¡¡ "",... Y REPETIMOS,...KE CONSTE, KE YA LO HEMOS MÁSKÉ, REBATIDO,... Y ENCIMA NOS KOPIAN,...TERGIVERSAN LO NUESTRO Y KIEREN DAR EL PEGO,..MUNCHA JETA MORROKOTUDA ER-CHIQUILLO-CHABALOTE MALOTE,...¡¡¡.-- NO NOL,... NO NOS CHUPAMOS LOS DEOS,...-- ¡¡.
(((,... " [[ LUKYMÁ./Lmm. >> ( gruprolmá. -2.000- )]].
EN OCTUBRE 21/21 >> -- ¡¡ 84,5 años pasados, bombardeo guernika-población
vaska-spánikus-euraka-onuotan+fs. ¡¡ -- "" LAS METAMORFOSIS PARTITOCRÁ-
TIKAS Y PODERES ONUOTANISTAS+150FRANKIS, CONTRA LA SOSTENIBILI --
DAD Y SUSTENTABILIDAD DE LA HUMANIDAD,...¡¡¡---
Marxismo vivo vs. marxismo vulgarizado
Revolución liberadora, no reformismo sin vida
Con ciertas tendencias políticas, incluso entre los "despertados", los "progresistas" y los "de izquierda" en general, este es un estribillo común: "El marxismo solo trata con la clase, y no habla de, o no tiene solución para, la supremacía blanca y la supremacía masculina".
Esto, donde no es una cuestión de deshonestidad absoluta, es una expresión de ignorancia grosera.
El marxismo, en su desarrollo desde la época del propio Marx hasta el presente, ha sido y es hoy el enfoque más amplio de la realidad en su conjunto, y específicamente de la transformación del mundo, con el objetivo de emanciparse de toda forma de explotación y opresión en todas las dimensiones de las relaciones humanas.
Ahora, se puede decir que la ignorancia y la confusión sobre esto se deben, hasta cierto punto, al hecho de que algunos de los que hablan en nombre del "marxismo" son de hecho reformistas estrechos y mezquinos, que reducen la teoría revolucionaria científica y radical del marxismo real a lo que equivale a un crudo "economicismo" y sindicalismo. ("El econonismo" reduce la lucha de la clase obrera explotada a cuestiones económicas, y específicamente a la lucha por mejorar la situación de la clase obrera dentro de su condición explotada, con demandas de salarios y beneficios más altos, etc. En algunas versiones de este "economicismo", se afirma que este enfoque es el mejor, o el único, medio de ganar a la clase obrera para luchar en última instancia por el socialismo, sin embargo, eso es concebido por estos "economistas").
Esto, de hecho, es una distorsión vulgar del marxismo. Después de todo, es Marx (junto con su colaborador y cofundador del movimiento comunista, Frederick Engels) quien insistió en que los trabajadores deberían inscribir en su pancarta no "Un salario justo por un día justo de trabajo", sino "Abolición del sistema salarial", en otras palabras, la abolición del sistema capitalista de explotación.
Además, en una formulación que ha llegado a ser conocida como las "4 Todas", Marx expuso, de una manera muy amplia y al mismo tiempo concentrada, el propósito y el objetivo fundamentales de la revolución comunista, que, dijo, apunta a la abolición de todas las distinciones de clase, todas las relaciones de producción en las que descansan esas distinciones de clase, todas las relaciones sociales correspondientes a esas relaciones de producción, y la revolucionarización de todas las ideas correspondientes a esas relaciones sociales. Aquí he subrayado las "relaciones sociales", para enfatizar que esto implica, entre otras cosas, la eliminación de la opresión de las nacionalidades minoritarias y de las mujeres. Y Engels escribió un largo estudio,El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado,que es una obra seminal que habla ampliamente de la base histórica y el desarrollo de la opresión de las mujeres, y el camino hacia la eliminación de esta opresión.
