the Soviet System. Essays in the Social History of Interwar Russia, Pantheon, Nueva York, 1985
──The Gorbatchev Phenomenon: A Historical Interpretation, University of California Press, Berkeley, 1988.
─Stalinism and Nazism : Dictatorships in Comparison, Cambridge University Press, 1997 (en colaboración con Ian Khershaw)
─El Siglo soviético. Edición en castellano Crítica, 2006. Reedición en 2017 con el título: El siglo soviético. ¿Qué sucedió realmente en la Unión Soviética?
Notas:


1/ La obra en inglés es más importante y presenta dieciséis textos, entre ellos uno sobre la situación del campesinado durante la NEP, tres textos sobre el fenómeno burocrático, uno sobre la industrialización y uno más sobre la planificación, titulado The disappearance of Planning in the Plan.
2/ De forma un tanto sorprendente, Enzo Traverso en La Melancolía de izquierda (La Découverte, 2016) hace aparentemente suya la tesis de que el hundimiento de la URSS significaría el fin del comunismo.
3/ Sobre los debates relativos a la naturaleza de la URSS, se puede citar también a Marcel van der Linden, Western Marxism and the Soviet Union: A Survey of Critical Theories and Debates Since 1917, Haymarket books (2009); John Eric Marot, The October Revolution in Prospect and Retrospect. Interventions in Russian and Soviet History, Haymarket books (2013); y Thomas Twiss Trotsky ant the Problem of Soviet Bureaucracy, Political Science, University of Pittsburgh (2009).
4/ Se puede citar, entre otros, a Tony Cliff y el SWP inglés, así como a Raya Dunayevskaya, cf. su libro recientemente aparecido en Éditions Syllepse, Marxisme et liberté.
5/ La Revolución traicionada no era el título original del libro, que en ruso se llamaba ¿Qué es la Unión Soviética y a dónde va?, destacando la inestabilidad del régimen desde el punto de vista de su caracterización.
6/ La tesis de la contrarrevolución (versión ‘conspiratoria’) es defendida en cambio por los admiradores incondicionales de Stalin antes mencionados.
7/ Como veremos más adelante, para caracterizar el régimen soviético M.L. utiliza el concepto de estatismo, introducido por el sociólogo americano Eric Olin Wright en su texto: "En busca de una brújula de la emancipación. Hacia una alternativa socialista", publicado en la web de la revista Contretemps (2011). Olin Wright propone distinguir tres modos alternativos de organización de las relaciones de poder a través de los cuales los recursos económicas son asignados, controlados y utilizados: el capitalismo, el socialismo y el estatismo.
8/ Aunque con una focalización en el período estalinista donde el régimen se presenta en estado puro. El período postestalinista, ya se trate de Jruschov o de Brehznev y el llamado período de ‘estancamiento’ (zastoj) han tenido la consecuencia de complicar la cuestión.
9/ A este nivel, los cuatro tomos del Boletín de la Oposición de izquierda (en ruso), publicados de 1929 a 1941 (87 números en total) resultan ejemplares: la denuncia del régimen establecido por Stalin y la construcción de un movimiento a escala internacional en el resto del mundo son las dos componentes de un solo y mismo planteamiento.
10/ Trotsky insiste sobre este punto al final del tomo 2.
11/ P. Rolle, Le travail dans les révolutions russes, Éditions Page Deux, 1998, p. 232.
12/ Un historiador soviético, Mijail Gefter, ha caracterizado el período de la guerra como "desestalinización fallida".
13/ M.L. cita la valoración que hizo en 1973 el académico V. Nemchinov sobre los disfuncionamientos y atascos del sistema: «Un sistema político hasta tal punto paralizado de arriba abajo sólo puede frenar el desarrollo técnico y social, y se hundirá pronto o tarde bajo la presión de los verdaderos procesos de la vida económica»; esta cita figura también en El Siglo soviético.
14/ Sobre la burocracia, hay que remitirse también a El Siglo soviético, III, capítulo 6, titulado El Laberinto burocrático, y más en particular a la parte De un sistema de partido único a un sistema ‘sin partido’.
15/ Extraído de "El Estado y las perspectivas del movimiento obrero", en: V. Garros (ed.), Russie postsoviétique: la fatigue de l’histoire, ediciones Complex, 1995. Galina Rakitskaja y Boris Rakitski han jugado un papel importante en la reconstrucción de un movimiento sindical de luchas en Rusia.
16/ Más adelante volveremos a tratar de la explosión del nacionalismo en la Rusia postestalinista.
17/ Así como sus dos derivados samoderzec, que designa al “maestro absoluto’ (el zar ‘autócrata’) y samoderzavie que significa ‘autocracia’.
18/ Cf. El Siglo soviético, III, cap. 6, Fin de partida.
19/ Sobre las corrientes nacionalistas en el período post-soviético, nos remitimos a tres de nuestros artículos: “Les nationalistes, les communistes et le phénomène patriotique”, en V. Garros (ed.) Russie post-soviétique: la fatigue de l’histoire (ediciones Complexe), p. 135-152; “Les héritiers du PCUS: entre stalinisme et national étatisme”, Cahiers Marxistes, 214, diciembre 1999; y “La Russie de Guennadi Ziuganov”, Critique Communiste, 146 (1996), p. 14-19.
20/ Las posiciones defendidas por G. Ziuganov, secretario del Partido Comunista de la Federación de Rusia en muchas publicaciones son particularmente expresivas. Citemos en particular el folleto Derzava y el titulado Yo soy ruso de corazón y de sangre.
21/ En tiempos de la URSS, I. Glazunov era un pintor muy oficial, decorado con el título de ‘artista del pueblo de la URSS’; en 1978, una exposición de sus obras tuvo lugar en Carrusel, la principal sala de exposiciones de Moscú.
22/ La lista de miembros del grupo y de sus funciones que aporta Mitrohin es impresionante: un miembro del Politburo (además de Shelepin), varios miembros del CC del PCUS, responsables de diferentes departamentos del CC del PCUS, altos responsables de diferentes ministerios, el redactor jefe de Izvestija, de Komsomolskaja Pravda y de Sovetskaja Rossija.
23/ Sobre el uso más que abusivo de la noción de “totalitarismo” aplicado a la URSS y en general a los países del Este, se puede leer el artículo, muy polémico, pero corrosivo, de Alain Brossat “Misère et grand-peur de l’idéologie du totalitarisme”, Critique communiste 55 (1986). En este artículo, Brossat hace una distinción esencial entre la teoría del totalitarismo de Hannah Arendt y la ideología del totalitarismo. Sobre la cuestión de la "exportación" de la noción de totalitarismo de Hannah Arendt para tratar a la URSS (Agnès Heller, Claude Lefort, Cornelius Castoriadis) se puede leer el capítulo 4 Totalitarianism del libro de Ph. Hansen Hannah Arendt. Politics, History and Citizenship, Polity Press (1993).
24/ La paysannerie et le pouvoir soviétique 1928-1930, París / La Haya, Mouton, 1966.
25/ Primera publicación en 1987 en Gallimard; republicado en 2013 en la colección Tel Gallimard.
26/ Sobre esta cuestión, cf. Pierre Dardot y Christian Laval, Marx, Prénom: Karl, Gallimard (2012); Kevin B. Anderson Marx aux antipodes (capítulo sobre los escritos tardíos), Syllepse & M editor (2015); y sobre todo el libro de Teodor Shanin Late Marx and the Russian Road, Marx ant the ‘Peripheries’ of Capitalism, Monthly Review Press, 1983.
27/ Este análisis de los años 30 ha sido desarrollado por otros historiadores, en particular R. Suny y Sh. Fitzpatrick.
28/ Ejemplo de carta (anónima) dirigida al Comité del partido de Leningrado: "Lo mejor sería borrar del mapa a todos los dirigentes del poder soviético para que dejen de insultar a la clase obrera… Ya es hora de dejar de burlarse de la clase obrera. También, eso es lo que os queda por hacer a vosotros los jefes: si no se bajan los precios de los alimentos, un 40% para el pan, os va a ir mal. Dejad de esclavizar y de burlaros de la clase obrera".
29/ Esta cuestión es muy discutida en la Introducción a la obra de donde está sacado el texto de M.L. (Making Workers Soviet: Power, Class and Identity, 1994).
30/ El primer trabajo sistemático es el de S. Schwartz Los obreros en la URSS (1956).
31/ Citemos en primer lugar los distintos libros, apasionantes, de Donald Filtzer: Soviet Workers and Stalinist Industrialization: The Formation of Modern Soviet Production Relations, 1928-1941, Londres, Pluto Press, 1986, 338 p., Soviet Workers and De-Stalinization: The Consolidation of the Modern System of Soviet Production Relations, 1953-1964, Cambridge University Press, 1992, 340 p., reed. 2002, The Khrushchev Era: De-Stalinization and the Limits of Reform in the USSR, 1953-1964, Londres, Macmillan Press, 1993, 104 p., Soviet Workers and the Collapse of Perestroika: The Soviet Labour Process and Gorbachev’s Reforms, 1985-1991, Cambridge University Press, 1994, 316 p., Soviet Workers and Late Stalinism: Labour and the Restoration of the Stalinist System After World War II, Cambridge University Press, 2002, 294 p., reed.. 2007, The Hazards of Urban Life in Late Stalinist Russia: Health, Hygiene, and Living Standards, 1943-1953, Cambridge University Press, 2010, 379 p. La otra obra importante es la de Jeffrey J. Rossman Worker Resistance under Stalin: Class and Revolution on the Shop Floor, Cambridge, Mass., Harvard University Press. En el libro ya citado de S. Davies, Popular opinion in Stalin’s Russia, un capítulo está dedicado a las reacciones de los obreros, y el capítulo 8 sobre ‘nosotros’ y ‘ellos’ contiene también mucha información.
32/ Este texto está accesible en la página web libcom.org. En esta web se encuentra también el texto de J. Rossman sobre la huelga de una fábrica textil en Teikovo en 1932 (cf. más abajo).
33/ En Political Undercurrents in Soviet Economic Debates, M.L. traza un cuadro detallado de los disfuncionamientos de la economía y de las consecuencias para los obreros.
34/ El ejemplo más conocido es la resistencia multiforme de los obreros y de las administraciones de las empresas para neutralizar el movimiento ‘estajanovista’ en los años 30.
35/ En esta época, la etiqueta trotskysta se utiliza extensamente para denunciar a todos los enemigos del régimen.
36/ Recordemos que en la URSS toda una serie de servicios (en particular, la vivienda) eran por lo general un recurso de las empresas, que podían utilizarlos para hacer presión sobre los obreros.
37/ M.L. dedica a este fenómeno todo un capítulo de El Siglo soviético (“Distinguir la luz de la sombra”, IIIª parte, cap. 7).
38/ Cf. en particular Depretto (1984) Les ouvriers en URSS, p. 286-297 y Donald Filtzer (1986), Soviet Workers and Stalinist Industrialization: The Formation of Modern Soviet Production Relations, 1928-1941
39/ Por desgracia, el autor de este libro se contenta con recoger sin distancia crítica las informaciones dadas por los archivos oficiales. Libro publicado en ruso, traducido al inglés por Elaine McClarnand, Ed. Routledge.
40/ Ocasión para recordar que una manifestación de las obreras del textil de Petrogrado fue la que marcó el inicio de la revolución de febrero de 1917.
41/ P. Rolle, op. cit.



URSS | Estalinismo | Socialismo ))....




