sábado, 18 de abril de 2020

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SOLIDARIDAD UNIVERSAL PROLETARIA Y POPULAR, CONTRA EL PODER TECNOPLUTOCRÁTICO,...POR LA REVOLUCIÓN DE LA HUMANIDAD,...¡¡.


REPRODUCIMOS ESTOS TRABAJOS, DE ANTEMANO LES SOLICITO PERMISO,...¡¡.




Estados Unidos le está fallando a los más pobres en la pandemia del coronavirus, afirma experto

ONU / /Evan Schneider
Un conductor de autobús en la ciudad de Nueva York lleva una mascarilla para protegerse del coronavirus
    



16 Abril 2020
Asuntos económicos
Con despidos récord, una red de protección social débil, y el Gobierno enfocándose en las empresas y los ricos, partes importantes del país pronto se enfrentarán a la indigencia. Se trata de un momento para reevaluar los fallidos sistemas de salud, vivienda y apoyo social que han hecho que la crisis sea especialmente dolorosa para los menos afortunados. La pobreza se cierne sobre las clases medias.
Los pobres en los Estados Unidos están siendo los más afectados por la pandemia de COVID-19 y el Gobierno debe tomar urgentemente medidas adicionales para evitar que decenas de millones de estadounidenses de clase media se vean sumidos en la pobreza, asegura un experto de la ONU en derechos humanos.
"Las personas en situación de pobreza y de bajos ingresos enfrentan riesgos mucho mayores por el coronavirus debido a la negligencia crónica y la discriminación, y una respuesta federal confusa y orientada hacia las empresas que les ha fallado", expresó en un comunicado Philip Alston, relator especial de la ONU sobre la pobreza extrema y los derechos humanos, quien realizó una visita de investigación a los Estados Unidos en 2017.
Según Alston, con despidos récord, una red de protección social débil, y el Gobierno enfocándose principalmente en las empresas y los ricos, partes importantes del país pronto se enfrentarán la indigencia a menos que el Congreso tome medidas de largo alcance.

Una ayuda federal que no llega

Más de 22 millones de personas solicitaron desempleo en un período de cuatro semanas, y los economistas de la Reserva Federal proyectan hasta 47 millones de empleos perdidos para el verano. Según los informes, casi un tercio de los inquilinos estadounidenses no pagaron el alquiler a tiempo en abril y el uso del banco de alimentos se está disparando.
“Las personas en situación de pobreza están amenazadas desproporcionadamente por el coronavirus. Es más probable que trabajen en trabajos con un alto riesgo de exposición, que vivan en viviendas abarrotadas e inseguras, que residan en vecindarios que son más vulnerables debido a la contaminación del aire y que no tengan acceso a la atención médica”, dijo. "Las comunidades étnicas, que enfrentan un racismo persistente, corren un riesgo particular y mueren a tasas mucho más altas", agregó.
Los pobres tienen menos recursos para amortiguar los efectos económicos y se ven más afectados por las medidas para frenar la propagación del virus, señaló el relator especial. Los trabajadores con salarios bajos son más susceptibles a los despidos masivos y los recortes salariales, mientras que menos niños de bajos ingresos pueden acceder a clases en línea.
"A pesar de estos graves riesgos, la ayuda federal aún no llega a muchas personas necesitadas y es fundamentalmente inadecuada en alcance y tipo dada la magnitud de la crisis y su impacto a largo plazo", dijo Alston.
Para el experto, los pagos únicos anunciados por el Congreso proporcionan un salario mínimo de menos de un mes, pero puede que no lleguen a algunos de los más vulnerables hasta septiembre y excluyen a millones de inmigrantes indocumentados que pagan impuestos. 
Además, la expansión temporal del seguro de desempleo depende de las oficinas estatales abrumadas, lo que resulta en demoras generalizadas.

ONU//Evan Schneider
Un ciudadano de Nueva York con una pancarta en la que se lee: Para afrontar el coronavirus, debemos trabajar juntos y escuchar a los expertos.