Lenin y el desarrollo ulterior del marxismo
Por supuesto, como método y enfoque científico, el marxismo debe continuar, y ha continuado, desarrollándose. Después de Marx y Engels, fue Lenin (el líder de la Revolución Rusa de 1917, que fundó la Unión Soviética como el primer estado socialista del mundo) quien desarrolló aún más la ciencia del comunismo. Como una dimensión crítica de esto, como se concentra en su obra ¿Qué hay que hacer? Lenin libró una poderosa polémica contra el economicismo, enfatizando que la clase obrera explotada(proletariado)nunca podría obtener la conciencia revolucionaria y comunista desde la estrecha esfera de sus propias circunstancias y experiencias inmediatas, sino que esta conciencia debe ser llevada al proletariado por una fuerza de vanguardia organizada, basada en la ciencia del comunismo. Y, subrayó, para desarrollar esta conciencia comunista es necesario comprender el funcionamiento básico del sistema capitalista-imperialista y cómo este afecta y es respondido por diferentes fuerzas de clase y sociales, a fin de dejar en claro que la revolución que se necesita es una basada en los intereses fundamentales del proletariado,en eliminar y desarraigar no solo la explotación del proletariado mismo, pero todas las relaciones opresivas en la sociedad. (Esta fue una elaboración sobre la famosa declaración de Marx de que el proletariado sólo puede emanciparse emancipando a toda la humanidad).
Lenin también desarrolló teóricamente la visión crucial de Marx de que el establecimiento de una nueva sociedad socialista no podía lograrse afianzándose en la maquinaria estatal existente que había servido al sistema capitalista; era necesario, en cambio, aplastar esa maquinaria estatal y establecer un nuevo poder estatal. Y, por supuesto, Lenin dirigió la revolución en Rusia para hacer precisamente eso.
Al mismo tiempo, Lenin analizó el desarrollo del capitalismo en un sistema mundial de explotación, el imperialismocapitalista, y enfatizó la importancia de la revolución en las vastas regiones del mundo bajo la dominación colonial de las potencias imperialistas extranjeras.
Mao Zedong: otro salto en el desarrollo del comunismo
Fue Mao Zedong, en el proceso de liderar la revolución china durante varias décadas, a partir de finales de la década de 1920, quien provocó otro salto en la teoría comunista. En particular, Mao desarrolló la estrategia para hacer la revolución en un país como China, un país sometido al "semicolonialismo" (dominación de varias potencias imperialistas contendientes) y caracterizado por el "semifeudalismo" (relaciones en las que cientos de millones de campesinos fueron explotados despiadadamente por los terratenientes, junto con el desarrollo de las relaciones capitalistas, particularmente en las ciudades). A pesar de que Mao enfatizó que era importante que los comunistas analizaran concretamente y procedieran sobre la base de las condiciones reales en sus países particulares (en el contexto de la situación mundial en general), este enfoque estratégico para la revolución tenía una relevancia importante para el gran número de países del Tercer Mundo (América Latina, África, Oriente Medio y Asia). donde las condiciones eran similares a las de China. Y es digno de mención que, durante el poderoso levantamiento de la década de 1960, Mao emitió dos declaraciones en apoyo de la lucha del pueblo negro en los Estados Unidos, enfatizando al mismo tiempo la relación crucial de esto con la lucha para derrocar el sistema capitalista en su conjunto.