( A ) : EN PRIMER LUGAR, FELICIDADES Y SALUD RESISTENCIA REVOLUCIONARIA AL PUEBLO RESISTENTE Y ANTIFA DE LOS EE,UU, DEL N. Y AL PUEBLO AFROAMERICANO,...CREEMOS SABER DE LOS AMERICANOS EN GENERAL SON MUY PATRIOTAS,...PERO HOY, AYER Y MAÑANA LA PATRIA ES EL PLANETA,...Y EL SISTEMA SOLAR, A TENER EN CUENTA, PERO NO MALTRATARLOS,...¡¡. ESTAS PALABRAS A CONTINUACIÓN ES DEBATE, NO A MUERTE,...NO HACE FALTA,...SOBRE EL CARÁCTER PENDIENTE DE LA REVOLUCIÓN SOCIAL Y UNIVERSAL QUE ESTÁ EN MARCHA,...¡¡ Luky de málaga, españa. :

AL SER EE-UU- DEL N. UN ESTADO RAMIFICADO INTERNACIONALMENTE,...Y APOYADO POR DECENAS DE ESTADOS, SI SE HICIERA REVOLUCIÓN SOCIALISTA REPERCUTIRÍA EN CASI LA MITAD DEL PLANETA,...EN SU TERRITORIO PARTICULAR AMERICANO TAMBIÉN REPERCUTIRÍA EN AMÉRICA LATINA,...CANADÁ,...QUE ESTÁ TRAUMATIZADO SU PRIMER MINISTRO TRUDEAO,...REINO UNIDO, SE QUEDARÍA AISLADO,...¡¡, Y CASI SIN NORTE POLÍTICO,...LA UNIÓN EUROPEA TAMBIÉN QUEDARÍA AFECTADA YA QUE LAS FUERZAS MILITARES YANQUEES Y SUS BASES SE TENDRÍAN QUE DESAPARECER,...ETC,... ( Y CÓMO SE PREVEÉ DE SANGUINARIA ESTA POSIBLE GUERRA CIVIL UNIVERSAL,...¡¡ ??. ) O LAS DEJARÍAN TANTO EL NUEVO GOBIERNO SOCIALISTA REVOLUCIONARIO AMERICANO Y LOS ESTADOS EUROPEOS, ESPAÑOL, ALEMÁN, BELGA, ITALIANO PORTUGUÉS, GRIEGO,...¡¡; Y QUÉ HARÍAN LOS ESTADOS EXSOVIÉTICOS Y EXCOMECON,...??¡¡. REFLEXIONEN EN TODOS LOS ESTADOS, QUE LLEGUEN ESTAS IDEAS,...¡¡. SE CONTINUARÁ,...¡¡. --  Canadá/Primer ministro
Desde 2015

Resumen

Descripción

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Justin Pierre James Trudeau es un político liberal canadiense. Tras la victoria por mayoría absoluta del Partido Liberal en las elecciones federales de octubre de 2015, es el primer ministro de Canadá desde el 4 de noviembre de 2015. Lidera el Partido Liberal de Canadá desde el 14 de abril de 2013.​ Wikipedia
Fecha de nacimiento: 25 de diciembre de 1971 (edad 48 años), Ottawa, Canadá ...//...     --






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Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas | 44 (2014.4) © EMUI Euro-Mediterranean University Institute | Universidad Complutense de Madrid | ISSN 1578-6730 Publicación asociada a la Revista Nomads. Mediterranean Perspectives | ISSN 1889-7231

 ¿ERA LA UNIÓN SOVIÉTICA SOCIALISTA? UNA CRÍTICA A LOS CRÍTICOS DE LA URSS

 Juan Miguel Valdera Gil Universidad de Granada

 valgil@ugr.es http://dx.doi.org/10.5209/rev_NOMA.2014.v44.n4.49295 

Resumen.- 

Este artículo realizará una crítica a aquellas posiciones marxistas que han puesto en tela de juicio el carácter socialista de la URSS. Comenzaremos por enunciar el error de partida en el que, a nuestro juicio, incurren muchos críticos de la URSS. Esto es, juzgar el socialismo soviético a partir de unos cánones ideales que proceden de los autores clásicos del marxismo-leninismo (Marx, Lenin, Trotsky etc.). En la segunda parte del artículo defenderemos el carácter socialista de la URSS. Nuestra tesis será que, en vez de calificar a la Unión Soviética como una desviación respecto al auténtico socialismo, el sistema soviético pudo mantenerse durante largo tiempo, porque abandono en la práctica ciertas ideas muy arraigadas en la tradición marxista-leninista. Palabras clave.- “Comparación platónica”, burocracia, Estado obrero deformado, rectificación ideológica, socialismo en un solo país. 

Abstract.-. This paper offers a critique to those Marxist approaches which have challenged the socialist’s character of the Soviet Union. The paper starts by analysing what I view as a common departure misjudgement position shared by many critics: to look at Soviet socialism through the lenses of Marxist- Leninist classic authors and their ideal canons (Marx, Lenin, Trotsky etc.) In the second part this paper defends the socialist underpinnings of the Soviet Union; instead of framing the Soviet Union as a variation of the authentic socialism, the Soviet system managed to sustain itself for a long time as it abandoned certain ideas well routed in the Marxist-Leninist tradition. Keywords. - “Platonic comparison”, bureaucracy, deformed workers´ state, ideological correction, socialism in one country. 

1. Introducción. 

El platonismo como metodología de comparación histórica En nuestra investigación doctoral abordábamos el estudio de los fundamentos del sistema soviético de estratificación social durante el periodo estalinista. El trabajo constaba de una introducción y tres partes diferenciadas. En el primer bloque se analizaban los fundamentos socio-económicos y político-institucionales- y se trataban cuestiones como la política económica soviética en los años veinte y treinta, la transformación del sistema de ocupaciones o los determinantes institucionales (tipos de propiedad, reparto salarial, distribución de bienes como la vivienda etc.). La segunda parte tenía por título Fundamentos simbólico-legitimadores: el papel de la ideología. Mediante el análisis socio-discursivo de materiales en su versión original rusa, pretendíamos exponer la ideología oficial soviética, poniendo al descubierto las profundas imbricaciones entre los aspectos simbólicolegitimadores y algunas realidades del sistema de estratificación. Respecto a la metodología nos decantamos por un enfoque empírico. En la primera parte usamos datos cuantitativos de carácter secundario; en la segunda una aproximación cualitativa basada en el análisis sociológico del sistema de discursos (Conde, 2009) Y sin embargo había otra cuestión más “filosófica” que nos parecía importante esclarecer y a la que dedicamos un capítulo en la parte final de la investigación. Allí nos preguntábamos retóricamente, ¿Era el sistema soviético socialista? Para los críticos “liberales” defensores del orden capitalista, la URSS era inequívocamente socialista, porque identifican la dictadura, la represión, la ineficiencia económica, o la pobreza con el socialismo. 

En cambio Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas | 44 (2014.4) © EMUI Euro-Mediterranean University Institute | Universidad Complutense de Madrid | ISSN 1578-6730 Publicación asociada a la Revista Nomads. Mediterranean Perspectives | ISSN 1889-7231 

los críticos de “izquierdas”, muy conscientes de las limitaciones reales del sistema soviético, lo ponían en duda. Para ellos el socialismo era otra cosa. 

Trotsky (2001a) acuñó la expresión de Estado obrero con deformaciones burocráticas; Wright (1994) habla de estatalismo o socialismo estatal burocrático; 

Buzgalin y Kolganov (2003) emplean el término de socialismo mutante; Cliff (2000) y más recientemente Zdorov (2006), prefieren capitalismo de Estado. 

Este artículo tiene como objetivo realizar una crítica constructiva a los autores que, desde posiciones marxistas o neo-marxistas, ponen en cuestión el carácter socialista de la URSS1 . Sostenemos que detrás de los calificativos estatal, burocrático, mutante o deformado anida la visión de una Unión Soviética que se aleja del camino del verdadero socialismo. Ahora bien, la deformación, aberración o desviación implica la presencia de un patrón o canon que se preste a la comparación. Daremos un par de ejemplos. Primero: un diagnóstico de cáncer supone una mutación de células sanas, que si no se toman medidas, acaba por destruir toda posibilidad de vida. En este caso las células sanas del cuerpo nos sirven para comparar y dictaminar que se ha producido el cáncer. Segundo: para desviarse de un camino, el trazado de la vía debe estar construido o al menos señalado en un mapa. En caso contrario, más que andar por un camino, estaríamos trazándolo según la máxima del poeta español Antonio Machado: “caminante no hay camino, se hace camino al andar”. Entonces, ¿qué modelo o patrón toman los críticos de la URSS para elaborar su dictamen? La comparación con proyectos socialistas implantados es complicada. Hasta 1917 la Comuna de París era uno de los pocos movimientos que servían de inspiración. Pero la Comuna fue una experiencia local de corto recorrido. La mayoría de las veces los autores marxistas y neomarxistas siguen un enfoque, que podríamos denominar platónico, en su crítica a la Unión Soviética. Platón defendía (Popper, 2006: 40) una realidad formada por objetos sensibles. La realidad material es una copia de formas puras que únicamente existen en el mundo de las ideas. Los objetos sensibles, entre ellos los sistemas político-institucionales, están sujetos a corrupción. Pasa el tiempo, y los objetos materiales van degenerando y pierden su parecido con las formas puras. La forma perfecta de gobierno, la timocracia, se deforma y pasa por sucesivos estadios a cada cual más decadente: oligarquía, democracia y tiranía. A pesar de su profesión materialista, los críticos de la URSS siguen un método similar al platónico. Las ideas sobre el Estado y la burocracia que emanan de la tradición marxista (las formas puras) son utilizadas para cuestionar la naturaleza socialista de la URSS (el objeto sensible o corrompido). Veamos en líneas generales en qué consiste ese canon tradicional. 

2. El Estado y la burocracia en la tradición marxista: Marx, Lenin, Trotsky 

Empezaremos este epígrafe con un párrafo de Marx, extraído del 18 Brumario de Luis Bonaparte. En él Marx sintetiza de forma clara y concisa su visión del Estado. [..] Donde el Estado enmaraña, controla, regula, vigila y tutela a la sociedad civil, desde sus manifestaciones de vida más vastas hasta sus movimientos más insignificantes, desde su forma de vida más generales hasta la existencia privada de los individuos; donde ese cuerpo parasitario adquiere, gracias a la extraordinaria centralización, una ubicuidad, una omnisciencia, una capacidad acelerada de movimientos y una elasticidad que solo encuentra analogía en la dependencia desvalida, en la informidad distraída del auténtico cuerpo social. (Marx, 2003: 88) Karl Marx es un antiestatalista convencido, un demócrata que engarza, en cierto modo, con los liberales y anarquistas más radicales. El Estado se presenta como una entidad ajena, un parasito que se adhiere al auténtico cuerpo social, la sociedad civil, extrayendo de ella su alimento. Como excrecencia que es, el Estado no cumple ninguna función positiva 1 Vamos a excluir de nuestra exposición las teorías del “capitalismo de Estado”, porque su crítica bien merece un trabajo aparte. 

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(enmaraña, vigila, tutela). 

Sirve o bien a los intereses de la clase dominante, o llegado el caso, a sus propios intereses, tal y como el autor alemán trató de demostrar en su estudio de Napoleón III en Francia. El Estado ejerce su dominación por medio de la burocracia. Cuerpo formado por los supremos gobernantes y todos sus secuaces en la administración, vive rodeada de privilegios y prebendas. La revolución proletaria no solo expropiará a la burguesía, sino que destruirá también a su representante estatal, la burocracia. El viejo aparato estatal será sustituido por uno de nuevo tipo, bajo control obrero, tal y como hizo la Comuna de Paris durante la Revolución de 1870: He aquí su verdadero secreto: la comuna era esencialmente, un gobierno de la clase obrera, fruto de la clase productora contra la clase apropiadora, la forma política al fin descubierta para llevar a cabo dentro de ella la emancipación económica del trabajo [...] Por tanto la Comuna había de servir de palanca para extirpar los cimientos, los cimientos económicos sobre los que descansa la existencia de las clases, y por consiguiente, la dominación de clases. Emancipado el trabajo, todo hombre se convierte en trabajador, y el trabajo productivo deja de ser atributo de una clase. (Marx, 1980:67) ¿Pero en qué consistía exactamente el nuevo gobierno? La Comuna es la representante de los obreros, una corporación del trabajo. La Comuna no es un organismo parlamentario, sino que tiene funciones ejecutivas y legislativas a la vez. Por ello, la policía y el ejército son puestos inmediatamente a las órdenes del gobierno comunal, al igual que todos los funcionarios y cargos públicos de la administración, que comienzan a cobrar salarios de obreros. Los funcionarios judiciales no se libran de tal distinción; magistrados y jueces han de ser electivos, revocables y responsables. Se decretó también la separación entre Iglesia y Estado. La educación se expandió con la apertura de nuevos centros. El sistema comunal debía extenderse por toda Francia, formándose en todas las provincias pueblos y aldeas órganos similares. El ejército sería reemplazado por milicias populares con un tiempo de servicio corto. La coordinación entre todos los entes comunales se haría mediante órganos electivos de orden ascendente. Las comunas rurales administrarían los asuntos colectivos en asambleas provinciales (distritos), y estas a su vez enviarían delegados a una Asamblea Nacional en Paris. Todos los delegados serían revocables en cualquier momento y estarían ligados a sus electores por mandato imperativo. 