Millones sin acceso a tratamiento médico o alivios

Alston recalcó que más de la mitad de los trabajadores quedaron excluidos de la legislación sobre licencia por enfermedad, y el alivio de la deuda estudiantil excluye a millones de personas con préstamos de empresas privadas. Tampoco se han tomado medidas integrales para cubrir el tratamiento médico a pesar de que decenas de millones no tienen seguro y los costos de cuidados intensivos alcanzan hasta los 70.000 dólares.
"El tratamiento accesible y asequible es esencial, y la planificación debe comenzar ahora para garantizar que cualquier vacuna esté disponible de manera amplia y justa, que no se reparta primero entre los ricos y, finalmente, a los que están en mayor riesgo", dijo.
Según el experto, las personas pobres se verán perjudicadas si el Congreso continúa negando asistencia significativa a los gobiernos estatales y locales, que están considerando recortes a servicios como transporte público, educación, asistencia legal y atención médica.
"La respuesta también ha ignorado la amenaza inminente del cambio climático, y a pesar de los riesgos que la contaminación y las emisiones de carbono representan para las comunidades pobres, la Agencia de Protección Ambiental ha dejado de hacer cumplir muchas regulaciones de informes y monitoreo", denunció el relator especial.
El sistema estadounidense de fianza en efectivo también significa que muchos detenidos están detenidos porque no pueden pagar. "A medida que el coronavirus se propaga en prisiones, cárceles y centros de detención superpoblados e insalubres, incluso los delitos triviales pueden ser una sentencia de muerte", dijo Alston. "Si bien algunas autoridades han implementado liberaciones de sentido común, otras, como en Texas y Nueva York, han duplicado la fianza".

Ali Issa.
Un buque hospital llega a la ciudad de Nueva York, una de las más afectadas en el mundo por el coronavirus COVID-19.

Una situación de pobreza que ya existía

Incluso antes de la crisis, se estima que dos de cada cinco estadounidenses no podían cubrir un gasto de 400 dólares sin endeudarse, y según la Oficina del Censo, 38,1 millones de personas vivían en la pobreza en 2018.
“Las personas pobres en los EE. UU. ya tienen condiciones de trabajo abismalmente inseguras, salarios bajos y alquileres caros, y disfrutan de pocas de las garantías que son la norma en la mayoría de los países desarrollados, como la atención médica universal. El país podría usar su riqueza significativa para resolver muchos de estos problemas, pero una respuesta que favorezca los intereses corporativos y arraigue la desigualdad será catastrófica”, expresó Philip Alston.
Para el relator especial, Estados Unidos debería proporcionar alivio inmediato, como asistencia para el alquiler y suspensiones de cobro de deudas y desalojos, así como soluciones a largo plazo para proteger los derechos y combatir la inseguridad, como un salario digno y la cancelación de la deuda estudiantil. 
“Este es un momento para reevaluar los fallidos sistemas de salud, vivienda y apoyo social que han hecho que esta crisis sea especialmente dolorosa para los menos afortunados ", concluyó Alston.////