Más allá de eso, después de la victoria de esta revolución en China (en 1949), Mao continuó haciendo avances históricos en la teoría comunista. Resumiendo la experiencia de la Unión Soviética, donde el capitalismo había sido restaurado a mediados de la década de 1950, incluso cuando continuó durante varias décadas después de eso llamándose a sí mismo "socialista", así como la experiencia en la propia China, donde existía el creciente peligro del mismo tipo de contrarrevolución, Mao desarrolló la teoría y la estrategia de continuar la revolución en la sociedad socialista. Al hacerlo, Mao analizó, de una manera más allá de lo que se había entendido anteriormente en el movimiento comunista, cómo las contradicciones dentro de la propia sociedad socialista (así como la existencia, influencia y acciones de los estados imperialistas y otros estados reaccionarios) continuarían, durante mucho tiempo, dando lugar a fuerzas que buscarían restaurar el capitalismo; y,Mao analizó además, dado que el partido comunista de vanguardia es la fuerza líder en la sociedad socialista, es dentro de ese propio partido, particularmente en sus niveles más altos, que se generarían las fuerzas más concentradas y poderosas de la restauración capitalista, entre aquellos que, como dijo Mao, son "personas con autoridad que toman el camino capitalista". La Revolución Cultural en China, que tuvo lugar durante más de una década desde mediados de la década de 1960 hasta 1976, y que involucró a cientos de millones de personas en la lucha por la dirección de la sociedad, fue la manifestación concreta y la expresión masiva de esta teoría y estrategia de continuar la revolución en la sociedad socialista.
Es una verdad trágica, que ha tenido que ser enfrentada, que después de la muerte de Mao en 1976, el "pueblo con autoridad tomando el camino capitalista" pudo tener éxito en tomar el poder, reprimir violentamente a las fuerzas revolucionarias que resistían este golpe capitalista y llevar a China por el camino de la restauración capitalista, lo que ha resultado en el surgimiento de China, no como un poderoso estado socialista y una fuerza para la revolución en el mundo, sino como un estado capitalista-imperialista cada vez más poderoso. Esto, como una cuestión de amarga ironía, ha confirmado el análisis de Mao sobre el peligro de la restauración capitalista dentro de la sociedad socialista.
Pero, al igual que con el marxismo en general, la orientación y las contribuciones de Mao no estaban simplemente en el ámbito de la política (incluso entendiendo la política en el sentido más amplio). Es Mao quien escribió la perspicaz declaración de que el marxismo abarca pero no reemplaza el ámbito de la física y la ciencia en general, así como el arte, de hecho, todas las dimensiones de la existencia humana y la realidad en general.
El nuevo comunismo: un avance adicional
Con la reversión de la revolución en China y la restauración del capitalismo allí, la primera etapa de la revolución comunista (que comenzó con la efímera Comuna de París en Francia en 1871) llegó a su fin. Los comunistas de todas partes se enfrentaron a la necesidad apremiante de analizar científicamente lo que realmente había sucedido con el golpe en China, que el capitalismo había sido restaurado, y por qué esto había sucedido. Es a este desafío al que me dediqué, comenzando inmediatamente después de este golpe, a fines de 1976. Y, a partir de este análisis, me propuse hacer un resumen científico más profundo de la experiencia histórica del movimiento comunista y las sociedades socialistas que había creado, primero en la Unión Soviética y luego en China. A lo largo de varias décadas, identificando y defendiendo el aspecto principalmente positivo de esta experiencia, pero también haciendo un examen crítico del aspecto negativo secundario a veces muy serio pero general, y basándose en una amplia gama de experienciashumanas, el resultado de este trabajo ha sido el desarrollo de una nueva síntesis del comunismo: el nuevo comunismo.