El rasgo más sobresaliente de la Comuna fue la eliminación de la burocracia permanente y su sustitución por la gestión directa de los obreros. 

Las tesis que Lenin (1917) despliega en El Estado y la Revolución son similares a las de Marx. Según Lenin el avance de la democracia burguesa acrecienta la unidad del proletariado y facilita su ascenso como clase dirigente. El desarrollo de la democracia capitalista abre nuevos caminos para destruir el Estado burgués. Da la posibilidad de destruir, de hacer añicos, de barrer de la faz de la tierra la máquina del Estado burgués, incluso la del Estado burgués republicano, el ejército permanente, la policía y la burocracia, y de sustituirlo por un máquina más democrática, pero todavía estatal, bajo la forma de masas obreras armadas, como paso hacia la participación de todo el pueblo en las milicias. (Lenin, 1997: 98) La alfabetización de las grandes masas, la concentración de los medios de producción, la disciplina de trabajo engendrada por el moderno modo de producción capitalista, permite que todos los explotados se encuentren en disposición de intervenir en la dirección del Estado. 

La administración burocrática, nos dirá Lenin, es un asunto que el capitalismo ha simplificado hasta extremos desconocidos (Lenin, 1997: 99). Leer, escribir y realizar operaciones matemáticas sencillas es todo lo que se necesita para que el proletariado ejerza la contabilidad y el control sobre la producción/distribución. Los especialistas técnicos y científicos trabajarán para el nuevo gobierno obrero tal y como trabajan ahora para los capitalistas. El Estado obrero que gestiona los asuntos económicos y políticos con ayuda de Nómadas. 

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los soviets, no es propiamente un Estado, sino más bien un Estado que comienza a extinguirse. Como la administración ha dejado de ser un trabajo de unos pocos para ser labor de toda la sociedad, pierde su carácter de mecanismo dominador, porque a su través no puede obtenerse privilegio alguno. Entonces se abrirán las puertas de par en par del comunismo, de la desaparición total de la opresión y la dominación. 

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Lenin 1. Cuando el Parlamento es simplemente una asamblea que produce discursos, el resultado es una dominación burocrática incontrolada, que sirve a los intereses de los capitalistas y produce un liderazgo político ineficaz e irresponsable 1. El Parlamento no es más que un lugar de charlatanería, los centros reales de poder estatal se localizan en la burocracia controlada por la clase capitalista y al servicio de sus intereses 2. 

Las burocracias son, sin embargo, necesarias e inevitables, dadas las condiciones de la tecnología y la producción modernas, así como la escala masiva del Estado moderno 2. 

La burocracia no es un imperativo exigido por la moderna tecnología y administración de masas, sino un imperativo específicamente político de la estabilidad del capitalismo y la dominación de la burguesía 3. 

Dado que la burocracia no puede ser eliminada, el problema reside en crear garantías que impidan que los burócratas se salgan de su sitio y controlen la dirección política de la burocracia 3. 

En una sociedad capitalista es inevitable que las instituciones representativas sean meros centros de charlatanería diseñados para burlar el pueblo; nada puede impedir que en las sociedades capitalistas avanzadas el centro del poder real sea la burocracia 4. 

Es necesario por tanto poner a punto instituciones que sean capaces de crear un liderazgo político responsable y competente que dirija dicha supervisión 4. 

Si queremos establecer el socialismo, hemos de crear instituciones que hagan posible que la clase obrera se organice como clase dominante y que hagan de las masas participantes un sujeto revolucionario dotado de conciencia de clase y agudeza política en la administración estatal 5. 

Esto sólo pude hacerse mediante un Parlamento fuerte y que funcione, con la capacidad para controlar la burocracia 5. 

Esto sólo puede lograrse mediante la destrucción del Parlamento y la burocracia y su remplazo por una dictadura del proletariado organizada en asambleas obreras y una administración soviética Fuente. Wright (1983: 200) 

En lo concerniente a Trotsky (2001a:106) el autor describe la degeneración del partido como raíz de la burocratización del Estado. 

La primera causa de putrefacción hay que buscarla en la concentración de poder en el Partido, y sobre todo en sus instancias superiores. 

La prohibición de los partidos de oposición había limitado la autonomía de los soviets como órganos de expresión de los trabajadores. 

Por otro lado, la proscripción de las facciones en el seno del Partido, trasladó a su estructura interna el estado de excepción que imperaba en el resto de la sociedad. La libertad de crítica y la confrontación de ideas se vieron subordinadas al Comité Central y al cada vez más poderoso Buró Político. 

En realidad, aunque Trotsky no se sirve de estas palabras, el círculo del poder se iba estrechando. El Partido se arrogó la representación de la sociedad, el Comité Central la del Partido, el Buró Político la del Comité Central y Stalin la de todos ellos (Trotsky, 2001a:113). 

Hay que sumar que los órganos del Partido empezaban a confundirse cada vez más con los del Estado. La tendencia al arribismo descollaba, por cuanto el Partido se había convertido en la única plataforma de poder real en el país. 

La muerte de Lenin marcó otro hito en el proceso de degeneración. Stalin jugó sus cartas sabiamente. Abrió las puertas a través del conocido como “Alistamiento Lenin”. Una masa de nuevos militantes se afilió a la organización. 

Muchos se convirtieron en leales burócratas fieles a su jefe, el secretario general. 

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bolcheviques, núcleo de la organización partidaria y que habían participado en la Revolución, quedaron en minoría frente a esta masa informe y acrítica (Trotsky, 2001a:109). 3. 

Burocracia y modernización (socialista) Trotsky vincula la burocratización al aislamiento de la Revolución. En realidad Trotsky no se despega en demasía de las tesis sobre el poder, el Estado y la burocracia de Marx y Lenin. Si bien admite que el Estado tiene una función policial en condiciones de desigualdad y atraso económico, la implantación socialista en un país económica y culturalmente avanzado cierra la puerta a la burocratización. 

Es cierto que Trotsky acierta a contemplar al Estado como algo más que una superestructura parasitaria. Con su metáfora del gendarme que cuida las puertas del almacén y reparte entre los miembros de la sociedad su escaso contenido, reconoce tácitamente una función reguladora necesaria. 

Su experiencia militarorganizativa durante la época del comunismo de guerra, así como haber contemplado el ascenso al poder de Stalin, habrían influido en una mayor comprensión del rol de la burocracia. 

Lenin también se percató de los derroteros que estaba siguiendo el Estado Soviético, aunque su muerte le impidió una reflexión teórica más profunda sobre los acontecimientos. Los planteamientos tradicionales de raigambre marxista, con los que introducíamos este apartado, no dan debida cuenta de la naturaleza social del régimen soviético. Esclarecedoras a este respecto las impresiones de Entrena: 

Sin embargo, lo cierto es que la raíz de los problemas proviene de las debilidades y lagunas de su pensamiento [se refiere a Marx; nota del autor], cuyo economicismo, consideración del poder como algo extraño a la sociedad y orientación prioritaria a subvertir el orden social capitalista repercutieron en que el autor de El Capital no se percatara de la tendencia a la cada vez mayor complejización burocrática de dicho orden y de la función que en este y en cualquier sistema social cumple la normatividad social, entendida, aquí, en un sentido amplio, como un entramado de regulaciones jurídica-políticas, económicas o estrictamente sociales, explícitas o implícitas, formales o informales .

(Entrena, 2001: 89) Marx había cantado las alabanzas del sistema capitalista (Marx y Engels, 1987: 44-47). 

La elevación de las fuerzas productivas, el desarrollo técnico-científico, la secularización de la vida social, en definitiva el dominio de la civilización burguesa y de sus estructuras socioeconómicas, eran todos ingredientes fundamentales para marchar hacia el comunismo. 

Pero el democratismo recalcitrante de Marx, su reacción ante la apologética defensa del Estado Prusiano de Hegel, le impidieron ver que la imponente máquina burocrática no era un fenómeno ajeno o externo al capitalismo, sino un desarrollo interno del mismo. Sus tan anheladas conquistas de la civilización burguesa incluyen, a la sazón, la racionalización objetiva de las técnicas y de la organización social tanto del Estado como de las empresas capitalistas y por extensión, el crecimiento cuantitativo de la burocracia. 

Paul du Gay (2012) en un trabajo que lleva por título En elogio de la burocracia, mantiene una tesis parecida. Du Gay carga contra los críticos premodernos (MacIntyre) y posmodernos (Bauman) de la burocracia. Dichos autores no se percatan de que los rasgos negativos que tanto critican (despersonalización, deshumanización), son desarrollos internos del Estado moderno, que sirven para evitar la corrupción, el nepotismo y la influencia del status en la conformación de las políticas públicas. La tendencia a “despersonalizar” y “deshumanizar” el vínculo entre sujeto y burocracia, es el único medio efectivo descubierto por ahora, para defender la idea de ciudadanía. Y es que basar la administración en las relaciones personales y de cercanía, es también conceder más poder a las personas de alto estatus y capacidad económica. Por otro lado la rutinización e inflexibilidad de la que tanto se quejan los gurús de la nueva gestión empresarial, ayuda a dotar a los procedimientos administrativos de previsibilidad, y garantizar los controles que el legislador, que representa la soberanía popular, debe tener sobre el gasto del dinero público. 

Compartimos el punto de Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas | 44 (2014.4) © EMUI Euro-Mediterranean University Institute | Universidad Complutense de Madrid | ISSN 1578-6730 Publicación asociada a la Revista Nomads. Mediterranean Perspectives | ISSN 1889-7231 

vista de du Gay al reivindicar a Max Weber, como el sociólogo que mejor comprendió la ligazón entre modernización y burocratización: El desarrollo de las formas “modernas” de asociaciones en toda clase de terrenos (Estado, iglesia, ejército, partido, explotación económica, asociación de interesados, uniones fundaciones y cualesquiera otras que pudieran citarse) coincide totalmente con el desarrollo e incremento creciente de la administración burocrática: su aparición es, por ejemplo, el germen del Estado moderno occidental. A pesar de todos los ejemplos en contrario, sean estos de representaciones colegiadas de interesados, comités parlamentarios, dictaduras de “consejos”, funcionarios honorarios o jueces no profesionales ( y sobre todo, a pesar de los denuestos contra la “santa burocracia”) no debe uno dejarse engañar y perder de vista que todo el trabajo continuado, se realiza por funcionarios en sus oficinas. Toda nuestra vida cotidiana está tejida desde dentro de ese marco. Pues si la administración burocrática es en general –caeteris paribus- la más racional desde el punto de vista técnico-formal, hoy es, además sencillamente inseparable de las necesidades de las masas (personales o materiales). Se tiene que elegir entre la burocratización y el diletantismo de la administración; y el gran instrumento de la superioridad de la administración burocrática es éste: 

el saber profesional especializado, cuyo carácter imprescindible está condicionado por los caracteres de la economía moderna de la producción de bienes, siendo completamente indiferente que tal producción sea en la forma capitalista o socialista (esta última, de querer alcanzar iguales resultados técnicos, dará lugar a un extraordinario incremento de la burocracia profesional). (Weber, 2002: 178) [Cursivas nuestras]. Si en vez de denostar a la sociología burguesa, los bolcheviques le hubieran prestado atención, quizás se habrían percatado de que el peligro de burocratización era inevitable en el camino al socialismo.