La pandemia de coronavirus: una página de recursos

El | revcom.us 
https://www.revcom.us/a/641/resource-page-on-covid-19-pandemic-en.html
COVID-19, la enfermedad causada por un nuevo coronavirus, se ha extendido por todo el mundo, incluido Estados Unidos. Esta pandemia está interactuando con el estado del mundo y las grandes desigualdades y las relaciones sociales opresivas del capitalismo-imperialismo. Está teniendo un gran efecto en la sociedad humana en su conjunto y en países individuales, y puede tener un impacto aún mayor, incluso más allá de lo que está sucediendo ahora. Como dijo Bob Avakian en " La ilusión mortal de la 'normalidad' y el camino revolucionario hacia adelante ":
Subyacente a la crisis inmediata y al peligro que representa el régimen de Trump / Pence y su fanática "base" fascista, existe la realidad más fundamental del sistema capitalista imperialista y las consecuencias de permitir que este sistema continúe dominando el mundo y determine las condiciones de las masas de la humanidad y, de hecho, el destino mismo de la humanidad misma . Esta crisis con el coronavirus ha puesto de relieve la realidad de que el sistema capitalista no está simplemente fuera de sintonía, sino que está  en conflicto fundamental y es un obstáculo directo para, satisfaciendo las necesidades de las masas de la humanidad. A pesar de que los capitalistas y los gobiernos que representan sus intereses se han visto obligados a tomar ciertas medidas de emergencia que de alguna manera van en contra de la dinámica inherente de su sistema (como la intervención masiva del gobierno en el funcionamiento de la economía), las formas en que Este sistema constituye un obstáculo para hacer frente a esta crisis. Continúan imponiéndose, incluidas no solo acciones perversas como el acaparamiento de algunos suministros médicos y de otro tipo vitales, para elevar el precio, sino también el hecho de que la creación de riqueza bajo este sistema se desarrolla sobre la base de la explotación despiadada y el empobrecimiento de masas de personas en todo el mundo, mientras que incluso en los países "más ricos" existe una pobreza significativa y gran parte de la población vive de un sueldo a otro y está a solo una grave crisis lejos del desastre; La continua rivalidad entre diferentes capitalistas (o asociaciones de capital), con su propiedad privada de los medios de producción (tierra, materias primas, tecnología, fábricas y otras estructuras) y la acumulación privada y competitiva de riqueza actúa como un obstáculo para la cooperación necesaria y la producción de cosas que pueden necesitarse con urgencia pero que no son productivas para el beneficio privado, y toda la ideología de promover los intereses de uno a expensas de los demás, el individualismo fomentado por este sistema y promovido al extremo actualmente en este país, va en contra y socava las inclinaciones hacia la cooperación y, sí, A pesar de los esfuerzos dedicados de muchas personas bien intencionadas, incluso si se resuelve la crisis inmediata con el coronavirus, esto se hará sobre la base de intensificar las contradicciones incorporadas en este sistema y el sufrimiento de las masas de la humanidad que ya están explotadas y oprimido bajo este sistema.  [Énfasis en negrita agregado]////

https://www.msn.com/es-us/noticias/coronavirus/los-latinos-y-afroamericanos-son-quienes-m%C3%A1s-est%C3%A1n-muriendo-por-coronavirus-en-nueva-york/ar-BB12lQJW

Los latinos y afroamericanos son quienes más están muriendo por coronavirus en Nueva York






Personal médico transporta el cuerpo de una persona muerta por coronavirus en Nueva York
© Copyright (c) 2020 Telemundo. Personal médico transporta el cuerpo de una persona muerta por coronavirus en Nueva York. Los latinos y afroamericanos son quienes más están muriendo por coronavirus en Nueva York

 Noticias Telemundo  

Los latinos no son solo los más golpeados por el desempleo causado por la pandemia del coronavirus: también son quienes más han fallecido del virus en la ciudad de Nueva York.
De los muertos por la enfermedad, 34% son hispanos, una cifra que, según las autoridades, refleja el riesgo a que se exponen las comunidades de inmigrantes que no han podido dejar de ir a trabajar. Le siguen los afroamericanos con 28% de las muertes.


Los latinos han fallecido a una mayor proporción que el porcentaje de población que representan en Nueva York.
© Proporcionado por Telemundo Los latinos han fallecido a una mayor proporción que el porcentaje de población que representan en Nueva York.

"Hay claras desigualdades, claras disparidades en cómo esta enfermedad está afectando a la gente de nuestra ciudad", dijo el alcalde Bill de Blasio en conferencia de prensa.
“Muchas personas luchan por obtener la atención médica que necesitan, que no tenían el dinero para pagar la atención médica que merecían. Muchas personas han vivido con condiciones de salud crónicas".
[Siga nuestra cobertura sobre la pandemia del coronavirus]
Datos desagregados por vecindario muestran que aquel con mayor número de casos confirmados de COVID-19 es el de Corona, Queens, un barrio donde la mayoría de los habitantes son inmigrantes. Ahí hay 1,659 personas contagiadas, más que en cualquier otra parte de la ciudad.
Las cifras del Departamento de Salud muestran la tasa de muertes de los hispanos (22 muertes por cada 100,000 habitantes) es el doble que aquella de los blancos (10 muertes por cada 100,000 habitantes).
En pocas palabras, los hispanos tienen 50% más probabilidad de morir que las personas blancas.
Para la puertorriqueña Oxiris Barbot, responsable municipal de Salud, la retórica antiinmigrante en el país ha tenido un impacto directo en la salud de las comunidades afectadas por el coronavirus.
"Estamos notando que los latinos están falleciendo más que cualquier otro grupo en la ciudad y esta información nos preocupa", dijo en una conferencia de prensa
El ser hispano o latino no es considerado como raza, sino como etnicidad. Ello significa que el número real de muertes de hispanos puede ser mucho mayor, ya que también se les considera dentro de las razas negra o blanca.
Muchos de los hispanos y afroamericanos en Nueva York son trabajadores de la industria de los servicios que no han podido quedarse en casa. A ello se suman los trabajadores indocumentados que no pueden acercarse a los servicios de salud oportunamente.
"¿Hay más trabajadores públicos latinos y afroamericanos?", cuestionó el gobernador Andrew Cuomo. "Quienes no tienen otra opción, francamente, que salir todos los días y conducir el autobús y el tren y presentarse para el trabajo y terminar sometiéndose, en este caso, al virus, mientras que muchas otras personas que tenían la opción simplemente se ausentaron (del trabajo)".///