En BREAKTHROUGHS, The Historic Breakthrough de Marx, y The Further Breakthrough with the New Communism. Un resumen básico (y aún más extensamente en el libro El nuevo comunismo),discuto extensamente cómo el nuevo comunismo es "una continuación de, pero también representa un salto cualitativo más allá, y de alguna manera importante una ruptura con, la teoría comunista tal como había sido desarrollada anteriormente".1 Como dimensiones decisivas de esto, junto con centrar la atención en la declaración concisa de Marx sobre las "4 todas", el nuevo comunismo analiza, y da gran énfasis a, la importancia de la lucha por la liberación del pueblo negro y otros pueblos oprimidos (comúnmente conocidos popularmente como personas de color), así como la emancipación de las mujeres, como componentes indispensables y poderosas fuerzas motrices en la revolución comunista. El nuevo comunismo también ha fortalecido la comprensión de la importancia de proceder sobre una base internacionalista, con la orientación de dar "prioridad fundamental al avance de la lucha revolucionaria, y el objetivo final del comunismo, en todo el mundo".2
Aplicando el nuevo comunismo al problema de hacer la revolución, particularmente en un país poderoso como este, he desarrollado un enfoque estratégico básico para esta revolución, y también he escrito una visión amplia y un plan concreto para una sociedad radicalmente nueva y emancipadora, en la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte.3 Y, como escribí en BREAKTHROUGHS,"el desarrollo del nuevo comunismo es un trabajo en progreso, una parte importante de la cual es continuar aprendiendo y sintetizando aún más lo que ha venido antes, en la primera gran ola de la revolución comunista, comenzando con el avance histórico de Marx".4
Finalmente, uno de los elementos más esenciales y cruciales del nuevo comunismo es la lucha decidida que he librado para erradicar del movimiento comunista la noción venenosa de que "los fines justifican los medios" (que cualquier medio está justificado si el objetivo es, o se proclama que es, justo). Junto con esto, he enfatizado que el propósito y el objetivo de la revolución comunista no es la venganza (y la noción de que "el último será el primero, y el primero el último") sino que es la emancipación de la humanidad,con la eliminación de todas las situaciones en las que las personas se dividen en "primero y último".
Subyacente y corriendo a través de todo esto es el hecho de que el nuevo comunismo
representa y encarna una resolución cualitativa de una contradicción crítica que ha existido dentro del comunismo en su desarrollo hasta este punto, entre su método y enfoque fundamentalmente científico, y los aspectos del comunismo que han ido en contra de esto.
Lo más fundamental y esencial en la nueva síntesis es el mayor desarrollo y síntesis del comunismo como método y enfoque científico, y la aplicación más consistente de este método científico y enfoque de la realidad en general y en particular la lucha revolucionaria para derrocar y desarraigar todos los sistemas y relaciones de explotación y opresión y avanzar hacia un mundo comunista. Este método y enfoque subyace e informa todos los elementos centrales y componentes esenciales de esta nueva síntesis.5
De todo esto se puede ver claramente que es una distorsión, del tipo más crudo, afirmar que el comunismo (el marxismo, en su continuo desarrollo) sólo habla a la clase, y simplemente plantea las cosas como "clase contra clase", mientras que no se ocupa de otras dimensiones importantes de la opresión y la lucha por la emancipación de esa opresión. Una vez más: el marxismo, en su desarrollo desde la época del propio Marx hasta el presente, ha sido y es hoy el enfoque más amplio de la realidad en su conjunto, y específicamente de la transformación del mundo, con el objetivo de emanciparse de toda forma de explotación y opresión en todas las dimensiones de las relaciones humanas.
Próximo artículo de Bob Avakian en revcom.us:
- "CONTROL DEMOCRÁTICO OBRERO"—UNA ILUSIÓN DAÑINA:
IMPOSIBLE
BAJO EL CAPITALISMO, DESTRUCTIVA BAJO EL
SOCIALISMO Necesitamos una Transformación Revolucionaria de la Sociedad y del Mundo— No una Continuación Democrático-Burguesa, o Restauración, del Capitalismo
Publicado recientemente:
- No hay derecho a matar con religión
Las "exenciones religiosas" no son una razón legítima para rechazar las vacunas - Por qué el mundo está tan desordenado y qué se puede hacer para cambiar radicalmente esto:
una comprensión científica básica - Abolición: real e ilusoria
- Marxismo vivo vs.