El Estado moderno o uno como el soviético que aspiraba a serlo, no se maneja con simples reglas aritméticas, la lectura y la escritura. Contémplese la complejidad en la elaboración de un presupuesto, de las reglamentaciones administrativas y jurídicas, de la contabilidad, de la asignación de recursos humanos y de cualquier tarea organizacional actual. Todo eso, repetimos al unísono siguiendo a Weber, no son argucias ideológicas superestructurales inventadas por la burguesía para dominar. 

Son prerrequisitos funcionales que hacen trabajar a la máquina de una economía moderna, siendo secundario a quién pertenecen los medios de producción (capitalismo versus socialismo). Y al igual que Weber predijo la expansión de la burocracia soviética, los bolcheviques más concientes podrían haber previsto que el jefe de la oficina (nos referimos a Stalin) acabaría tomando entre sus manos todo el poder, ya que los otros grupos de la sociedad soviética (campesinos, intelligentsia, obreros), solamente podían dejar sentir su influencia por medio de un partido, que ya estaba de hecho, gobernado por la oficina. Deshaciéndose sucesivamente de los otros líderes, y ante la inexistencia de centros alternativos de poder (sindicatos y soviets independientes), el dominio de la burocracia se había completado. Además el poder de la burocracia por la propia naturaleza del Estado socialista tenía que ser mayor y más difícil de doblegar. 

La burocracia en el moderno estado capitalista se presenta organizada distributivamente. Significa que junto a una burocracia publica más o menos solidificada (dependerá de si el Estado en cuestión es de tipo unitario, federal, descentralizado etc.) conviven una pléyade de órganos gestores de las grandes unidades productivas privadas y de otras organizaciones (partidos, sindicatos, organizaciones benéficas). Estos organismos administran la vida social con momentos de cooperación y de conflicto intra e interburocráticos. 

 2 “Las totalidades atributivas son aquellas cuyas partes están referidas las unas a las otras, ya sea simultáneamente, ya sea sucesivamente –las conexiones atributivas no implican inseparabilidad (por ejemplo en el caso de las conexiones sinecoides o indestructibilidad-; 

las totalidades distributivas son aquellas cuyas partes se muestran independientes las unas de las otras en el momento de su participación en el todo. Cuadrado, respecto a las figuras cuadradas es una totalidad distributiva (mientras que cuadrado, respecto de los dos triángulos constituidos por una de sus diagonales, es una totalidad atributiva”.

(García, 2000: 51) Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas | 44 (2014.4) © EMUI Euro-Mediterranean University Institute | Universidad Complutense de Madrid | ISSN 1578-6730 Publicación asociada a la Revista Nomads. Mediterranean Perspectives | ISSN 1889-7231 

En la URSS, en la práctica, la burocracia se constituyó como una totalidad atributiva. 

En primer lugar, el monopolismo socialista de la estructura productiva y la nacionalización de los grandes medios de producción, defendida por todos los teóricos bolcheviques, desde Lenin a Preobrazhenky, supone una tendencia a la eliminación de los órganos de gestión independientes. 

A mediados de los años treinta toda la economía estaba integrada en el complejo socialista bien en forma de propiedad estatal (de todo el pueblo), bien en forma de cooperativas koljosianas. 

El plan, de obligado cumplimiento, unía a todas las unidades productivas del país, como si de una única empresa se tratara. 

Curiosamente, las críticas marxistas (Trotsky, Cliff) y neo-marxistas (Wright, Zdorov, Buzgalin) que minusvaloran el carácter socialista de la URSS reproducen los mismos esquemas reduccionistas que Marx y Lenin aplicaron al Estado y la burocracia. 

En vez de observar el proyecto soviético a modo de aberración por su estatalismo o burocratismo, nosotros defendemos que fue una rectificación, por la vía de los hechos, de concepciones erróneas muy arraigadas en la tradición marxista-leninista. 

Hablamos de rectificación por la vía de los hechos, porque ni Stalin ni otros dirigentes soviéticos aceptaron nunca que se estuvieran apartando lo más mínimo de la doctrina oficial. 

En la Unión Soviética todos los dirigentes desde Stalin hasta Gorbachov, pasando por Trotsky o Bujarin, han declarado siempre ser leales seguidores del marxismo-leninismo a pesar de haber defendido distintas políticas. 

Ningún dirigente soviético que quisiera seguir siendo relevante cometió el error de admitir que alguno de sus planteamientos se alejaba o contradecía las doctrinas de Marx y Lenin. 

Y sin embargo, opinamos que la Unión Soviética difícilmente habría perdurado 70 años si hubieran aplicado con sinceridad el lema un Estado que empieza a extinguirse. 

Stalin tomó nota de la derrota de la Comuna de París y adoptó en lo referente a la burocracia y el Estado, un punto de vista más cercano a Weber, que a Marx y Lenin. 

Que el proyecto político estalinista rectificara ideológicamente presupuestos del marxismo-leninismo en su camino de consolidación institucional, no debe entenderse en un sentido teleológico. La institucionalización bien podía haber discurrido por terceras sendas. Con actores, escenario internacional o circunstancias históricas diferentes, la rectificación ideológica habría arrojado probablemente otro resultado. 

¿Pero en qué consistió exactamente esa rectificación de la que hablamos? 

Veámoslo. 4. 

La adaptación de las ideas de Marx al contexto ruso. 
De la posibilidad de revolución socialista 
La teoría del Imperialismo y del capitalismo decadente explica la posibilidad del triunfo del socialismo en Rusia. 

Lenin (2002) y Trotsky (2001b) modificaron de manera sustancial el papel del capitalismo en el desarrollo de los países atrasados. 

Influenciados por Hilferding, creyeron que el capitalismo estaba en una nueva fase monopolística, en la cual pierde su función civilizadora. 

La burguesía colonial impulsa la rapiña en los países colonizados, no su desarrollo. 

A diferencia de Marx, los bolcheviques plantearan que la revolución podría comenzar en un país atrasado como Rusia. 

Es más, el propio atraso impediría a la burguesía cumplir con su tarea progresista. El proletariado en alianza con el campesinado pasa a primera línea de combate y asume la dirección del movimiento revolucionario. 

La revolución tiene entonces una doble cara. Se arroga cometidos burgueses en sus primeras fases (liquidación del feudalismo, impulso a las fuerzas productivas), pero no se detiene ahí. Guiada por una 3 De este hecho se deducen dos consecuencias: 

1) el marxismo-leninismo no es un libro de instrucciones donde encontrar soluciones a todos los problemas políticos prácticos; 

2) desde un punto de vista weberiano, la apelación al marxismo-leninismo actuaba como fuente de legitimidad tradicional para la dominación en la URSS. 

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dirección proletaria se dispone a marchar de inmediato por la vía del socialismo. ¿Cómo es posible construir el socialismo sin unas estructuras capitalistas previas? En este punto los heterodoxos Lenin y Trotsky dirigen su atención a Marx, a los factores exógenos.

Garantizar el triunfo de la revolución no atañe en exclusiva a los oprimidos de Rusia. La toma del poder de los obreros en los países capitalistas avanzados (Francia, Gran Bretaña, Alemania) favorecería la federalización de los nuevos Estados socialistas en un ente supranacional y resolvería el problema del atraso. 

El nuevo rumbo de Stalin o la rectificación sin ruptura oficial con el marxismo-leninismo Lenin era, antes que nada, un internacionalista convencido. Contempla los sucesos de 1.917 como un episodio de una serie de revoluciones, la antesala de un socialismo a escala planetaria. Tenemos dos buenos ejemplos en las primeras constituciones soviéticas. 

El artículo tres del texto de 1.918 declara que el nuevo poder se orientará a la supresión de cualquier tipo de explotación, a la eliminación de la sociedad en clases, al aplastamiento implacable de los explotadores, al establecimiento de la organización socialista de la sociedad y a “la victoria del socialismo en todos los países” (Kukushkin y Chistiakov, 1987: 241). 

La primera Constitución Federal de 1.924 se inicia con una declaración de intenciones. Tres son los motivos que se esgrimen. El primero: la destrucción y desorganización material durante la guerra civil aconsejaban que las repúblicas soviéticas unieran fuerzas para restablecer y potenciar la economía socialista. 

El segundo: ante las nuevas amenazas provenientes del mundo capitalista, plantear batalla en un frente único. La última causa es de carácter ideológico. El Estado soviético es internacionalista y aspira a reunir a todas las repúblicas en una única familia socialista.

“Servirá [el Estado soviético] como fiel baluarte contra el capitalismo mundial y como un decisivo paso en el camino de la unión de todos los trabajadores en la República Socialista Soviética Mundial” (Kukushkin y Chistiakov, 1.987: 266).


¿¿¡¡ HABLAN SOBRE EL NACIONAL COMUNISMO ??¡¡ : 


Stalin encauzará ideológicamente el proyecto soviético hacia una revolución nacional, el “socialismo en un solo país”. Sus planes y proyectos vuelven a situar a Rusia y otras repúblicas de la URSS en el centro de la historia. 



Conforme a la nueva doctrina, todas las alusiones de carácter internacionalista desaparecerán de la Constitución de 1936. Vladislav Zubok (2008) ha bautizado esta variante del socialismo soviético como paradigma revolucionario-imperial. 

La nueva orientación intentaba conciliar los intereses estratégicos y geopolíticos del Estado soviético, con la lucha contra la opresión, la explotación, el colonialismo y por una sociedad más justa e igualitaria (Zubok, 2008:11; 505-506). 

En la misma línea Luciano Canfora añade, que a partir de Brest-Litovsk, la política exterior soviética empezará a identificar la batalla por la revolución mundial con el apoyo a la Unión Soviética (Canfora, 2011: 374). 


La nueva interpretación ideológica del internacionalismo proletario en clave imperial-revolucionaria tendrá consecuencias dentro y fuera de la URSS. 


En el plano internacional, los proletarios de los países capitalistas debían subordinar sus intereses políticos y sindicales inmediatos a la estrategia de la URSS, faro de la revolución mundial. 

En el plano interno, los campesinos, obreros e intelligentsia se comprometían a anteponer las necesidades militares y económicas de la Unión Soviética a las suyas propias. 

El servicio al Estado para el eficaz cumplimiento de los planes quinquenales bajo la consiga “los mandos lo deciden todo” (Figes, 2009: 247) era el único camino hacia la sociedad comunista. 

John Rawls subraya que las únicas desigualdades justas son las que aumentan las rentas absolutas de los miembros más pobres de una sociedad (Milanovic, 2011: 206). 

El sostén ideológico de la política económica de Stalin guarda cierto parecido con el argumento de Rawls. Los esfuerzos, sacrificios y carencias de los ciudadanos soviéticos se justifican porque incrementan el poder de la URSS, y el fortalecimiento del Estado soviético es la única garantía de bienestar futuro del pueblo y triunfo de la revolución por el mundo. 

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El desplazamiento del proyecto soviético hacia una política defensiva y de expansión imperial tras la II Guerra Mundial, colocó a la Unión Soviética en una doble competición con el bloque capitalista. 

Por un lado, había que demostrar que a la larga, el sistema soviético funcionaría de forma más eficiente que el capitalismo decadente; que concedería un mayor grado de libertad, riqueza, bienestar y oportunidades a los ciudadanos soviéticos. 

Las leyes del materialismo histórico aseguraban el triunfo del socialismo en la carrera del bienestar. 

La URSS era más progresista, estaba un peldaño por encima del capitalismo en la escalera del desarrollo humano. Tomar ventaja en la carrera del bienestar tenía un fin propagandístico. 

La descolonización abrió enormes posibilidades para la revolución internacional. El proyecto soviético se presentaba como la mejor vía para salir de la pobreza y el atraso. 

El compromiso de ayuda al tercer mundo y a las democracias populares hermanas imponía no quedarse atrás en la carrera militar. 