Aunque el gobernador del estado de Nueva York afirmó hace unos días que el coronavirus "nos iguala a todos" [no hacía distinciones por motivo de raza, religión o ingresos], los datos muestran que esto no es así en absoluto. El lunes, Estados Unidos superó la cifra de 10.000 muertos por coronavirus y ahora las autoridades sanitarias lidian con el hecho de que la pandemia está sacudiendo a la población afroamericana de forma desproporcionada, especialmente en grandes ciudades como Nueva Orleans, Chicago y Detroit, donde la densidad de población afroamericana es alta.
Luisiana es el cuarto estado del país con más casos de coronavirus. La ciudad de Nueva Orleans, donde el 60% de la población es negra, concentra la mayoría de las muertes del estado. "Un poco más del 70% de los muertos por coronavirus en Luisiana son afroamericanos", señaló este lunes el gobernador del estado, John Bel Edwards, en rueda de prensa: "Tendremos que estudiar este dato con detenimiento para ver qué podemos hacer para abordar este problema".
Algunas ciudades del medio oeste, como Detroit, Chicago y Milwaukee, también han alertado de la creciente desproporción de afroamericanos muertos por coronavirus. Detroit, donde prácticamente el 80% de la población es negra, es la ciudad del estado de Michigan que concentra más casos. La tasa de mortalidad de la ciudad representa el 40% del total de muertes del estado.
En Chicago, donde el 30% de la población es afroamericana, este grupo concentra el 70% de casos de coronavirus en la ciudad y más de la mitad de las muertes por coronavirus del estado. "Somos muy conscientes de que en lo relativo a la atención sanitaria se dan desigualdades estructurales en ciertos grupos y es probable que esto también sea aplicable en el caso de la detección y tratamiento por esta enfermedad", ha señalado Ngozi Esike, director del departamento de salud pública de Illinois.
Los afroamericanos tienen una mayor exposición al virus y, por lo tanto, un riesgo mayor a contraer la enfermedad. Suelen concentrarse en áreas urbanas y trabajan en los sectores esenciales [que no han parado su actividad]. Según el Economic Policy Institute, solo el 20% de los trabajadores negros está teletrabajando, en comparación con el 30% de los trabajadores blancos. Por este motivo, en los estados sureños, el virus ha matado a más hombres negros mayores, aunque también ha sacudido a las mujeres y a los jóvenes afroamericanos.
Por otro lado, los expertos señalan que las investigaciones preliminares muestran una mayor prevalencia de Covid-19 entre quienes sufren de obesidad, presión arterial alta y diabetes; factores de riesgo más comunes entre los estadounidenses afroamericanos. El virus resulta más peligroso para aquellos con patologías previas y muchos hospitales sólo hacen pruebas de detección del coronavirus a los que están ingresados en cuidados intensivos.
Algunas voces críticas han recordado que estos riesgos aumentan considerablemente debido a la desigualdad racial predominante en el ámbito de la atención sanitaria, como el cierre de centros médicos [en zonas predominantemente afroamericanas] y recortes en programas públicos de atención sanitaria para personas sin recursos o mayores, como Medicaid y Medicare. Los afroamericanos tienen el doble de probabilidades de carecer de un seguro médico, en comparación con la población blanca, y también tienen más probabilidades de vivir en una zona que carezca de los servicios de salud adecuados, y donde la atención primaria es escasa o demasiado cara.
Además, y según un artículo publicado en el Journal of General Internal Medicine [una revista médica sobre medicina interna general], algunos prejuicios racistas inconscientes también pueden contribuir a exacerbar estas desigualdades en la atención sanitaria, especialmente cuando los profesionales de la salud no están familiarizados con la mentalidad de la comunidad donde trabajan. La Century Foundation ha constatado que los proveedores de servicios de salud que trabajan en barrios predominantemente afroamericanos o latinos tienden a proporcionar un servicio de menor calidad.