marxismo vulgarizado que libera la revolución, no reformismo sin vida
_______________
NOTAS:
1. AVANCES, El avance histórico de Marx y el avance adicional con el nuevo comunismo. Un resumen básico está disponible en revcom.us. Esta declaración sobre el nuevo comunismo en BREAKTHROUGHS se cita de Bob Avakian (BA) — Biografía oficial, 2017 ,que está disponible en el Instituto Bob Avakian(thebobavakianinstitute.org)y revcom.us. El libro de Bob Avakian, The New Communism, The science, the strategy, the leadership for an real revolution, and a radically new society on the road to real emancipation (Insight Press,2016), se puede ordenar a través de revcom.us. [volver]
2. De la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte,escrito por Bob Avakian, que también está disponible en revcom.us. [volver]
3. El enfoque estratégico de la revolución en este país, como parte importante de la lucha revolucionaria que apunta al comunismo en todo el mundo, se expone en varias obras de Bob Avakian, incluido el discurso de 2018 Por qué necesitamos una revolución real y cómo podemos realmente hacer la revolución (elvideo y el texto de este discurso están disponibles en revcom.us), así como el artículo Una revolución real: una oportunidad real para ganar, Desarrollando aún más la estrategia para la revolución,que forma parte de una colección de artículos Bob Avakian: Escritos en 2020: un año trascendental,disponible en revcom.us. Esta es una pregunta profunda con la que Bob Avakian continúa lidiando a nivel estratégico, teniendo en cuenta la situación aguda y continuamente agudiza en este país, como se habla en A Declaration, A Call To Get Organized Now For a Real Revolution, de los revcoms, y se explica en el artículo de Bob Avakian, Este es un raro momento en que la revolución se hace posible: por qué es así y cómo aprovechar esta rara oportunidad,los cuales también están disponibles en revcom.us [volver]
4. AVANCES, El avance histórico de Marx y el avance adicional con el nuevo comunismo. Un resumen básico [volver]
5. Seis Resoluciones del Comité Central del Partido Comunista Revolucionario, Estados Unidos, 1 de enero de 2016,disponibles en revcom.us (énfasis en el original). [volver],...¡¡---
WWW.REVCOM.US/ PERIÓDICOREVOLUCIÓN da vida a un análisis científico de los principales acontecimientos en la sociedad y el mundo: por qué están sucediendo, cómo se relacionan los diferentes eventos y desarrollos entre sí, cómo todo esto se relaciona con el sistema bajo el que vivimos, dónde se encuentran los intereses de las personas en relación con todo esto, cómo la revolución es de hecho la solución a todo esto y cuáles son los objetivos de esa revolución, cómo los diferentes puntos de vista y programas se relacionan, positiva o negativamente, con la revolución que se necesita, y cómo las personas pueden moverse, y se están moviendo, para construir hacia esa revolución. Revcom.us/Revolución es la guía, el pivote, la herramienta crucial para atraer, orientar, entrenar y organizar a miles, e influir en millones, luchando contra el poder y transformando al pueblo, para la revolución, acelerando y preparándonos para el momento en que podamos ir por todo, con una oportunidad real de ganar.