Ningún imperio a lo largo de la historia ha alcanzado importancia global sin un reforzamiento de sus capacidades ofensivas y defensivas. 

Las investigaciones nucleares y el desarrollo de misiles balísticos, que datan de la época de Stalin, son buena prueba de ello. 

Las dos carreras, del bienestar y militar, formaban parte en realidad de una única pugna entre dos sistemas antagónicos, y que sin embargo, compartían un fondo común de carácter modernizador: Estados Unidos también tuvo la suerte de tener un enemigo que representaba el reflejo ideológico, económico y político del capitalismo occidental. Ese enemigo era el resultado de la búsqueda de la modernidad por parte de los europeos. 

En otras palabras, la Guerra Fría fue una competición entre dos primos muy lejanos, que luchaban por decidir la mejor manera de modernizar y globalizar el mundo, no entre amigos y enemigos de la modernización y la globalización. (Zubok, 2008: 516) 

Para terminar queremos lanzar una reflexión. A lo largo del artículo hemos remarcado los elementos que Lenin y Trotsky primero, y Stalin después, modificaron en relación a las ideas de Marx: la posibilidad real de revolución en Rusia, el rol del Estado y de la burocracia y el papel del imperio socialista, son todos puntos donde se hace notar un alejamiento respecto al pensador de Tréveris. 

Sin embargo tampoco querríamos caer en un planteamiento erróneo, que consiste en desconectar por completo a Marx del proyecto soviético. Marx era más que un retrato al que adorar en los desfiles conmemorativos. 

He aquí algunos ejemplos de continuidad. 

En Marx los campesinos constituyen una clase del pasado, de un modo de producción en extinción destinados a desaparecer con el empuje de la sociedad burguesa. Con la colectivización forzosa, los soviéticos querían forzar su rápida disminución y traslado a la ciudad. 

Marx pensaba que la abolición del capitalismo impondría la nacionalización de las grandes propiedades de la burguesía: los soviéticos expropiaron a terratenientes y capitalistas. Marx defendía un periodo de dictadura transitoria ante la previsible resistencia de la burguesía a la implantación del nuevo régimen; los soviéticos tomaron buena nota, y utilizaron la violencia contra los que se oponían al cambio. 

Marx supeditaba la desaparición de las clases sociales a un crecimiento elevadísimo de las fuerzas productivas; los soviéticos desarrollaron la industria de forma acelerada. 

Marx compartía con los ilustrados la fe en el conocimiento y la ciencia, auténticas palancas de transformación de la realidad; los soviéticos promovieron una política de prestigio de la ciencia y la técnica. 

A modo de conclusión: socialismo genérico y socialismo específico No sólo desde la crítica política se ha cuestionado la naturaleza socialista de la URSS. Historiadores y especialistas han compartido este punto de vista. Por ejemplo, el sociólogo e historiador Ovsey Shkaratan (2009: 51-54) utiliza la expresión de sociedad etatocrática para referirse a la URSS. 

La etatocracia, supone un modelo donde el Estado asume un papel económico central y el reparto de la riqueza se realiza a través de mecanismos administrativos no mercantiles. La posición del sujeto viene determinada por su relación con el Estado, de la cual se deduce su adscripción legal a un estamento o êtats del sistema de estratificación social. ( UN CUBANO ME DECÍA, EN UN CURSILLO DE INTERNET, BDA. EL BULTO,... DE QUE LOS TRABAJADORES CUBANOS ERAN TRABAJADORES DEL ESTADO CUBANO,...¡¡ ).

 El historiador Moshe Lewin (2006: 475) llega a conclusiones parecidas y bautizará al régimen soviético como absolutismo burocrático. 

Tanto para Shkaratan como para Lewin el sistema soviético no fue socialista, porque las particularidades o 

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singularidades históricas asociadas a su pasado lo impedían. Lewin (2006: 471) defiende un socialismo donde la propiedad de los medios de producción es de la sociedad y no de la burocracia, un sistema donde la economía sea socializada y la política se democratice. En nuestra opinión, mezclar la ideología socialista en un sentido genérico con los proyectos específicos que de esta ideología se desprenden puede llevar a equívoco o confusión. Estamos de acuerdo en que todo socialismo aspira a una socialización efectiva de la riqueza y una democratización de la política. 

¿Acaso la Unión Soviética no profesaba oficialmente tan altas metas? Sí, pero era una fachada porque la burocracia dominaba la economía y la política, respondería Lewin (2006: 471). He aquí la raíz del problema. No existe una forma unívoca de interpretar qué significa socializar la economía y democratizar la política, ni de cómo conseguirlo. 

En 1848 Marx y Engels ya se percataron de la pluralidad a la hora de entender el socialismo. En el último capítulo del Manifiesto Comunista (1987: 66-76) dan cuenta de cinco modelos de socialismo enfrentados al suyo: 

socialismo reaccionario (dividido a su vez en una rama feudal, otra pequeño-burguesa y una tercera de socialismo alemán), socialismo conservador y socialismo utópico. Y ello sin contar el anarquismo o socialismo libertario que le disputará la hegemonía en el movimiento obrero al marxismo. 

Además del propio pensamiento de Marx y Engels han surgido tres movimientos o generaciones de izquierda (Bueno, 2003): 

la socialdemocracia europea, el comunismo soviético y el maoísmo chino. Cada uno de ellos posee su propia concepción de cómo transformar en realidad los ideales o principios genéricos del socialismo. 

Los tres se han autoproclamado como los auténticos portadores de los valores socialistas y han criticado al resto por su traición, tibieza o burocratización. 

Desde nuestro punto de vista, el proyecto soviético ha sido una de las posibles modulaciones del movimiento socialista, una vía al socialismo con sus propias peculiaridades culturales, ideológicas e institucionales que fracasó en 1991. 

Lo que se trata en realidad de dilucidar son los determinantes concretos, históricos e ideológicos por los que los principios genéricos de “socialización de la economía” y “democratización de la política” acabaron por convertirse en un modelo específico de planificación central, sirviendo de germen para la constitución del sistema soviético tal y como lo conocimos. 

Queremos apuntar, aunque sea de modo esquemático a tres causas históricas. En primer lugar, señalaremos que el “gran giro” impuesto por Stalin con la colectivización forzosa y la industrialización acelerada a principios de la década de los treinta, respondía a un proyecto de modernización rápida e incruenta, que buscaba modificar radicalmente la estructura de clases existente en la URSS y garantizar la seguridad del país. 

La Nueva Política Económica (NEP) que combinaba intervención del Estado y mecanismos mercantiles no dio los frutos deseados. A pesar de que permitió la recuperación económica tras la guerra civil, no fue capaz de impulsar una industrialización a ritmo acelerado y reducir el peso del campesinado en la economía. 

Ante el aislamiento internacional del país y la sensación de indefensión frente a enemigos imaginarios o reales4 , se optó por un modelo radical de desarrollo basado en la planificación. 

 4 “Estamos yendo a toda marcha por el sendero de la industrialización hacia el socialismo, dejando atrás nuestro retraso ruso de siglos. Nos estamos convirtiendo en un país del metal, un país del automóvil, un país del tractor. Y cuando hayamos sentado a la URSS en un automóvil y al campesino en un tractor, que intenten entonces alcanzarnos los honorables capitalistas, que alardean de su civilización. Veremos entonces qué países pueden considerarse atrasados y cuáles avanzados […]. Rebajar el ritmo significa quedarse atrás. Y los que se quedan atrás son derrotados. Pero no queremos ser derrotados. ¡No, no lo queremos! 

La historia de la vieja Rusia, consistió, entre otras cosas, en ser constantemente derrotada a causa de su atraso. La vencieron los khans mongoles, los beys turcos, los señores feudales suecos, los nobles polacos y lituanos, los capitalistas ingleses y franceses, y los barones japoneses. Fue derrotada por todos ellos como consecuencia de su atraso […]. Marchamos con un atraso de cincuenta o cien años respecto a los países adelantados. En diez 

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En segundo lugar, hay que referirse al enfrentamiento del proyecto soviético con la socialdemocracia europea y el capitalismo liberal. 

El proyecto de socialismo defendido por Lenin y Trotsky e institucionalizado a la postre por Stalin, surgió como una escisión en el seno de la socialdemocracia europea. El socialismo soviético anatemizará a los socialdemócratas, a los que acusará de conciliación con la burguesía, reformismo y complicidad con la carnicería de la I Guerra Mundial. 

Por otro lado, a finales de los años veinte, el capitalismo estaba en franca decadencia. El crack de 1.929 confirmaba a los ojos de los soviéticos la podredumbre del sistema burgués. Además los fascismos comenzaban a arrinconar a la democracia liberal en toda Europa. 

En consecuencia el modelo que los soviéticos estaban construyendo acabó por apartarse tanto de la socialdemocracia, a la que consideraban corrompida, como del capitalismo, al que veían finiquitado (abandono de la NEP). 

En tercer lugar y no por ello menos importante, nos encontramos con las singularidades históricas y culturales de la sociedad rusa. Autores como Shkaratan (2009) y Kara-Murza (2008), autor de La civilización soviética, han insistido en ello. La inercia institucional coadyuvó al triunfo del socialismo específico de planificación. 

El Estado, garante del bien común en la tradición ortodoxa (y también católica), estaba en mejores condiciones de dirigir los cambios frente a unas estructuras capitalistas débiles y poco implantadas. 

Así, aunque el socialismo soviético se inspiraba en una ideología modernizadora, se construyó sobre el sustrato cultural e institucional de la vieja Rusia. 

El modelo resultante fue por tanto una mezcla donde convivían nuevas instituciones nacidas en el proceso de modernización, con otras muy arraigadas en la civilización rusa. Pero creemos que este hecho no debe entenderse como una de rémora que imposibilitó la construcción de un régimen genuinamente socialista. 

Las revoluciones nunca se hacen desde cero. Suponen destruir instituciones del pasado utilizando y reconstruyendo otras. Cualquier régimen revolucionario sea del signo que sea, tendrá siempre que arrastrar para bien o para mal “la carga” de su civilización y de su historia. 

Y por eso tampoco existen dos modelos de capitalismo exactamente iguales y de forma análoga, cada régimen de socialismo real portaba sus propias particularidades culturales: Cuba no era la Unión Soviética y la Unión Soviética no era China. 

Terminaremos nuestra exposición con una cita extensa de Aleksandr Zinoviev, filósofo y escritor ruso y gran crítico del sistema soviético, pero también de las reformas neoliberales posteriores. 

Zinoviev en una entrevista concedida a Antonio Fernández (2015) apunta al problema de las comparaciones, que nosotros hemos denominado platónicas al comienzo del artículo. Después describe los rasgos que hacían de la Unión Soviética una sociedad inequívocamente diferente de los regímenes capitalistas occidentales. 

Dicen que el sistema social soviético no fue auténtico comunismo, entonces yo pregunto, ¿cuál fue o es el auténtico? Si se ha dado en algún sitio, ¡muéstrenlo! Citan a Marx. Vea usted lo que sucede: las palabras de Marx son el comunismo correcto, y todo lo que en realidad ha ocurrido, eso no es correcto. 

¿Entonces las palabras las utilizamos para designar cosas reales o al contrario? 

Desde este punto de vista, el capitalismo es incorrecto. Y el feudalismo también es incorrecto. Todas estas reflexiones están construidas sobre la base de un pensamiento diletante y pequeñoburgués. Actuaremos como debe hacerse en la ciencia. 

En la URSS posterior a la Revolución se configuró un sistema social que se diferenciaba del sistema social que había en Occidente. Eso es un hecho. Estudiamos este sistema. Cómo lo vamos a llamar, es otra cuestión. 

En la mayoría de los casos lo llamarían comunismo o socialismo. […] Fue liquidada la propiedad privada sobre los medios de producción, los cuales fueron socializados y convertidos en propiedad del Estado. Fue liquidada la clase social de propietarios privados (capitalistas, terratenientes, etc.). Fue realizada la colectivización de la agricultura. La gente no podía ni comprar ni vender la tierra, no podía ni comprar ni vender las fábricas. Fue instituido un único sistema de poder y dirección que atravesaba a toda la sociedad. Fue instituido un único años tenemos que salvar esa distancia. O lo hacemos, o nos aplastan”. 