El gobernador del estado de Illinois, Jay Robert Pritzker ha reconocido que los prejuicios racistas han influido en la respuesta que ha dado el estado al brote de coronavirus. Sin embargo, considera que forma parte de "un problema mucho más complejo" que no podrá solucionarse en cuestión de semanas. "Es difícil solucionar décadas, incluso siglos, de desigualdad en lo relativo a los servicios de salud que se han proporcionado a la población negra", ha señalado. Y, si bien es cierto que el virus no hace distinciones [entre personas por motivo de raza, religión o situación económica], la doctora Uché Blackstock, responsable de Advancing Health Equity, una entidad sin ánimo de lucro que defiende una atención médica de calidad para los grupos más vulnerables, señala que la respuesta del gobierno sí puede ser discriminatoria.
Explica que cuando se propagó el virus, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos publicaron unas directrices para las pruebas de detección de coronavirus que daban prioridad a las personas que habían viajado al extranjero. Como consecuencia de esta medida, a los pacientes de Blackstock que viven en zonas de renta baja de Brooklyn y Queens, en su mayoría afroamericanos, no se les practicó la prueba con tanta celeridad como a aquellos pacientes blancos de Blackstock que viven en Manhattan y tienen mayores ingresos y más facilidades para viajar. "Ahora sabemos que el Covid-19 se estuvo propagando en nuestras comunidades mucho antes de lo que creíamos", indica.
En Wisconsin, más de la mitad de las muertes que ha confirmado el estado (86) son de habitantes de la ciudad de Milwaukee. La escasez de test y la lenta reacción de las autoridades propiciaron que el número de casos en la ciudad pasara de sólo uno a más de 350 en menos de dos semanas. Las autoridades sanitarias creen que el virus entró en la ciudad después de que la primera persona infectada entrara en contacto con alguien de un barrio próspero y predominantemente blanco situado cerca.
El político demócrata afroamericano David Bowen, representante del estado, fue el primer legislador de Wisconsin al que se le diagnosticó coronavirus. Explicó a The Guardian que más tarde se confirmó que había pasado el virus a otras tres personas. Sólo a una de ellas se le practicó la prueba. "Las comunidades blancas enferman y esa misma enfermedad podría matar a las comunidades negras, ya que la falta de atención sanitaria a menudo nos obliga a autodiagnosticarnos", lamenta.
Según las directrices del Centro para el Control y Detección de Enfermedades, todos los estados del país están obligados por ley a proporcionar información sobre la raza de los pacientes a los que se le ha practicado la prueba de detección del coronavirus y ha sido tratado, como ha hecho con brotes anteriores. Hasta la fecha, solo unos cuantos estados han dado a conocer esta información.
La semana pasada, los demócratas en el Congreso, entre ellos, la senadora Elizabeth Warren y la congresista Ayanna Pressley, las dos de Massachusetts, mandaron una carta al Centro para el Control y Detección de Enfermedades para instarlo a proporcionar información sobre la raza de los enfermos. La carta indicaba que sin esta información las autoridades sanitarias y los legisladores no podrán abordar estas desigualdades en las pruebas de detección y el tratamiento.
El Comité de Abogados por los Derechos Civiles también ha criticado al CDC por no proporcionar el desglose de esta información. "Estamos ante una crisis sin precedentes y las autoridades del estado y del gobierno desempeñan un papel muy importante en lo relativo a la promoción de la transparencia", ha indicado Kristen Clarke, presidenta y directora ejecutiva del comité.
El comité envió cartas instando a las autoridades sanitarias del estado y del gobierno a publicar la información. El lunes, la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, publicó por primera vez las cifras de coronavirus por raza: de los 24 muertos por coronavirus, catorce son afroamericanos. Hasta 2011, Washington era una ciudad predominantemente negra. En la actualidad, el 45% de los habitantes de la ciudad son afroamericanos.
Bowser no quiso hacer una lectura de desigualdad racial, y optó por afirmar que "todas las muertes [por coronavirus] son preocupantes". Sin embargo, para muchas comunidades afroamericanas, el riesgo de infección es proporcional a su miedo. Según el Pew Research Center, el 46% de los afroamericanos perciben el coronavirus como una amenaza a su salud; más del doble que los estadounidenses blancos.
"Sabemos que los afroamericanos son particularmente vulnerables. Se trata de una injusticia social, económica y racial", ha afirmado Clarke: "El tratamiento que recibe una comunidad tiene un impacto en todas las comunidades del país".
Traducido por Emma Reverter////