Suscríbete a revcom.us | Donar a/Mantener | revcom.us Envíe su correspondencia a revolution.reports@yahoo.com,...¡¡¡---
UNA VERDADERA REVOLUCIÓN: UNA OPORTUNIDAD REAL DE GANAR | revcom.us / :
Desarrollo ulterior de la estrategia para la revolución
Desarrollo ulterior de la estrategia para la revolución
En la Parte II de Por qué necesitamos una revolución real y cómo podemos realmente hacer la revolución,como una aplicación importante del nuevo comunismo que he desarrollado durante varias décadas, hablo directamente del hecho de que todo lo que estamos haciendo ahora debe apuntar a algo muy definido: una situación revolucionaria. En ese discurso (así como en una serie de otros trabajos), he discutido las características clave de una situación revolucionaria, incluido el elemento crucial de un pueblo revolucionario en millones, en el contexto de una profunda crisis para todo el sistema. Aquí, quiero centrarme en lo siguiente de la misma parte (II) de "Por qué necesitamos/cómo podemos":
necesitamos trabajar de nuevo desde esa situación [revolucionaria] y lo que se requeriría entonces, cómo se tendría que librar la lucha total, para tener una oportunidad real de derrotar a las poderosas fuerzas violentas de este sistema.1
A continuación, en la Parte II, una discusión de los principios clave que tendrían que guiar a las fuerzas revolucionarias que libran una lucha tan total, cuando se hayan dado las condiciones para ello. Pero, por supuesto, el problema de derrotar realmente a las poderosas fuerzas violentas de represión de este sistema (y a las fuerzas contrarrevolucionarias aliadas con ellas), incluso en las condiciones radicalmente cambiadas y más favorables de una situación revolucionaria, representa un desafío difícil y complicado. Por lo tanto, incluso ahora, cuando las condiciones requeridas para esta lucha total aún no existen, es necesario, y de gran importancia, continuar lidiando con la teoría y la concepción estratégica y los principios involucrados.
La lucha contra el fascismo ahora y la lucha total futura
Una dimensión importante de todo esto se aborda en lo siguiente: hablar de los desafíos para enfrentarse al régimen fascista de Trump y Pence y su "base", y cómo esto se relaciona con el objetivo fundamental de la revolución de acabar con todo este sistema que ha dado lugar a este fascismo:
Lo que se necesita con urgencia es una lucha masiva contra el fascismo del régimen de Trump y Pence y una oposición decidida a la "base" que está movilizando en su apoyo. Esta lucha debe librarse de una manera seria, de acuerdo con lo que realmente está en juego, no buscando o iniciando la violencia, pero tampoco acobardada a la sumisión por las acciones de los fascistas.
Y lo que se necesita, al trabajar hacia la solución fundamental a todo esto, es librar esta lucha antifascista como parte de acelerar —"acelerar"— el desarrollo de las cosas hacia el punto en que sea posible llevar a cabo la revolución, la lucha total, para finalmente poner fin a todo este sistema de capitalismo-imperialismo,con todos los horrores que ya ha provocado para las masas de la humanidad, y los horrores aún peores. se desatará si se permite que continúe, cuando todo esto sea completamente innecesario y exista la base y la posibilidad de un mundo radicalmente diferente y mucho mejor.2
Hastening and preparing for the revolutionary showdown needs to proceed, and is proceeding, in accordance with the basic principles for the revolution that are concentrated in the 5-2-6, including Point 6 of the Six Points of Attention for the Revolution:
We are going for an actual overthrow of this system and a whole better way beyond the destructive, vicious conflicts of today between the people. Because we are serious, at this stage we do not initiate violence and we oppose all violence against the people and among the people.3
At the same time, it is noteworthy that the threats of violence, and actual violence, by fascist thugs, often heavily armed, have not succeeded in intimidating people from righteously protesting against institutional racism and police terror, and in fact there have even been instances where disciplined groups of Black people have shown up to make very clear that they will defend protesters from attacks by these fascist thugs. And it is important to keep the following clearly in mind, especially given the threats and inclination to violence of the fascist thugs who have attacked demonstrations and even stormed into government buildings while armed:
To a significant degree now, the conflict between the sections of society upholding this fascism and those opposing it, from various different perspectives, is shaping the terrain on which the struggle for revolution must be carried out; this conflict is likely to intensify, and could erupt further in violent confrontation, and in any case it would be a significant factor in the context of an all-out struggle between revolution and counter-revolution.4
In line with what is said there, it is even possible that this “conflict between the sections of society upholding this fascism and those opposing it” could at some point, in combination with the heightening and intensifying of other key contradictions, lead to (or develop into) the all-out fight. And this conflict would also likely influence where different sections of people, within different institutions, would be inclined to line up (or could be won to line up).