(Stalin, citado por Service, 2000: 175) Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas | 44 (2014.4) © EMUI Euro-Mediterranean University Institute | Universidad Complutense de Madrid | ISSN 1578-6730 Publicación asociada a la Revista Nomads. Mediterranean Perspectives | ISSN 1889-7231 sistema económico planificado. 

Fue instituida una ideología estatal única. Todas las personas en este sistema, a diferencia de sociedades como la feudal o la capitalista, se clasifican por otros criterios. Si tomamos como ejemplo una empresa, vemos que no hay dueño, desde el director hasta la limpiadora son todos empleados del Estado, todos son asalariados. Entre ellos se diferencian por otros rasgos: se dividen en jefes y subordinados. Se establece una jerarquía de dirección, digamos que con 10 o 15 niveles. Es decir, esta sociedad tiene su propia estructura, su propio sistema de poder, su propio sistema económico, su propia ideología, su propia estructura de población, sus propios principios de redistribución. Yo describo este sistema, y como lo llamen después es un asunto secundario. Destacando el objeto de estudio mediante el sistema anteriormente utilizado, después realizo un análisis sistemático del mismo con los métodos de la ciencia. 

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Lmm : 

LUNES, 25 DE NOVIEMBRE DE 2013    BLOG    REVOLUCIÓN DE LA HUMANIDAD,...¡¡.


LA NUEVA LUCHA INTERNACIONAL PROLETARIA Y LA HISTORIA POLÍTICA DE LOS SOVIETS



EL PODER DE LOS SOVIETS Y LA DIRECCIÓN POLÍTICA ECONÓMICA DE LA URSS. Los obreros y campesinos actuaron,...y después otra vez fueron sometidos, los actuantes, los protagonistas y sus sucesores,...¡¡REPRODUCCIÓN DEL CAPITALISMO-IMPERIALISMO?¡¡



     Con este texto pretendo explicar si la dictadura del proletariado desarrollada, en la URSS, China Popular, -principalmente-, se abordó como yo sentía y comprendía el socialismo y el comunismo,...que capté de los textos clásicos, del marxismo,...Marx, Engels, Lenin, Marta Hannecker,...junto a textos de experiencias como europeas, asiáticas, africanas, latinas,....de luchas sociales, antiimperialistas, antifeudales,...anticapitalistas,...LA IDEA BÁSICA ERA LAS POBLACIONES OBRERAS, JORNALERAS, CAMPESINAS POPULARES,...CON SUS FUERZAS ARMADAS PROLETARIAS, ELLAS SON EL PODER, DIRIGEN EN TOTALIDAD,...REALIZAN LA SOCIALIZACIÓN, CAMBIAN LAS ANTIGUAS RELACIONES SOCIALES DE PRODUCCIÓN Y CONSTRUYEN OTRAS BASADAS EN LA FRATERNIDAD, SOLIDARIDAD, INTELIGENCIA, CORRESPONSABILIDAD,...Y TODO CONTROLADO Y BAJO EL PODER REAL DE LA SOCIEDAD PROLETARIA,...VAMOS DE LA CLASE OBRERA,...Siempre me preocupaba el papel del estado,...aunque sea socialista,...o sea,...la dictadura del proletariado,...llevado por el nuevo estado proletario,...con su partido comunista al frente,...dirigiendo,...gobernando,...YA TENÍA CLARO,...CON MIS ESTUDIOS MARXISTAS,...DE QUE SE PODRÍA DAR MARCHA ATRÁS EN LA REVOLUCIÓN O CONSTRUCCIÓN SOCIALISTA,...


1. QUÉ QUERÍAN DECIR CON LA CRISIS DEL MARXISMO.

He leído bastante, aunque sé que es poca cosa, y siempre, desde hace casi un siglo y medio, se ha escrito y valorado que existe crisis del marxismo,...ya lo empezó a mencionar Lenin. Desde cierta consciencia de mi militancia he escuchado y leído lo mismo, crisis del marxismo,...por todos los lados,...Ahora, en estos nuevos tiempos también leo,...que hay crisis del marxismo,...vaya, que inútiles somos los obreros, los intelectuales revolucionarios,...somos unos llorones,...pero con crisis teórica, y de línea política*. Más,...de miles de escritos, estudios,...sobre lo mismo. SIEMPRE LA LUCHA ENTRE LAS DOS LÍNEAS,...¡¡, que bárbaro,...¡¡. 

(*) Planteo que crisis de línea política también, o que existe,...debido a las múltiples contradicciones de tareas políticas, tácticas y plan estratégico,...sin elaborar,...y como es lógico sin aplicar, en el comunismo actual. Sigo pensando de que existe una guerra interna, civil, en el comunismo,...con miles de tendencias,...por un solo matiz,...división, sectarismo,...El MCI,...no existe,...pero existe una lucha de clases global,...es una contradicción a resolver por el proletariado revolucionario,...que esté organizado.

Planteo en primer lugar al maoismo,...porque hoy en día los que se denominan así,...son los que están en guerra social,...contra los poderes establecidos en ciertos países, como India,...Los no maoistas,...m-l,...y otros,...están casi en acciones sociales-sindicales-parlamentarias,...por ello se abordará en segundo lugar o nivel. 


Los partidos comunistas oficialistas,...no decían nada sobre dicha crisis, del marxismo, o política,...como p.ej. el PCE. El PCUS, el PC CHINO,...no hablaban nada del asunto,...solo de sus logros,...de sus problemas geoestratégicos,...ellos eran el marxismo, el comunismo,...los otros partidos afines, en sus ondas,...todos afines,...todos adalides,...no pasa nada,...el comunismo va para adelante,...lo demás era considerado contrarrevolucionarios, enemigos del pueblo, asesinos, maleantes, ladrones,...Sabía algo de luchas ideológicas en el Estado español,...en la década del 70, y en los ochenta,...hay grupos que se salen del partido comunista oficial,...surgen además los maoistas,...los stalinistas,...

2. LOS MAOISTAS OCCIDENTALES Y LA CRISIS POLÍTICA DE LA CLASE OBRERA INTERNACIONAL.

Éstos rompen con la URSS, con el PCUS, con los partidos comunistas, digamos oficiales,...Bastantes grupos procedían de ideologías cristianas,...de procedencias obreras fundmentalmente,...lastimosos con la miseria, las muertes, las enfermedades,...de los pobres obreras,...Había que revolucionarse,..."Rusia" estaba ya como en la esfera del demonio, por su antireligiosidad,...por lo tanto había que apoyarse en algo nuevo, el maoismo,...Así también con el Guevarismo,...con las ideas políticas del Che,...TODO PURA IDEOLOGÍA IDEALISTA,...nada materialista,...en el sentido científico, vaya, marxista-leninista. Empezaron a militar gentes que hoy en día están en la extrema derecha, desde Federico Lo Santos,...hasta Josep Piqué,...gran ladrón y explotador del PP. Idealismo y fanatismo,...ayer y los actuales, la mayoría de ellos, también. Existen algunos estudios publicados sobre la extrema izquierda maoista en Internet. En las periferias dominadas por el imperialismo occidental,...los comunistas son principalmente maoistas. En las periferias de los centros imperialistas, como Grecia, España,...el maoismo casi no está,...es poca fuerza organizada,...y están atormentados y perdidos,...en estos grandes espacios de poder semiimperialista, de segundo orden.

Funciona más el comunismo reformista,...de participación electoral y acciones sociales-sindicales. En los centros imperiales propiamente dicho,...existen principalmente partidos comunistas,...refromistas, contemporalizadores, institucionalizados,...bien controlados y bien adaptados-reacoplados. En USA, existe un PCR EE.UU. maoista,...pero que lo acusan desde hace años como revisionista-reformista,...una parte del MRI así lo manifiesta,...En otras potencias como Alemania, Japón GB,...no existen esta clase de partidos maoistas,...En Rusia y China no existe tal tipo de partido, aunque existen unos son reformistas y otro, el chino, se ha convertido en partido capitalista-imperialista de estado. Este último tiene 82 millones de afiliados,...creo,...que tres veces más,...¡¡ que todo el aparato estatal,...que son más o menos de 34 millones,...¡¡





3. EL MAOISMO EN CHINA POPULAR, EL MAOISMO EN ASIA Y EN LA URSS.

Este subapartado es irónico. La vida e historia de Mao,...publicada en diversos medios fidedignos y científicos,...explica como se formó el PC de China, su papel en la derrota del poder de clase capitalista-terrateniente,...como capitanea en alianza,...el poder estatal de la nueva RP de China. En esta sociedad nueva se dice que el personal social proclive al poder nuevo comunista, se educaba y se le obligaba,...con democracia popular de por medio,...a las poblaciones obreras, campesinas, jornaleras del campo, de la ciudad,....de los distintos sectores productivos-económicos,...Planes de producción culturales, educativos-formativos,...con una meta,...bien quinquenal, anual,...DADO QUE LAS POBLACIONES OBRERAS EN GENERAL,...ESTÁN MUY ACOSTUMBRADAS A LA DIRIGENCIA ESTATAL Y GUBERNAMENTAL,...EN GENERAL DEJAN HACER,...PERO PARTICIPAN EN LA REVOLUCIÓN,...MUERE EL OBRERO, EL CAMPESINO,...PORQUE ESTE ESTÁ EN EL EJÉRCITO, EN LA POLICÍA,...LAS MASAS PARTICIPAN,....TENEMOS MUY DE CERCA LOS CASOS Y EXPERIENCIAS DIVERSAS EN EL ESTADO ESPAÑOL,...y también en Portugal, Italia,...Grecia,...Francia,...QUE GRANDES ESTADOS SE FORJARON, SE FORMARON, SE CREARON,...ES QUE LOS CURRANTES SIEMPRE ESTÁN PENSANDO EN CONSEGUIR COMO SEA LA COMIDA, EL SUSTENTO,...LOS ESTATALES, LOS FUNCIONARIOS,...ESTÁN COMIENDO DE ESOS CURRANTES,...LES AGOBIAN, LOS OPRIMEN,...SON MÁS LISTOS, LLEVAN LAS RIENDAS BUROCRÁTICAS, NACIONALES, EXTERIORES,...Y SE HACEN DE PODER, CONTRA EL QUE SEA, CONTRA LO QUE SEA,...Antes de las revoluciones, explotados y oprimidos, durante y después organizados, obligados, explotados,...después del poder popular,...oprimido, vejado,...explotado, masacrado,...uf,...qué pasa,...con lo comunista, la clase obrera, los partidos comunistas, sus ejércitos, policías instituciones a su servicio: Servir al pueblo,...que desfachatez,...la mayoría de las veces,...Los nuevos gobernantes, policías y grandes ejércitos para defensa patria, para defensa del pueblo,...¡¡,...pero qué pueblo es defendido,...los listos institucionales, funcionarios,...se reproducen, llevan siglos y siglos así esa experiencia y realidad social,...las relaciones se reproducen,...se vuelven a reproducir una y otra vez,...por ello los auténticos maestros Marx-Engles,... (m-e) lo anunciaban, informaban a los obreros organizados,... ( Ya decía que cambiar la vida era un duro parto, era el parto de la burra,...hay algunos partos de otros animales,...que son más largos de más de un año y medio,...). Y los estados siempre desarrollando imperialismo, de un tipo o de otro.

           Uf,...las políticas exteriores, asumidas y declaradas común bien para la nación, para el país,...para la patria,...pero qué clase de patria,...Por el bien de la patria: Todos sumisos,...si no,...policía, cárcel y fusilamiento que te crió,...Nadie se puede meter con los gobiernos constituidos,...los mismos siempre tienen la verdad,...aunque desarrollen mil cosa distintas y contrapuestas,...siempre tienen la verdad, el poder de decidir,...ante el poder y solo el poder,...fuera todo es ilusión,...así son las relacione sociales,...