Internacional

CORONAVIRUS

Mapa interactivo: pandemia y huelgas en Estados Unidos

En medio de la pandemia, Estados Unidos registra una oleada de huelgas impulsada por miles de trabajadores que piden por condiciones seguras para realizar sus tareas y licencias pagas para quienes las necesiten. Al grito de "nuestras vidas también son esenciales", enfrentan a los empresarios que privilegian sus ganancias por sobre las vidas obreras.
http://www.izquierdadiario.es/Mapa-interactivo-pandemia-y-huelgas-en-Estados-UnidosMiércoles 15 de abril | 16:46. 



Este mapa interactivo publicado por el sitio Payday Report muestra la resistencia de miles de trabajadores en EE. UU. en distintos puntos del país. En las últimas semanas fueron registradas al menos 95 huelgas de trabajadores de logística, fast food, personal de la salud, supermercados e industriales por licencias pagas y elementos de protección personal contra la desidia empresarial.
Esta acciones y protestas organizadas en algunos lugares por los propios trabajadores y en otros por sus sindicatos u organizaciones de lucha enfrentan directamente la política de los empresarios norteamericanos como Jeff Bezos que privilegian sus ganancias por sobre la vida de los trabajadores, alentados por el mismo presidente Donald Trump que subestimó durante meses la pandemia para continuar produciendo. El resultado, medio millón de infectados y miles de muertos -se estima que haya muchos más- con una proyección de cientos de miles de muertos sólo en el país del norte.
El sector más golpeado por esta pandemia es la clase trabajadora, y entre ellos los latinos y afroamericanos, siendo que además como explica Kim Moody, son los que trabajan más cerca de las zonas afectadas por el virus. Por su parte a los inmigrantes sin documentos se los sigue persiguiendo, expulsando o encerrando de formas inhumanas y en condiciones de hacinamiento, llegando al punto de que 37 niños migrantes se han infectado de COVID-19 en albergues de Chicago.
En este escenario muchos empresarios aprovechan para despedir a millones de trabajadores, bajar sus costos y maximizar ganancias, esperando el multimillonario rescate votado en el Congreso por republicanos y demócratas. En el otro extremo empresarios como Bezos y los dueños de supermercados como Walmart aumentan sus ganancias en medio de la pandemia e incluso anuncian que tomarán a más trabajadores. Es en estos sectores, e incluso en otros de tareas no esenciales como las empresas de comida rápida, que millones de trabajadores se ven obligados a trabajar sin materiales de seguridad y sin derechos.
Por este motivo la oleada de huelgas en medio de esta pandemia tiene como uno de sus reclamos principales el de licencias pagas para aquellos que lo necesiten si se enferman, y el de elementos de protección personal para trabajar de forma segura.
En el mapa interactivo están registradas huelgas por todo el país, desde astilleros y fábricas de electrónica, hasta los locales de comida rápida, trabajadores de la salud, logística y supermercados.
Muchos de estos trabajadores han sido infectados en los galpones de Amazon en Staten Island, en Nueva York -el centro de coronovirus en EE. UU.- o en los de Chicago. También el sindicato de los madereros de Massachussets llevó a 13 mil carpinteros a la huelga.
Los trabajadores de Whole Foods e Instacart abandonaron sus puestos de trabajo para exigir mayor seguridad. Los trabajadores de McDonalds han hecho huelga en varias ciudades por licencia paga por enfermedad. Los empleados de General Electricse manifestaron para la conversión de su planta a la producción de respiradores. Los trabajadores del astillero de Bath Iron Works en Maine abandonaron sus tareas. Todos exigen los elementos de protección personal y las licencias pagas como parte de las medidas votadas por el Congreso, pero que las patronales no entregan.