Defeating “Encirclement and Suppression”—Carrying the Revolutionary Fight Forward
With all that, however, it is very likely that, when it comes down to it—when the revolutionary situation has finally emerged and the all-out struggle is underway—the main thing the revolution would then need to confront would be “the institutional forces of the old ruling class,” even while this would almost certainly involve a significant element of “a civil war between two sections of the people,” and this element would interact with (and influence) the conflict between the revolutionary forces and “the institutional forces of the old ruling class.”5
With this in mind, there is the need to take into account the following, even as it is coming from the point of view of the counter-revolutionary forces of the old, oppressive order:
The only way [for the counter-revolution] to gain the necessary control is to garrison troops 24/7 among the civilians; periodic “sweep” or “cordon and search” operations, even when conducted by counterinsurgents as cruel as the Nazis, fail because civilians know the rebels will return the moment the soldiers leave and exact a terrible revenge on anyone who collaborated with them. The populace will embrace the government only if it is less dangerous to do so than to support the insurgency, which is why successful population-centric policies aim to control the people, not to win their love and gratitude. As John Paul Vann, the legendary American adviser in South Vietnam, said, “Security may be ten percent of the problem, or it may be ninety percent, but whichever it is, it’s the first ten percent or the first ninety percent. Without security, nothing else we do will last.”6
This statement presents things in a crudely distorted and upside-down way: It is not the revolutionary forces that would bring down murderous violence against the masses of people; it is the military forces fighting to maintain the oppressive and exploitative system of capitalist imperialism who would do so in the attempt to terrorize people into supporting the counter-revolution. In opposition to that, the revolutionary fighting forces, guided by and proceeding in accordance with the basic principles of the new communism, would work to win the support of the people through applying an approach and methods that flow from and correspond to the emancipating goals of the revolution. Nevertheless, in spite of the reactionary viewpoint and distortion of the author of the above-quoted statement, it raises something very important, whose implications would need to be taken into account in the strategic approach of the revolutionary forces.
This points to the need to include the following in the basic strategic approach that is discussed in Why We Need An Actual Revolution And How We Can Really Make Revolution, Part II, as the basis for winning (actually defeating them) in the future conditions of a profound revolutionary crisis and with a revolutionary people in the millions:
There would need to be an added emphasis on the need for the all-out revolutionary fight to be country-wide in scope, from the beginning, or very quickly after the start, for the revolutionary forces to have organized strongholds of support in many different parts of the country—and to have the ability to act simultaneously, or in quick succession, in many different parts of the country (to effect a “popcorn” phenomenon of actions breaking out repeatedly and in quick succession all over the country)—in order to effectively counter the “encirclement and suppression” of the revolution by the counter-revolution, and in particular the ability of the counter-revolution to not only concentrate forces against but to actually occupy the areas that constitute the strongholds of support for the revolution (even while those strongholds are not yet being openly controlled and administered by the revolution), particularly in the early stages of this all-out fight.
The above would constitute an important further development of what is spoken to in Why We Need An Actual Revolution And How We Can Really Make Revolution, Part II, in terms of the strategic approach and principles that would need to be applied in waging the all-out fight in the most effective way, in accordance with the fundamental orientation and goals of the revolution, in order to have a real chance to win, once the conditions that would make that possible had been brought into being.
At the same time, it needs to be strongly emphasized that none of this will be possible—and even the development of a truly profound crisis in society is very likely to be resolved in a negative, or even a very negative and potentially disastrous, way—if there is not “an organized vanguard force with the vision and method, strategy and plan—and deepening ties among masses of people—to actually lead the fight to defeat and dismantle the violent repressive force of the existing system and its power structure, and to bring into being a new revolutionary system that can provide the means for people to radically transform society toward the goal of abolishing oppression and exploitation.”