CREO QUE EL PROPIO MAO DECÍA DE QUE EL PODER NACE DEL FUSIL,...¡¡. NO, POR NADA.    LUKY DE MÁLAGA.
MIREN DE JOVENCILLO, JUGÁBAMOS A BUENOS Y MALOS, A LAS GUERRAS, Y  UN CHAVAL TENÍA UN ANTIGUO FUSIL DEL ABUELO INUTILIZADO, PERO LO SACABA PARA JUGAR,...ÉL SIEMPRE ERA EL JEFE Y EL QUE GANABA,...QUE PERPLEJIDAD, NO,...¡¡.






//Consecuencias de la revolución rusa. Unión Soviética. Repercusiones internacionales. Estalinismo


Historia universal. URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas). Congreso de los Soviets. 

Comunismo de guerra. Nueva política económica

 Enviado por: Gerardo Bex

Idioma: castellano

País: España España.  EL RINCON DEL VAGO


1CONSECUENCIAS DE LA REVOLUCIÓN RUSA: LA UNIÓN SOVIÉTICA. LAS REPERCUSIONES INTERNACIONALES. EL ESTALINISMO.

1. La URSS.

La dictadura revolucionaria que se impone en los primeros años tiene su base en los Soviets de diputados obreros, soldados y campesinos, órganos de poder estructurados piramidalmente desde el ámbito de localidad al de toda Rusia. En ellos residía tanto el poder ejecutivo como el legislativo o el control judicial, así como el poder militar, en base a los Comités militares revolucionarios . El gobierno, llamado Consejo de los comisarios del pueblo, es elegido por el Congreso de los soviets y controlado por el Comité ejecutivo central.
·         Las elecciones a la Asamblea constituyente se celebraron en noviembre, cuando aún se luchaba por el poder en muchas regiones. De los 707 escaños que se debían cubrir , los bolcheviques sólo obtuvieron 175, es decir, un 25 % de los votos.En enero de 1918 se reunión la Asamblea, rechazando el reconocimiento del gobierno bolchevique y del poder de los Soviets. Antes de celebrar su segunda reunión fue disuelta por la fuerza por las milicias obreras.
·         El Congreso de los soviets anunció su total soberanía, promulgando una constitución provisional que definía al nuevo Estado como República federal socialista y soviética.
·         Se proclamó una declaración de los derechos de los pueblos de Rusia en la que se reconocía el derecho a la autodeterminación de todas las nacionalidades, incluyendo el derecho a separarse. Finlandia y Ucrania proclamaron su independencia. El cuarto Congreso de los Soviets de toda Rusia en 1918, a pesar de las declaraciones, no había intentado dar forma constitucional a los poderes vigentes.
·         El Politburó creó una comisión para preparar una Constitución en la que se daban diferentes posturas, unos buscaban el debilitamiento del poder estatal, otros pretendían reforzarlo, unos pretendían ir hacia un federalismo efectivo , otros una república uniforme.
·         Definitivamente la Constitución de la URSS no reconocía la división de funciones legislativa y ejecutiva. Todas las funciones del gobierno eran una sola que debía ejercerse con un único propósito y por una autoridad indivisible.
·          
·         1.1. La economía.
·          
·         La difícil creación del nuevo estado soviético, que se enfrentaba en una guerra civil con sus opositores, va a dar lugar a un comunismo de guerra con requisas obligatorias de productos agrícolas y los pagos en especie ante la caída de la moneda.
·         Desde el VIII congreso del partido comunista (1919) se había reconocido la necesidad de llamar a los especialistas burgueses que de hecho ya trabajaban en las industrias nacionalizadas por decreto.
·         Él comunismo de guerra señala el momento álgido del riguroso control de los recursos: se nacionalizó la industria manufacturera, se prohibió el comercio privado y se eliminó parcialmente la moneda , y sobre todo, se incautaron los excedentes agrícolas.
·         En el invierno de 1921, conforme terminaba la guerra civil, los líderes soviéticos tuvieron que enfrentarse a graves problemas, provocados tanto por la guerra como por la política económica del “comunismo de guerra”. La situación era catastrófica, destacando los siguientes aspectos:
·         - Extensas zonas del antiguo imperio zarista se encontraban en total ruina económica.
·         - La producción industrial era inferior a la conseguida antes de la revolución.
·         - El nivel de vida de los obreros industriales, teóricos beneficiarios de la revolución , había disminuido.
·         - La política de requisa de cereales a los campesinos era impopular y cada vez más contraproducente.
·         - Las grandes ciudades veían disminuir su población , por lo que el caos industrial no se resolvía. La emigración al campo aumentaba alarmantemente.
·         La respuesta a toda esta situación de desconcierto fue la puesta en marcha de la Nueva Política Económica (NPE) con el abandono de las requisas y la entrada en vigor de un único impuesto en especie sobre la producción agraria; pagado este , el campesino quedaba libre de comercializar el excedente que pudiera restarle.
·         Simultáneamente al NEP agrícola se dio la NEP industrial devolviendo al sector privado, en 1921, las empresas con menos de 20 trabajadores y algunas industrias que estaban nacionalizadas se arrendaron a particulares.
·         Para completar el NEP se realizó un plan de saneamiento financiero suprimiendo los antiguos rublos y cambiándolos por otros nuevos.
·         Las medidas liberalizadoras de la NEP lograron la revitalización de la artesanía y la reanudación de actividades industriales y comerciales privadas. En el período anterior, el Estado intentó asumir por sí mismo todas las funciones de producción y distribución; con la puesta en marcha de la NEP la industria pesada , los transportes y las finanzas siguieron como propiedad del Estado pero la concurrencia privada adquiría importancia en otros sectores económicos, estableciéndose una economía de mercado limitado.
·         Esta política económica fue considerada por los líderes soviéticos como un obligado y temporal paso atrás necesario por el fracaso de extender el comunismo al resto de Europa como creían posible, ya que aquello habría dado lugar a la destrucción del capitalismo...//... sigue...
·        

      CREO QUE YA EN ESTOS PÁRRAFOS CON FONDO AMARILLO, SE DESPRENDE EL CAMINO QUE IBA A TOMAR EL ESTADO SOVIÉTICO, UN CARÁCTER DE CLASE BUROCRÁTICO-BURGUÉS-ESTATALIZADO. Se puede decir que se hizo lo que se pudo,...pero el asunto es que no se puede dar gato por liebre,...estas políticas estatales no concuerdan con el MARXISMO (m-e)**, a mi entender,...pero es lo que es. UN ASUNTO IMPORTANTE SERÍA ESTUDIAR LA URSS, CHINA POPULAR Y OTRAS EXPERIENCIAS CON LA HERRAMIENTA ENGELSIANA, FORMULADO EN EL TEXTO LA FAMILIA, LA PROPIEDAD PRIVADA Y EL ESTADO,...SERÍA ALGO MUY BENEFICIOSO PARA DESTERRAR, QUITAR COMPLEJOS, LIBERAR Y REVOLUCIONAR EL MARXISMO Y LA POLÍTICA DE LOS COMUNISTAS QUE PUEDAN COMPRENDER ESOS NUEVOS ANÁLISIS Y VALORACIONES,...TODO ELLO ANALIZADO CON LAS MIRAS DE LOS TIEMPOS,...CON LAS TRANSFORMACIONES Y REALIDADES SOCIALES. El nuevo título sería : la revolución soviética, la propiedad estatalizada y el estado imperialista post-soviético. En el caso de China podría ser: la guerra popular, la propiedad capi-burocrática y el estado manufacturero de la plutocracia universal. 
      
       ** : (m-e), me refiero así a la teoría de c.marx y f.engels.


                  Esto parece pura fantasía, antidocto, antimarxista dirían y dirán muchos,...LA CUESTIÓN ES QUE LA HUMANIDAD ESTÁ EN UN CALLEJÓN SIN SALIDA, ESTÁ QUE NO TIENE LÍDERES INTELECTUALES, NI PARTIDOS U ORGANIZACIONES PROLETARIAS QUE ESTÉN A LAS ALTURAS DE LAS CIRCUNSTANCIAS Y NECESIDADES ACTUALES,...DE FUTURO,...No estoy hablando de crisis del marxismo,...estoy hablando de crisis social anímica, cultural, espiritual,...Hacer cosas tan apabullantes, tan grandes, tan universales, es impensable,...por eso que nos dejen como estamos,...si hay crisis, miserias, asesinatos, guerras,...que se acaben pronto y a seguir con mi trabajito, mi casita,...y si se puede con mi basito de vino,...y tomando el sol,   la luna,...viendo las estrellas,...que no me toque el muerto por favor,...¡¡. A LA VEZ Y MUY IMPORTANTE,...LAS POLÍTICAS INTERIORES DECIDEN LAS EXTERIORES Y VICEVERSA,...ANALIZAR EN CONJUNTO ES PRIMORDIAL,...AUNQUE YA EXISTEN MILES Y MILES DE ANÁLISIS,...VALORACIONES DE TODOS LOS GUSTOS Y TENDENCIAS. PERO LA GRAN MAYORÍA QUIEREN VALORAR COMO NEGATIVAMENTE SOLO A PARTIR DE 1.956,...DESPUES DE LA MUERTE DE STALIN,...SOLO A PARTIR DE KRUSCHOV,...LA POLÍTICA INTERNA, LA EXTERNA,...TODOS, CASI TODOS, DAN POR BUENA LAS ACTUACIONES DE ANTES, DURANTE Y DESPUÉS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL,...POR PARTE DE LA URSS Y DEL PARTIDO PCUS, ANTES P. BOLCHEVIQUE,...Las valoraciones condicionan las actuaciones políticos de los grupos y entidades comunistas; creo que la mayoría son reformistas, evolucionistas, en definitiva publican que son comunistas y en la realidad científica no lo son,...


 ...//... continúa...//... 

           2. Las repercusiones internacionales.
·          
·         2.1. La salida de la guerra mundial.
·          
·         A la propuesta de paz general dirigida a los alemanes con el propósito de conseguir un armisticio inmediato que evite perder la revolución en unos momentos en que la guerra civil está empezando, con un descontento creciente entre los campesinos y un desbarajuste económico total. 

    [( He leído que incluso representantes militares del frente ( soviets de soldados,...) les dijo a los reunidos, al partido de Lenin,...de que acababan con la guerra o vendrían los soldados y tomarían el poder en San Peterburgo,...

¿¿¡¡ PETROGRADO ??¡¡. -- Segundo Congreso de los Sóviets (7-9 de noviembre de 1917), Instituto Smolny, Petrogrado. WP. --.

quitánselo a los bolcheviques,...); los soldados estaban hartos de guerra,...Por ello planteo que al final el proletariado es utilizado,...con el tiempo,...por lo visto otra vez son sometidos,...Por ello las revoluciones proletarias, de liberación social,...son digamos de ida y vuelta,...de revuelta de empezar una y otra vez,...en condiciones distintas,...pero para la misma causa,...]. Esta noticia la encontré en Internet pero no sabía técnicamente como guardarla y archivarla,...Los pueblos chinos, soviéticos-rusos,...pasaron mucho,...aunque mejoraron algo,...pero las acumulaciones originarias "comunistas", mejor estatalistas-capitalistas,...fueron muy agresivas hacia los no poseedores,...me entienden,...los estatales, que unidos a  los antiguos capitalistas,...enredados, enrolados y con acuerdos políticos diversos,...tenían realmente el poder de clase,...y estatal,...pero que pasa con los soviets, con el partido bolchevique,...también se reconvirtieron en explotadores estatales,...pues parece que sí,...de maneras prusianas,...cuando la lucha de clases no se desarrolla, o no se manifiesta,...o se entapona, se reprime,...la clase obrera,...quedas a merced de las nuevas relaciones de poder y de dominación de clase,...lo revolucionario,...se ponen en cuarenta,...se olvida,...se pasa por las armas,...)]..............................................................................................................................................................................................................................................................................: 

4. ESTOS SOCIALISTAS, JEFES-LIDERES, Y LA INDEPENDENCIA POLÍTICA DEL ESTADO.

                Quiero hablar del estado, como institución,...de clase,...pero que como casi siempre aparece que está al margen de los conflictos sociales, de las diversas tendencias políticas,...e intereses de clases. Aparece siempre como neutral,...incluso en los países en construcción socialista,... EL QUE TIENE EL PODER ARMADO,...Y POLÍTICO Y DIRIGENCIA GUBERNAMENTAL,...ES EL QUE MANDA,...SE PUEDE SER INCLUSO UN PAÍS FALANGISTA, DONDE ESTÉ PROHIBIDO LA LUCHA DE CLASES,...TODO EL PERSONAL SUBORDINADO A LOS INTERESES NACIONALES-ESTATALES. EL PAÍS, EL PATRIOTISMO,...EL BIEN NACIONAL,...LA HISTORIA DE LA LUCHA DE CLASE, LA MATERIAL, LA RACIONAL COMPRENSIÓN ES NECESARIO,...DESDE SIEMPRE, Y HOY MÁS QUE NUNCA,...MIREN POR DONDE,...