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Incluso los mismos trabajadores de la salud no reciben los elementos de protección personal estando en primera línea en la lucha contra el virus, por esa razón son de los más golpeados. Por eso hacen acciones de protesta casi todos los días, este miércoles 15 hubo una jornada de protesta en Nueva York de médicos y enfermeras. Estas acciones son ejemplos de la bronca, organización y lucha que atraviesan de punta a punta a todo el país.
Muchos analistas anuncian una crisis peor que la de 1929, por el momento el desempleo alcanza su nivel más alto desde la Gran Depresión, superando la crisis de 2008. La oleada de huelgas que se extienden por todo el país son un primer indicador de resistencia a las condiciones actuales impuestas por los empresarios en medio de la pandemia, y un importante ejercicio hacia las luchas que vendrán en el futuro./////

América rompe la barrera de 725.000 contagios en medio de tensiones políticas. 

https://elobrero.es/internacional/46892-america-rompe-la-barrera-de-725-000-contagios-en-medio-de-tensiones-politicas.html

Fotografía de tumbas este miércoles en el cementerio Angela María Canales al sur de la ciudad de Guayaquil (Ecuador). Según un último reporte oficial, 7.858 personas han dado positivo por COVID-19 en Ecuador, 5.551 de ellos en la provincia de Guayas (cuya capital es Guayaquil), seguida de Pichincha con 674 casos. EFE/Marcos PinFotografía de tumbas este miércoles en el cementerio Angela María Canales al sur de la ciudad de Guayaquil (Ecuador). Según un último reporte oficial, 7.858 personas han dado positivo por COVID-19 en Ecuador, 5.551 de ellos en la provincia de Guayas (cuya capital es Guayaquil), seguida de Pichincha con 674 casos. EFE/Marcos Pin