Bringing forward an organized movement for revolution, numbering not just in the hundreds but in the thousands—growing numbers of people with a basic scientific understanding of the need and possibility for revolution, grounded in the new communism, and concretely working together to apply the strategy laid out in “Why We Need/How We Can” to “hasten” and prepare for, and then lead millions to seize on, the revolutionary situation when it has fully ripened—this is the critical immediate challenge and goal for all those who hunger for the chance to bring a radically different and much better world into being.
1. The text and video of this speech by Bob Avakian (Why We Need An Actual Revolution And How We Can Really Make Revolution) are available at revcom.us.
Besides what is said in that speech, in terms of key elements of a revolutionary situation, this question is also addressed in a number of other works by Bob Avakian, including the following:
An actual revolution requires two essential factors: a revolutionary situation, and a revolutionary people in their millions. And these two factors are closely interconnected.
A revolutionary situation involves not just a crisis in society in some general sense but a situation where the system and its ruling powers are in a profound and acute crisis and millions and millions of people refuse to be ruled in the old way—and are willing and determined to put everything on the line to bring down this system and bring into being a new society and government. Key components and signs of a revolutionary crisis are that the violence used to enforce this system is seen by large parts of society for what it is—murderous and illegitimate—and that the conflicts among the ruling forces become really deep and sharp, and masses of people respond to this not by falling in behind one side or the other of the oppressive rulers, but by taking advantage of this situation to build up the forces for revolution.*
* Bob Avakian has also characterized a revolutionary situation this way:
What is a Revolutionary Situation? A deep crisis and sharpening conflicts in society and in the government and ruling circles, where they cannot find a way to resolve these conflicts—in society and among their own ranks—which do not make things worse for them and call forth more resistance and further undermine people’s belief in their “right to rule” and in the “legitimacy” of their use of force to maintain their rule; programs of “reforming” the system are shown to be bankrupt, totally unable to deal with what more and more people recognize as profound dysfunction and intolerable injustice of the whole setup; those, in society as well as among the ruling class, who are trying to enforce the existing system are on the political defensive, even if lashing out; millions of people are actively seeking radical change, determined to fight for it, willing to put everything on the line to win it, and searching for a force to lead them in doing so; and a solid core of thousands is united around a leadership, an organized vanguard force with the vision and method, strategy and plan—and deepening ties among masses of people—to actually lead the fight to defeat and dismantle the violent repressive force of the existing system and its power structure, and to bring into being a new revolutionary system that can provide the means for people to radically transform society toward the goal of abolishing oppression and exploitation.
The above is a footnote to the article by Bob Avakian, “Boomers”—”X,Y,Z”: The Problem Is Not “Generations,” It’s the System; this footnote includes a passage from another work, Bob Avakian Responds To Mark Rudd On The Lessons Of The 1960s And The Need For An Actual Revolution. These works are also available at revcom.us. [back]
2. Bob Avakian On Civil War And Revolution. This article by Bob Avakian is available at revcom.us. [back]
3. The 5-2-6 refers to the 5 STOPS—five deep and defining contradictions of this system of capitalism-imperialism—5 ways in which this system oppresses people, plunders the environment, wages unjust wars and continually commits massive crimes against humanity; the two choices articulated by Bob Avakian (“we have two choices: either, live with all this—and condemn future generations to the same, or worse, if they have a future at all—or, make revolution!”); and the Six Points of Attention for the Revolution. The full presentation of the 5-2-6 can be found at revcom.us. [back]
4. These statements, cited in Bob Avakian On Civil War And Revolution, are originally from Why We Need An Actual Revolution And How We Can Really Make Revolution. [back]
5. Estas declaraciones, citadas en Bob Avakian On Civil War And Revolution,son originalmente de Why We Need An Real Revolution And How We Can Really Make Revolution. [volver]
6. Max Boot, Ejércitos invisibles, una historia épica de la guerra de guerrillas desde la antigüedad hasta el presente (LiverightPublishing, 2013). La cita aquí es del capítulo final, "Implicaciones" (p. 563), énfasis añadido. [volver]
No hay comentarios:
Publicar un comentario