            Todo esto va enfocado y condicionado por la valoración estratégica sobre la revolución pendiente global,...la revolución de la humanidad,...donde todos participamos organizadamente,...es algo nuevo,...quizás irracional-tontuelo,...pero nosotros lo desarrollamos, lo publicitamos,...ya es una acción global y total,...todo el personal afectado en acción mancomunada y solidaria para derrotar al capiimperialismo de la ONU-OTAN,...intentando evitar que unos listillos se impongan de nuevo sobre la sociedad emancipadora.


5. REPRODUCCIÓN DE LOS ESTADOS EN LA LLAMADA CONSTRUCCIÓN O VÍAS HACIA EL SOCIALISMO.

       Este artículo que a continuación se expone,...es parte de un artículo, o libro,...el autor no lo he podido guardar, al archivar,...Se expone porque parece que es una valoración sobre como en la URSS no se rompe la ley del valor y por tanto las relaciones sociales de producción.


//URSS vieja sociedad dentro de la nueva.


Cliff argumenta que "la fuente más importante de ingresos estatales era el impuesto sobre el volumen de ventas, que es un impuesto indirecto". (21) Sin embargo, el impuesto sobre el volumen de ventas demuestra, de una manera indirecta, que la ley del valor  se aplicó en la Rusia estalinista. Cliff muestra cómo se aplicó en Rusia. Pero no comprende que éste impuesto debe estar basado en algo. No importa cuánto añada al precio el Estado por la imposición de un impuesto adicional; el precio debe estar  basado en algo. ¿Qué otra cosa puede ser esto sino el valor del producto, el tiempo de trabajo socialmente necesario contenido en él? ¿O creemos que el Estado simplemente decidió tales cosas sobre unas bases arbitrarias, es decir, por mandato administrativo, respaldado por la fuerza? Este es un argumento totalmente infantil, que ya fue demolido en las páginas de Anti-Dühring 

. Engels ridiculizó el "impuesto por la espada" de Dühring, del cual supuestamente se extraía la plusvalía, cuando escribió:

"…O bien los supuestos gravámenes y tributos representan una suma de valor real, a saber, una suma producida por la clase trabajadora y productora de valor, pero que se apropia la clase de los monopolistas; esa suma de valor consta entonces de trabajo no pagado; en este caso, a pesar del hombre con el puñal en la mano, a pesar de los supuestos tributos y del supuesto valor de distribución, nos encontramos con la teoría marxiana de la plusvalía". (22)

El impuesto sobre el volumen de ventas en Rusia y las otras manipulaciones de la burocracia de ninguna manera invalidaron la ley del valor. ¿Cuál es la esencia de la ley del valor?. Que el valor del producto está determinado por la cantidad media de tiempo de trabajo socialmente necesario. Ese debe ser el punto de partida. Se manifiesta necesariamente a través del intercambio
. Marx dedicó una gran parte de su primer tomo de El Capital a la explicación del desarrollo histórico de la forma de la mercancía, desde el cambio accidental entre salvajes a través de transiciones, hasta llegar a la producción de mercancías por excelencia, la producción capitalista.

Incluso en una economía capitalista clásica la ley del valor no se revela directamente.Como ya se sabe, las mercancías se venden por encima o por debajo de su valor. Sólo por casualidad la mercancía se venderá por su valor real. En el tercer tomo de El Capital , Marx analiza el precio de la producción de las mercancías. Es decir, el capitalista sólo consigue el coste de producción de su mercancía, más la tasa media de beneficio. Así, a algunos capitalistas se les pagará por debajo del precio real y, a otros, por encima. Debido a la diferente composición orgánica de capitales diferentes, la ley del valor sólo se manifiesta de esta forma complicada. Esto se efectúa, por supuesto, a través de la competencia.

El monopolio es sólo un desarrollo más complicado de la ley del valor. Debido a la posición dominante conseguida por algunos monopolios, pueden imponer a la fuerza un precio por encima del valor de las mercancías, pero sólo a costa de que otras mercancías se vendan por debajo de su valor. Los valores totales producidos por la sociedad, aún así, supondrían lo mismo. En la medida en que se desarrolle el socialismo, la ley del valor se "desvanecería". Y Engels, habiéndose reído a carcajadas a costa de Dühring, termina señalando que bajo el socialismo "La gente será capaz de administrar todo de forma muy simple sin la intervención del famoso ‘valor’".//



 ¿ QUE  SE PUEDE HABLAR DE LA  NUEVA SOCIEDAD ? La población obrera, campesina y otras fuerzas burguesas, participaron en la conquista del poder soviético. El partido bolchevique monopolizó dicho poder,...con el tiempo,...A la vez se unifica o se confunde con el aparato de estado heredado,...una cosa que quiero exponer ya de una vez claramente y de forma científica es el real poder o no de los soviets,...que era la clase obrera, campesina,...organizada,...la que sufrió las guerras, las opresiones,...pero la política es muy aguda,...la lucha de clases es muy sutil,...la inercia en la conducción social,...de las gestiones gubernamentales,...tienen más experiencias las clases dominantes,...aunque en ciertos periodos no lo tengan, el poder,...se puede decir, que laboran por ellos otras fuerzas sociales,...La profesionalización estatal en conjunto,...desde el ejercito, fuerzas policiales, institucionales-funcionariado,...similar, o igual como en sistemas anteriores, en este caso anterior,...aunque ya de otro modo,...pero con sentido aristocrático, elitista, alejado,...por las circunstancias, de la sociedad obrera-popular,...permite a llegar a formas de poder de clase capitalista,...LA BURGUESÍA ESTATALIZADA EN CONJUNTO FORMA EL PODER DE CLASE DE LA BUROCRACIA,...

              Los que defienden que la URSS fue comunista hasta 1.956,...entre otros muchos grupos maoistas, m-l,...no hablan para nada de lucha de clases,...solo algo de lucha de clases dentro del partido- PCUS-. Por ello busco datos en las "wikips",...





6. NACIMIENTO E HISTORIA POLÍTICA DEL PODER POLÍTICO DE LAS MULTINACIONALES:

He leído bastante, aunque sé que es poca cosa, DE LAS MULTINACIONALES IMPERIALISTAS, DE LOS ESTADOS IMPERIALISTAS. DEL CAPITAL MONOPOLISTA DE ESTADO AL "IMPERIALISMO FASE SUPERIOR(*) DEL CAPITALISMO, LENIN".
(*) Parece que se entendió como lo no va más del capitalismo,...que de ahí a su destrucción, terminación por una forma u otras. Como continua,...y las gentes políticas teóricas no saben qué hacer,...se desmayan, se arrugan y se polvorizan. POR ELLO ESTE Y TODOS LOS ARTÍCULOS ELABORADOS EN ESTE BLOG Y EN OTROS MEDIOS DE PROPAGANDA,...¡¡

              Las multinacionales,...ya aparecen descritas por Lenin entre otros,...quizás con otros términos,...y hoy en día difieren bastantes,...por sus acciones, poder político-económico,...y sus procesos hasta llegar a las multicorporaciones, que son fusiones-uniones de diversas multinacionales, de diversas tareas o de diversas entidades,...países, accionistas,...donde hoy con 35 bancos multinacionales controlan el poderío político global,...donde el capital es mancomunado,...muy concentrado y centralizado,...y casi con un solo orden jerárquico de poder,...la ONU-OTAN,...Por ello las webs que están llenas de artículos sobre las mismas, ilustran y se puede recurrir a ellas,...

              EMPECÉ TITULANDO LA CUESTIÓN DE LOS SOVIETS,...LA CLASE OBRERA Y CAMPESINA,...DE EUROPA, ASIA,...ES ÉSTA UNA EXPERIENCIA MUNDIAL,...CADA COSA A SU MODO., A SU TIEMPO,...LO QUE SE DESTACA ES COMO PIERDEN SUS CONTENIDOS, SUS CARACTERÍSTICAS DE PODER,...PERO DE CLASE PROLETARIA-POPULAR,...EL CAPITALISMO SE REPRODUCE,...CUANDO DIGAMOS QUE ES VENCIDO SE SIGUE REPRODUCIENDO,...LAS DINÁMICAS, LAS INERCIAS,...HAY QUE RECONOCERLO, SABERLO,...EL POR QUÉ SE REPRODUCE,...UNA Y OTRA VEZ LA LUCHA SOCIAL APARECE AUNQUE SEA REPRIMIDA,...LAS CONTRADICCIONES SOCIALES, LA LUCHA POR LA SUPERVIVENCIA SOCIAL,...ES MUY FUERTE,...LA VIDA REPRODUCE LA LUCHA POR LA VIDA,...VIVAN LOS NUEVOS Y ANTIGUOS SOVIETS, COMUNEROS, PARTISANOS,...JUNTAS JORNALERAS,...LAS PLATAFORMAS OBRERAS, SOCIALES,...AL FINAL TODO CASI ES LO MISMO,...SE ENCAJONA, SE DETERMINA LAS ACCIONES SOCIALES EN EL PROCESO DE REPRODUCCIÓN SOCIAL. ))....







LOS ESTADOS,...PAPEL,...AFRECHISMOS Y REPRESIÓN SOCIAL,...¡¡.



LOS ESTADOS QUEDARON CLARAMENTE COMO MAQUINAS REPRESIVAS CONTRA LA CLASE OBRERA Y POPULAR,...SI NO SE REALIZA,...REVOLUCIÓN SE ESTÁ EN CONTRARREVOLUCIÓN Y CON AFRECHISMO SOCIAL,...DESDE HACE MUCHAS DÉCADAS,...SE AGUDIZÓ EN LAS FECHAS DE LA CRISIS DEL PETRÓLEO,...DÉCADA DE LOS 70, SIGLO XX,...DONE SE CREARON FUERTES MUTICORPORACIOES,...MULTINACIONALES Y ¿¿¡¡ MEGACORPORACIONES,...Y EL CAPITAL FINANCIERO HIZO UN PODER UNIVERSAL CON BM, FMI, IIF, CON LOS BANCOS PRIVADOS PRINCIPALES DEL MUNDO,...EUROUSA, ASIÁTICOS, PETRODÓLARES, RUSOS, LATINOS AMERICANOS, DE MÉJICO, BRASIL, ETC,....ELLOS DIRIGEN EL MUNDO DE LAS RR.SS. DE PRODUCCIÓN, DE LAS SOCIEDADES Y DE TODAS LAS GENTES DEL PLANETA,...¡¡. LOS CAPITALES,...LOS USUREROS Y EXPOLIADORES, ( ASÍ QUIERO LLAMAR DESDE HACE UNOS DÍAS, EN ADELANTE AL CAPITAL PÚBLICO Y AL CAPITAL OLIGÁRQUICO,...LOS ECONOMISTAS LES LLAMAN DE VARIAS MANERAS,...DE COOPERACIÓN DE,.......??¡¡. LA MÁQUINA TODO LO CASCA,...PREGÚNTENLE,...??¡¡.

















           






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