El coronavirus sigue cada día sumando más infectados en América, donde hay ya 725.000 contagiados, en medio de la preocupación por las pocas pruebas que tienen hasta el momento la mayoría de los países y las tensiones políticas en EE.UU. y Brasil.
En los conteos, recogidos por la universidad estadounidense de Johns Hopkins, se apunta este miércoles la cifra de 725.753 casos, mientras que el número de muertes confirmadas, según la Organización Mundial de la Salud, asciende a 27.336.
En ese sentido, la mayoría de los Gobiernos siguen implementando medidas para aminorar el impacto de la pandemia en sus economías y estructuras sociales, con consecuencias colaterales que seguramente van a dejar huellas profundas en todos los países.
La cifra de los más de 725.000 contagios podría ser, en un escenario optimista, apenas una dramática muestra de cómo realmente está afectando la enfermedad a América, teniendo en cuenta un factor: el subregistro, que es la poca capacidad de realizar pruebas en algunos países, sobre todo en América Latina.
TENSIÓN POLÍTICA
El polémico anuncio del presidente estadounidense, Donald Trump, de suspender los fondos a la Organización Mundial de la Salud (OMS) desató las criticas en EE.UU, y en el mundo, que el mandatario enmarca en su consigna nacionalista de "EE.UU. primero".
"Nunca dudaré en tomar las medidas necesarias para proteger la vida, la salud y la seguridad del pueblo estadounidense. Siempre pondré el bienestar de EE.UU. primero", dijo Trump, mientras que en el país ya son más de 600.000 las personas contagiadas y casi 28.000 personas han muerto. EE.UU. aporta entre 400 y 500 millones de dólares anuales a la OMS, entre sus contribuciones obligatorias y voluntarias.
En Brasil, con 1.736 muertos y 28.320 casos, la gestión ante la pandemia del presidente Jair Bolsonaro provocó la renuncia del secretario de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud, Wanderson de Oliveira.
La tensión fue a mayores y durante horas se habló de una posible dimisión del ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta. Él mismo tuvo que desmentirlo para parar con estas especulaciones que desde hace días rondan los pasillos de los centro de poder de Brasilia.
Las discrepancias entre Bolsonaro y Mandetta por la necesidad de cuarentenas u otras medidas de aislamiento social, que el gobernante censura, llevaron este miércoles a la dimisión del secretario de Vigilancia Sanitaria, pero Mandetta explicó que no la aceptó y que le convenció a continuar en el cargo. "Estamos juntos y continuamos juntos. Él dijo que salía, yo dije que no aceptaba y aquí estamos", dijo el ministro.
POR COMIDA O TRABAJO
En Bogotá, cientos de personas se lanzaron hoy a las calles para pedirle tanto al Gobierno de la ciudad como al Ejecutivo que preside Iván Duque que los ayuden con alimentos o los dejen ir a trabajar, dada la cuarentena obligatoria decretada desde el pasado 25 de marzo y que fue ampliada hasta el 27 de abril.
"Tengo cinco hijos y los hijos qué, ¿se van a morir de hambre? No tengo ninguna solución del Gobierno, entonces que me dejen trabajar", aseguró a Efe un obrero que participaba en la toma de la Avenida Suba, una de las principales arterias de la urbe.
Las autoridades colombianas han admitido que después del 27 de abril se podría considerar una flexibilización de la cuarentena para mover de a poco sectores de la vida productiva, pero esto depende de cómo se comporte la pandemia en Colombia, donde ya hay reportados 3.105 casos de SARS-CoV-2 con 131 muertes.
EL CORONAVIRUS TAMBIÉN ALCANZA LOS VIENTRES
Si bien se sabe que el coronavirus afecta en una mayor proporción a los adultos mayores, este no conoce de edad, y es el caso de un recién nacido y su madre en Perú, país que suma 11.475 positivos y 254 fallecidos.
En un hospital de la selvática ciudad de Moyobamba, la mujer, paciente asintomática, dio a luz por cesárea este miércoles, procedimiento tras el cual, por protocolos establecidos, se le realizó la prueba del SARS-CoV-2 tanto a ella como al neonato, dando ambas positivo.
"SIGNOS VITALES" DE DANIEL ORTEGA
Uno de los misterios de esta lucha americana contra el COVID-19 es Nicaragua, ya que su sistema sanitario no da luces claras sobre sus estrategias de prevención y sus cifras son poco creíbles tanto para países vecinos como para organizaciones internacionales.
El país centroamericano apenas sí reporta nueve casos con una sola persona fallecida, pero incluso Gobiernos aliados como el de Cuba han lanzado alertas sobre estos números, ya que algunos de sus contagios (814) tienen relación con personas llegadas de Nicaragua.
Y en medio de este mar de secretismo, el Gobierno de Daniel Ortega, presidente del país y casi que el único líder americano en no pronunciarse en medio de la pandemia, anunció que en horas de la noche de este miércoles está previsto que el mandatario dé una alocución televisiva tras 34 días sin ser visto en público.
ESTÍMULOS FISCALES YA EN LA MANO
En Estados Unidos se comenzaron a entregar ya este mismo miércoles las transferencias directas de efectivo, parte de un paquete de estímulo fiscal aprobado por el Congreso para compensar el impacto económico de la pandemia, y que ascienden a 1.200 dólares por persona con ingresos menores de 75.000 dólares al año, 2.400 en el caso de matrimonio, más 500 dólares adicionales por hijos menores de 17 años.
El monto total de este programa de alivio es de dos billones de dólares, el mayor en la historia del país, e incluye además de los pagos directos, subsidios para empresas, ampliación de la cobertura por desempleo, avales y créditos blandos para pequeñas y medianas empresas.
Otro anuncio comprendido dentro de las ayudas económicas a los más afectados por la crisis es el hecho desde Nueva York, en el que se consigna que las autoridades del sector transporte de la ciudad que actualmente es el foco de la pandemia a nivel mundial indemnizarán con 500.000 dólares a las familias de sus empleados muertos por COVID-19.
Esta cantidad es diez veces más de lo que habitualmente se compensa por la muerte de un trabajador en activo. El estado de Nueva York, que hoy ha sumado 752 víctimas mortales para totalizar 11.586 en su muy dramática lucha contra el virus, ha tomado otro paso radical más y es el de obligar el uso de tapabocas, mascarillas o trozos de tela cuando sea imposible mantener una distancia social de dos metros. EFE.////



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